Día cinco: Problemas de viaje

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Kirishima está emocionado, es la primera vez que va a viajar en avión, y aquello no pasa desapercibido para nadie de su alrededor, pues la sonrisa en su rostro y sus ojos iluminados con aquel toque de alegre curiosidad delatan por completo su estado anímico.

Sin embargo, para Bakugou el panorama es distinto.

Él no está para nada feliz con aquel viaje que debe hacer.
Principalmente porque en el, además de tener que aceptar una pila de papeleos y quejas, tendrá que contraer matrimonio con una millonaria hija de papi.

Y no porque él quisiera, si no que porque su madre y el padre de la chica llevan arreglando este encuentro desde hace tantos años que simplemente siente que ya no hay de otra que aceptar.

El rubio suspiró con cansancio una vez se dejó caer en el asiento que le correspondía.

Esperaba que a su lado no se sentara uno de esos tediosos ancianos a los que les gusta narrar su vida de inicio a fin a la persona que tienen al lado.

- Damas y caballeros tomen asiento por favor, el vuelo está apunto de comenzar -dijo una arreglada señorita de piel blanca como la porcelana

Poco a poco la gente comenzó a sentarse, alegrando al cenizo al notar que un chico joven se sentó a su lado.
De esos que escuchan música o duermen todo el viaje.

Justo como él.

Claro que, para su mala fortuna, se había topado con un chiquillo extraño.
Como si un anciano viviera en su cerebro.

- Hey, hola, mi nombre es Kirishima -saludó el pelirojo, extendiéndole una mano amistosa que el cenizo acepto tomar solo por cortesía- ¿Y el tuyo? -preguntó

Katsuki se incorporó incómodo en su sitio, mirando por cortos segundos al teñido- Bakugou -respondió cortante

- ¡Genial! Hey, ¿Es la primera vez que estás en un avión? -preguntó nuevamente Eijiro, volteando su cuerpo hacia el cenizo, sintiendo su estómago ser presionado por el cinturón, sensación que ignoró para poder hablar más cómodamente con el rubio a su lado, quien sintió su ojo izquierdo parpadear comenzando a estresarse por el ataque de preguntas que le daba el pelirojo

- No -respondió

Eijiro sonrió aún más que antes al oír aquella respuesta, incomodando al cenizo por su insistencia en hablar con él.

- ¿Y siempre suele tardar tanto? Es que es mí primera vez y siento que es como si nunca despegara -comentó, mirando a su alrededor efímeramente antes de regresar sus grandes ojos al rubio

- Mmm -murmuró

La respuesta del cenizo dejó un poco confundido al pelirojo, pero no se detuvo, en cambio siguió conversando de temas relacionados al avión con este.

Aquello cansó rápidamente a Katsuki, quien, lentamente, sacó sus auriculares de su bolsillo, uniendolos a su teléfono celular, mirando un segundo al pelirojo que no paraba de hablar y luego, sin responder o indicar que no seguiría con la conversación, se los colocó e inclinó en su asiento, cerrando los ojos.

Kirishima se dio cuenta tarde de que estaba hablando solo, avergonzandose de aquel hecho, pero comprendiendo, de cierto modo, que no ha todos les gusta conversar durante un viaje.

Se volvió a su posición normal y se preparó cuando el despegue finalmente sucedió.

La turbulencia inicial lo preocupó un poco, pero, al ver que el cenizo ni siquiera abrió los ojos cuando esto estaba ocurriendo, se calmó.

*.✧KiriBaku Week 2020✧.*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora