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||Narrador||

Los detectives Kang e Im han revisado la fotografía que sacaron ilegalmente al computador de un detective de verdad.
¿Si habrá repercusiones?, claramente, pero si no se entera In todo bien, piensa Yong.

La demanda más reciente es la de acoso sexual puesta por Kang Yong hace unos días acompañada de su padre.
No obstante, está bajo investigación debido a dos homicidios. Uno de los nombres escritos llama la atención de JaeBum, ya que es el mismo que sale en el certificado del orfanato. Otro cargo es secuestro.

"Es la madre de NiYa", pensó Yong y fue confirmado por la tensión de su amigo.

El celular no dejaba de sonar, era la hermana eufórica diciendo que tenía que ir urgentemente al hospital, ya que su madre corría peligro o eso pudo entender detrás de los sollozos de la chica.JaeBum insistió en ir a dejarla al hospital a lo que aceptó.

—¡¿Qué ocurrió?!— grita Yong al ver a su hermana apoyada en la pared del hospital. La mayor en cuanto ve a la chica comienza a llorar a mares—¡NiYa!—grita nerviosa.

—solo entré a casa ... solamente la vi en el suelo sangrando.

Y es que en aquel entonces, desde que Yong le entregó aquella caja con las cosas que su esposo le había estado mandado a su hija le hizo click. Antes, no sabía por qué su pequeña hija odiaba tanto a Kim Yeonggyu, no supo el por qué huyó de casa. Se culpó por no haberle contado quién era su padre, se castigó por pensar que fue por no ser la madre que quería por el hecho de tener que trabajar, pero toda esa angustia quien se encargó de transformarlo en odio, fue el sociópata de Yeonggyu, quien le lavaba el cerebro a su esposa con que la chica tenía problemas, era rebelde, le habla siempre mal a él y un sin fin de cosas, que también la había visto en malos pasos con chicos a tan corta edad y cosas por el estilo.

Desde que aquel horrendo accidente en el río Han fue transmitido en señal abierta, Yeonggyu pensó en su amor y el por qué había huido. Las horas pasaban y ni una llamada. Llamó a su compañero quien se encargaría de llevarla hasta su nuevo hogar, pero no cogía el celular. Al día siguiente había estado organizando asuntos; como hacer que su compañero fuera a la cárcel debido al automóvil, ya que lo vincula con otro caso que aún no se ha cerrado por alguna razón.

En cuanto terminó de idear su coartada fue por sus cosas a casa, ya que no faltaba nada para que su querida Yong fuera con él.

—¿hablaste con ella?—interrumpe Jaebum mientras sorbe sus mocos.

—Quería explicaciones,la verdadera historia—explica Ni Ya.

—Si sabes que sin importar qué,ella es y siempre será tu madre—le dice Yong abrazando a la chica.

—Yong...lo siento,lo siento...

Y es que Ni Ya se culpaba de todo el infierno que la hizo pasar, de ignorar lo que ocurría. Sentía que algo estaba mal, pero se dejó manipular por los maliciosos comentarios que desde temprana edad le decía a la pequeña por desprecio a Lee Seok Jin, ya que se parecía demasiado o eso fue hasta que comenzó a crecer.
Niya se culpó de que él fuera su verdadero progenitor.

—¿por qué?—pregunta Yong confundida, pues no sabe que NiYa sentía culpa.

Yong, teniendo ahora el hombro de su padre, le llama diciendo lo ocurrió. El hombre sin dudar llega hasta al hospital para ver la condición en la que está su amor juvenil, aquel que le hace suspirar a pesar de los malos momentos.

—Sabía que Yeonggyu era una pésima persona. No pude salvar a Dagyeong. Si tan sólo no me hubiese ido...—habla SeokJin para luego sentir las lágrimas correr.

🌙YONG  || PARTE IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora