Las palabras del silencio

Conversaciones

Me dieron el alta dos dias después al no encontrar nada fuera de lugar en mi organismo.

Seguí dandole vueltas a lo que pasó aquella tarde durante el trayecto a casa, pero no encuentré ninguna explicación lógica. No se lo he contado a nadie, dirían que me lo estaba inventando o que fue por el golpe... quizá sea verdad.

Al llegar a casa me di cuenta de que tenía un mensaje en el móvil; Raquel,una de las mejores amigas que he tenido. Con todo el ajetreo de la mudanza se me olvidó escribirle antes.

"¡Noa! ¡¿Qué ha pasado?! te he llamado y como no contestabas llamé a tu padre, me ha dicho algo de que estabas en el hospital ¡Contesta de una vez!"

Raquel estaba preocupa y me sentía culpable asi que le contesté en seguida.

"perdona, es que he estado muy liada. No ha sido grave no te preocupes; mejor te llamo y te lo cuento todo"

No me dio tiempo a hacer la llamada, nada más leer el mensaje, Raquel me llamó.

- Tía, ¿¡Qué ha pasado?! ¿¡Què es eso de que has estado en el hospital?!

Escuché la voz preocupada de Raquel al descolgar. Sonreí al escucharla tan alterada, solía darle demasiada importancia a las cosas, pero me alegraba de volver a oir su voz.

- No ha pasado nada grave: tuve una bajada de tensión y me desmayé.

Dije repitiendo el diagnóstico de los médicos sin llegar a creermelo del todo.

- ¡Qué fuerte! y ¿cómo estas ahora?
- Bien, aunque muy cansada.

- Menos mal que no ha pasado nada.

Dijo con alivio

- Cambiando de tema; ¿como ha ido la mudanza y todo eso?

Dijo aún con algo de emoción en la voz.

- Bien, la casa es bastante vieja pero no esta nada mal. ¿ Qué tal va todo por allí?

- Como siempre, creeme no te pierdes nada, esto es incluso más aburrido sin tí.
- Pues aquí es peor.

Dije soltando una pequeña carcajada amarga.

- No será para tanto. ¿Aún no has conocido a nadie interesante?

- Interesante no, pero mi vecino me ha presentado a algunos amigos.

- ¿ En serio? y  ¿cómo es ese vecino tuyo?

Dijo con voz pícara.

- ¿ Es que siempre estas pensando en lo mismo?

Dije divertida.

- Bueno, ya que estas ahí, mejor aprovechar ¿no?

Soltó Raquel entre carcajadas.

- No tienes remedio

Suspiré negando la cabeza con una sonrisa en los labios.

- Pero me quieres.

Respondió con voz empalagosa.

- Te tengo que dejar, mi madre quiere que baje a cenar de una vez. Ahora tiene la mania de que cenemos toda la familia juntita ¡yupi!

Dijo con fastidio. Por lo que me solía contar, Raquel no mantenía una muy buena relacion con su familia.

- Adios, pasaló bien.

Bromee, a lo que mi amiga respondió con un bufido y acto seguido colgó el telefono. Guardé el movil con una sonrisa. Hablar con ella siempre me animaba.
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Bonita portada de @NinaHerondale16