Capítulo 16 : Preocupación

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-¡NEZUKO VEN! - grita alarmado y preocupado Tanjiro en cuanto vio llegar al zorro.

La joven Kamado acudió al llamado de su hermano algo somnolienta, pero todo su sueño y cansancio se esfumó al ver al kitsune tirado en el piso y cubierto de sangre, que en su mayoría emanaba de su boca y cabeza.

-Ayúdame a ponerlo en la cama, por favor - contiene una lagrima el pelirrojo intentando desesperadamente levantarlo por su cuenta, pero en su estado le era completamente imposible.

-Debemos quitarle la ropa que está con sangre - dijo la menor mirando al espíritu asustada, el cual cada vez que respiraba le escurría algo de sangre por la nariz, además de tener la mitad de la cara cubierta de ella con evidentes golpes.

-Vamos Oni-san- Anuncio para poder levantarlo a la vez, entre ambos lograron ponerlo en la cama y empezaron a retirar las prendas de ropa hasta que quedó desnudo al no llevar ropa interior.

-Kyojuro... - Tanjiro puso una mano sobre su mejilla conteniendo lágrimas que amenazaban con caer. A siempre vista podía notarse más de una costilla rota y su abdomen totalmente morado por los golpes, sus brazos heridos por haberse defendió con ellos.

Nezuko sacó de su bolsillo algunos pergaminos que el zorro le había entregado con anterioridad concentrándolos en su mayoría en el pecho bajo la atónita y curiosa mirada de su hermano, quien no sabía que ella contaba con ellos.

Tanjirou eligió no preguntar por el momento

-Él me entregaba uno siempre que te hacías daño al entrenar... - dejó salir sin más la menor, poniendo un pergamino sobre la cabeza del zorro, tapando su ojo izquierdo.

El joven abrió los ojos sorprendido antes de llevarse la mano al pecho y contener las lágrimas - Nunca me abandonó...- susurró con la voz cada vez más rota.

La joven abrazó a su hermano con cariño, Kyojuro siempre le pidió mantenerlo en secreto y entendía que su hermano debía procesarlo - siempre ha estado pendiente de nosotros, en especial de ti -

-He sido un maldito egoísta, por mi culpa está como está-

-No pienses eso, eres el mejor hermano del mundo - decía sin soltarlo de su abrazo, sabía perfectamente que las cosas últimamente habían sido todo un caos, pero no permitiría que su querido hermano se despreciara de esa forma.

-Casi te dejo sola por hacer caso a esos tipos - le devuelve el abrazo apretándolo con un poco de fuerza, lamentándose profundamente.

-Debes confiar más en él - le respondió ella mirando al kyubi en la cama el cual aún se veía fatal a pesar de estar cubierto de pergaminos.

-Pero si es un kyubi muy fuerte -mencionó el mayor de los hermanos, tocando dos de sus colas desesperado, esperando alguna reacción - ¿No debería estar ya curado?-

-No lo sé Oni-san, yo también espero que pueda despertar pronto... -

-Lo hará, tiene que hacerlo, Nezuko-

-Traeré algo para limpiar su rostro - dijo soltando con suavidad a su hermano para retirarse de la habitación.

-Kyojuro, por favor despierta- le agarró la mano derecha con una mirada preocupada, acariciando el dorso lastimado con suavidad, pero Kyojuro no tenía intención de despertar, no aún, los pergaminos no estaban siendo efectivos ya que ni siquiera se habían cerrado sus heridas.

-¿Por qué no funcionan estos papeles?-

Las horas fueron pasando, Tanjiro se había dormido junto al zorro en la cama abrazándose a sí mismo mientras que la menor dormía en el sofá.

Tanabata ( Kyotan AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora