Capítulo 17: Curación

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Kyojuro estaba por desfallecer, concentraba lo poco que poder que tenía en mantener su forma infantil para no complicar más las cosas, respecto a sus rasgos de espíritu nada podía hacer con ellos, estaba cada vez más débil.

-Aguanta, ya queda menos - decía Tanjiro jadeando un poco al llevar un ritmo muy acelerado corriendo y subiendo la montaña.

La temperatura del cuerpo del zorro aumentó bruscamente al igual que su respiración se agitaba más, la sangre corría por su nariz y se tornaba de un color oscuro, perdiendo la conciencia pero por suerte manteniendo su tamaño infantil.

-¡Llegamos!- celebró feliz cuando pisó el bosque , a pesar de estar lleno de arañazos, suciedad y sudor estaba contento, bajando la mirada al zorro que empezó a brillar de forma extraña.

Al ser un espíritu del bosque su vida inicia y termina en el bosque, su fuerza y poderes provienen de él y si lo merecía el bosque le retribuiría salvándole la vida, se oyeron chillidos a lo lejos, el pequeño Kou corría a toda velocidad para llegar donde ambos se encontraban.

''Padre, ¡has vuelto! ''

Kyojuro abrió los ojos, le tomaría tiempo recuperarse - Puedes bajarme ahora - dijo en un débil susurro al menor, habían varios conejos alrededor atentos a los movimientos de ambos jóvenes.

El pelirrojo se arrodilla despacio con el zorro en sus brazos quien empezó a brillar más que antes pero no se soltaba de Tanjirou, también estaba preocupado por su vida, por no cumplir su promesa de protegerlo.

Los animales de los alrededores no tardaron en acercarse y comenzar a tirar de la ropa del zorro, mientras mayor fuera su contacto con el bosque y todo lo que vivía en él, más probabilidades había de que se salvara.

Kou empezó a chillar para llamar a más animales indicando con su pata a Kyojuro, el resultado fue positivo. Todos incluido incluso una pequeña serpiente se fueron acercando al espíritu del bosque. Tanjirou estaba impactado.

Sango llegó volando seguida de sus polluelos, los cuales hace muy poco habían aprendido a volar, por ahora la depredación y supervivencia no importaban, su único objetivo era salvar a quien había asumido como su protector.

-Esto.. esto es increíble -susurra sorprendido el pelirrojo.

De la nada llegó un pequeño panda rojo, con moras en sus patas delanteras seguido de mapaches que llevaban ramas con flores en sus hocicos, Kyojuro podía sentir el agradecimiento de todos aquellos animales que se sentían protegidos gracias a su presencia y que antes se encontraban desamparados tratando de soportar el peso de la intromisión humana.

-Oh ¿para mí?- se rió al ver una ardilla darle una bellota, después de todo los Kamado también eran apreciados por los animales del bosque-Gracias pequeña-

Kyojuro terminó sentado apoyándose en un árbol, dando mimos a los animales que se le acaban con el pequeño Kou sobre sus piernas lloriqueando preocupado.

-Kyojuro - se puso a su lado con una ardilla en su hombro - Ánimo, estoy contigo-

El zorro a duras penas se levantó, apoyándose en el árbol, algunos animales jalaban su ropa suavemente para que se volviera a acostar, pero Kyojuro negó con una sonrisa, aún con su aspecto infantil tomó al menor de las mejillas y le dio un corto beso antes de caer de rodillas sin quitar esa dulce sonrisa de su rostro, parecía una despedida.

-¡NO TE MUERASSS! - Tanjiro lo abrazó pegándolo a su pecho empezando a llorar, acariciando los cabellos del rubio completamente asustado ante la posibilidad de perderlo.

-Tanjiro... Mi chico... - dijo a duras penas, sus heridas eran y graves que aún estando en el bosque rodeado de animales necesitaba algo más - No puedo morir... No sin protegerte... -

Tanabata ( Kyotan AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora