¿Loco? ¿Yo?

Prólogo

Harry Potter abrió lentamente los ojos, le dolía todo el cuerpo y sentía los párpados pesados. Estaba en su cama de la torre de Gryffindor, en cualquier momento Ron Weasley, su mejor amigo, lo despertaría gritándole que se les hacía tarde para el desayuno, entonces bajaría y comería una tostada con mermelada y un jugo de calabaza para luego...

Abrió los ojos y miró alrededor, todos esos pensamientos sobre un delicioso desayuno en el Gran Comedor se fueron por el caño, estaba tirado en el suelo, lo que explicaba el dolor muscular, en una pequeña celda hecha de piedra, a través de los barrotes, podía ver una elegante silla de caoba, junto con una mesita a juego del mismo material, galletas con chispitas y un juego de té descansaban a la vista del hambriento chico. ¿Dónde carajo estaba? Lo último que recordaba era irse a su cama luego de un cansado día de clases.

Escuchó unos pasos acercarse, lenta y tranquilamente, como si fuera a su habitación a leer de lo más normal, en vez de ir a ver a un prisionero ilegalmente encerrado en una celda.

Vio un hombre que rondaba los veinte, alto, de buen cuerpo y con unos lindos ojos rubí, el hombre lo miraba con una ceja alzada ¿Quién era ese?

-Es Tom Riddle, conocido como Lord Voldemort, nos secuestró ayer, pero no nos hizo nada-Dijo una voz que conocía muy bien. Así que los había secuestrado el Lord Oscurito ¿Por qué nunca le contaban de esas cosas? Dos horas hablando de una batidora eléctrica y no se molestaron en decirle : "Oye, por si acaso, nos secuestro un loco que quiere matarnos desde nuestro nacimiento".

-Hola, soy Harry, es un gusto conocerlo Lord Oscurito Tom, valla... eso no suena nada aterrador, ahora entiendo porque prefieres Voldemort-Dijo rápidamente el chico con una sonrisa.

-Pensé que querías que te llamara Henry

-Eso fue ayer, hoy soy Harry y creo que mañana seré Daniel ¿O era Emma?. No lo recuerdo, Tamara es la que se sabe el calendario.

El Señor Oscuro lo miro confundido, no tenía ni la más mínima idea de que es lo que estaba diciendo. Harry Potter entendió el gesto y su sonrisa se amplió más.

-Así que... no te lo contaron.

-¿Qué cosa?

-Lo siento, aun no puedo decirte, lo pondré a votación.

Tom Riddle salió de su campo de visión, notablemente molesto y confundido, odiaba no saber o entender algo, y desde que descubrió que ese chico era su Horrocrux, le era imposible matarlo.

Harry hizo un pequeño puchero, genial, había espantado a su única fuente de diversión y ahora tenía que distraerse mirando la pared.