Snow Cotton [YoonJin]

Seven.

Dos zanahorias de una estatura promedio corren a toda velocidad por las calles cubiertas de nieve, no es lo demasiado rápido como para romper algún récord pero la vida de esos dos chicos depende de ello. Dramatizando un poco, claro. 

- ¡Si llegamos tarde será culpa de YoonGi hyung! - Gritó el pequeño castaño, optando por tomar un descanso. Su cuerpo doblado y su boca tratando de recibir todo el oxigeno que sus fosas nasales le han prohibido.

- Esto no pasaría si tuvieramos coche, hyung - Berrincheó el primo de aquel exhausto chico pálido. 

- En primer lugar, Taehyun te pudiste haber quedado con tu hermano, así que si llegas tarde no es mi problema, es de NamJoon y su esposo por haber querido un rato a solas - Les responde una vez los logra alcanzar, no es demasiado mayor pero su espalda está apunto de quebrarse, su cuerpo pasándole factura de lo mucho que se exige para darle una vida económicamente estable a su pequeño primo. 

Los dos menores ladean sus cabecitas, saben que cuando el mayor usa un tono más grave significa que ellos deben obedecer y no faltarle el respeto o terminarían ambos castigados. Taehyun aún no entendía como es que eso pasaba, él ni siquiera era familiar suyo.

- En segunda, llevo horas tratando de decirles que ya es demasiado tarde - YoonGi los observa botarse en la helada nieve y patalear, debe recordar regañar a HoSeok por enseñarles a ser tan dramáticos, sigue sin entender como es que NamJoon acabó con alguien tan opuesto a él. Ellos suelen responder que para el amor no hay explicaciones ni respuestas correctas, es algo indescifrable y sorprendente. Ni siquiera recuerda haber sentido alguna vez una verdadera atracción hacia alguien, eso no significa que no haya tenido parejas alguna vez, es decir, tiene 27 años y tal como las películas pintan las cosas, él ya debería estar planeando su boda pero todas las personas que ha conocido desaparecen en un abrir y cerrar de ojos. Antes pensaba que era muy joven para atarse a alguien, ahora cree que es demasiado grande para ello. Un rápido sabor amargo se instala en su boca y recuerda que debería estar regañando a las zanahorias andantes.

- ¡Ah, hyung lo voy a demandar por haberme mordido! ¡Esto es un abuso de menores! - El pelimenta reacciona y sale de su enorme burbuja mental, está apunto de alegar que él ni siquiera lo a mordido ¿Es qué a caso no lo ve parado frente a ellos? 

- UNA RATA - Taehyun encoje sus piernas, su trasero helado gracias a la nieve y un pequeño conejo subiéndose a él para darle una pequeña mordida a su pierna .

- ¡SON DOS! - YeonJun está apunto de regresarle la patada que el otro conejito le dio en su mejilla, aprovechando que estaba acostado. YoonGi rápidamente lo jala del brazo luego de ver que el otro conejo regresa a su forma humana, aplastando al castaño.

Un gatito blanco y esponjoso se hace presente para ir hacia el conejito asustadizo, por instinto este retrocede hasta quedar arrinconado, desvía sus ojitos para ver que su hermano está por debajo de aquellos dos chicos groseros, comienza a darse cuenta que su hermano mayor no está con ellos, sabe que se han perdido y probablemente nunca más volverán a verse de nuevo, su pancita se esponja, un ataque de pánico llegandole al pequeño SooBin en lo que cree, es el peor momento de su cortita vida.

El gatito logra acercarse aprovechando que el conejito está distraído y lo envuelve con su colita sedosa para brindarle algo de calor, repite lo mismo que su madre hacía con él antes de morir, tiernos pero rasposas lamidas le obsequiaban caricias al suave pelaje del lagomorfo.