La razón del corazón ( Yoonmin, Taekook)

Irresistible ser

Yoongi entró por la puerta principal sin dejar de mirar a su novio quien no dejaba de llorar, lo abrazó con necesidad y amor, beso toda su cara para terminar en sus tiernos labios.
Jimin no reaccionaba, creía que estaba soñando, era él, su amor, su hermoso novio, quien lo abrazaba y besaba pronunciando palabras que no llegaba a entender.
-Yoon ¿realmente eres tú?- preguntó aún sin creer que lo te tenía frente a él.
-Hola amor, soy yo, soy Yoon- contestó con una enorme sonrisa de esas que a Jimin lo hacían derretirse.
-Pero, ¿qué haces aquí?, es decir, ¿cómo? No entiendo- dijo devolviendo el abrazo que su chico le daba.
-Bueno, me dieron un tiempo libre y solo pensé en correr hacía ti- contestó volviendo a sonreír.
-¡Oh por Dios! ¡Aún no lo puedo creer! Yo realmente te extrañé tanto, ¡realmente no sabes cuanto te extrañe!-
- y yo a ti- volvió a hablar Yoongi mientras acariciaba las mejillas de su tierno y sexy novio-
Jimin caminó hasta el sofá sin soltar la mano de Yoon, como si no quisiera que este desapareciera. Se acomodaron en el sillón y continuaron abrazados por un largo rato hasta que Jimin se soltó un poco acariciando todo lo que podía y besando dulcemente a su novio quien no dejaba de mirarlo con todo el amor que tenía para él.
De pronto los miedos, las dudas, el cansancio, el dolor desaparecieron para que todo fuese reemplazado por amor y calor, ese amor que solo ellos podían darse.
Luego de una charla de como iban las cosas para cada uno, Jimin preguntó lo que tanto le nublaba sus pensamientos.
-Yoon, ¿por cuántos días te quedarás?, no es que no quiera que estés aquí, al contrario me encantaría que no volvamos a separarnos, pero sé que eso no sucederá así que quiero estar preparado- gimoteo mirando fijamente a Yoongi.
- Bueno bebé la verdad es que vine para llevarte conmigo, no me iré hasta que resuelvas todo aquí y podamos subir juntos al avión con destino a nuestra nueva vida- dijo sonriente.
-Pero Yoongi todavía me falta terminar mi residencia y recibir mi diploma, dar mis últimos exámenes, es decir no será pronto, al menos me queda un mes y medio más aquí-
-Lo sé bebé pero ya no podía estar más tiempo lejos de ti, lo hablé en la empresa, dije que debía organizar cosas aquí y lo entendieron, me dieron el permiso, claro que tendré que hacer mi trabajo desde aquí, con mi computadora pero con la ayuda de Yen será mucho más fácil.
-¿Yen?- preguntó con un tono mordaz
Yoongi sonrió, adoraba que su chico sea algo celoso.
-Si Yen- dijo, - es mi asistente, es alguien en quien confío y es muy buena en lo suyo. Me ayudó muchísimo durante este tiempo y conoce muy bien mi trabajo, puedo quedarme tranquilo ya que sabe como manejar todo mientras yo esté aquí.
- Ya veo- dijo con una ceja alzada
Yoongi sonrió y apretó sus cachetes -dime que estás celoso, me encantaría que lo estés, me encantaría saber que no puedes más de celos pensando cualquier tontería acerca de Yen y yo- sonrío mientras hablaba.
- ¡Eres un idiota!- expetó mientras lo miraba con una sonrisa -si tuvieses algo con ella no la estarías nombrando, además no pienso ponerme celoso, mírate aquí estás esperando por mi, porque no puedes vivir sin mi!- dijo con algo de sorna en sus palabras.
Yoongi lanzó una carcajada, mientras se acomodaba encima de su novio y comenzaba a tocar todo su cuerpo, sin dejar de besarlo y volviendo a reír.
- ¡Estoy loco por ti! No puedo dejar de pensar en todo lo que voy a hacerte, te necesito tanto amor- gimió entre los labios de su chico.
-¡es lo que digo, no puedes vivir sin mi susurro en los labios de su amado
-Y aún sabiendo eso, le dejaste en claro a Yen que eras mi novio y no te gustó para nada saber que estaba en mi casa mientras me bañaba- dijo mientras arqueaba una ceja.
Jimin rodó sus ojos empujando a su novio para sacarlo de encima de él, -¡Idiota!- gritó - y así y todo no devolviste mi llamada-
Yoongi no podía dejar de sonreír, ver a Jimin celoso lo encendía a mil.
- Es verdad no llamé, pero en mi defensa, estaba a minutos de subirme a un avión para llegar hasta aquí, si llamaba se rompía la sorpresa- contestó
-¡Te amo! Demasiado, ni yo pensé que te amaría tanto- dijo Jimin con sus ojos rebosantes de brillo.
Yoongi atrapó los labios de su novio con sus propios labios, el beso comenzó lento para de a poco elevar el ritmo, el deseo era tangente, y ambos se dejaron llevar por este. La ropa cayó por cualquier lado y con besos y caricias se dieron la bienvenida, una que decía no volveremos a separarnos, por el bien de ambos.
Terminaron en la ducha, con más besos y más caricias con palabras de amor y con promesas que sabían iban a cumplir. Se acostaron juntos en la cama, que ahora usaba solo Jimin, llevaron algo de comida y vino para brindar.
-Debo dormir, mañana entro a las siete al hospital- dijo Jimin mientras acariciaba el pecho desnudo de su novio.
-Esta bien mi pequeño doctor, ¡te amo! Duerme ya- besó sus labios, sus ojos y su nariz, haciendo que Jimin lance pequeños gemidos.
-¡Tambien te amo!, te extrañé tanto- y cerró sus ojos para dormir entre los brazos del hombre que tanto amaba.
La alarma sonó con fuerza y el sonido se expandió por toda la habitación. Jimin abrió sus ojos viendo a Yoongi que lo miraba con ojos enamorados, se acercó y besó tiernamente sus labios.
-¡Buen día amor! Te haré el desayuno mientras te preparas para ir al hospital- dijo y volvió a besarlo.
Jimin bajó los escalones y se encontró con su hermoso hombre quien preparaba algo para comer.
-Sabes todavía creo que estoy soñando, no puedo creer que estés aquí- confesó mientras lo abrazaba por la espalda.
Yoongi se giró, tomó su barbilla y le dio un tierno beso mientras que con su otra mano acariciaba de manera pervertida el trasero del chico dejándolo totalmente aturdido.
-¿ya te diste cuenta que estoy aquí y no es un sueño? o ¿debo volver a demostrartelo?- preguntó mientras succionaba el lóbulo de su oído provocando que Jimin suspirara pesadamente.
-Estas aquí, ya entendí- contestó con los ojos cerrados y sus mejillas encendidas.
Yoongi sonrió ladino y volvió su atención a la comida que comenzó a servir para ambos.
-¿qué harás hoy? - preguntó mientras tomaba su café.
-Bueno creo que primero iré a ver mi pequeño Kookie, ya sabes lo extrañé, no tanto como a ti pero un poco si- contestó.
Jimin sonrió, sabía que Yoongi adoraba a Jungkook y que realmente lo había extrañado mucho más de lo que decía.
-Luego instalaré mi computadora y mis herramientas para comenzar a trabajar, ya sabes son vacaciones pero no lo son- dijo terminando su desayuno.
-¡Está bien! te llamaré en cuanto pueda, ya sabes no es fácil tener a mano mi teléfono mientras trabajo, pero prometo al menos hacer el intento- explicó mientras se ponía su abrigo para salir a la calle y subir a su auto.
Besó los labios de su hombre y se encaminó al hospital.
-Hey Jimin ¡Buen día! Te ves genial hoy- saludó su compañero quien se encontraba entrando al hospital al mismo tiempo que él.
-Hola Chanyeol, ¡buen día para ti también! Y gracias me siento bien hoy- respondió de forma amable.
Las horas en el hospital parecían interminables, ya había sido parte de tres operaciones, necesitaba un descanso y pensar que su sensual novio estaba en casa esperándolo hacía que su deseo aumentara. Nunca se quejaba de su trabajo y no le importaba las horas que pasaba allí pero ahora solo quería volver a los brazos de su hombre y hacer el amor hasta que su cuerpo dijera basta.
-Hola amor- dijo con su teléfono en el oído mientras intentaba sacarse la ropa del quirófano.
-Hola bebé, ¿qué tal tu día?
-Cansado! Con ganas de verte- respondió mientras alargaba un pesado suspiro.
-¿sabes a que hora sales? Preguntó mientras tecleaba en su computadora.
-Supongo que en dos horas, espero que así sea necesito estar contigo - contestó con un tono sensual para que Yoongi comenzara a encenderse.
-Creo que si no llegas iré yo allí y te encerraré en cualquier habitación para cogerte sin piedad- gimió por el aparato.
-mmm, ¿lo prometes?- preguntó ya sin poder aguantar el deseo de tenerlo cerca.
- lo juro- contestó, - esperaré las dos horas que dijiste y si no llegas iré a verte, no me importa cuánto tenga que esperarte-
-¡Te amo!- Soltó
-Yo más bebé-
Ya era medianoche y Jimin seguía enredado en el hospital, el jefe de cirugía le había pedido que siga de cerca a uno de los pacientes que habían operado durante el día, y claro está no podía dejar de hacerlo.
Cuando una de las enfermeras entró a la habitación a hacer el aseo correspondiente al paciente Jimin dejó de anotar los últimos avances y salió de allí rumbo a la sala de médicos a descansar un rato. Miraba la hora cada cierto rato y el deseo de irse a casa se había incrementado aunque sabía que al menos le quedaban allí varías horas más.
-¡Hey hermoso! ¿Cansado?- sintió que le hablaban.
-Hola Chan! Si bastante, y tu día ¿cómo ha estado?- preguntó para no ser descortés.
- ¡creo que en cualquier momento mi cerebro saldrá disparado de mi cabeza- comentó de manera exagerada.
Jimin soltó una pequeña sonrisa y Chanyeol no pudo despegar sus ojos de él.
-¿qué te parece si vamos por un café a la cafetería?, creo que no te has alimentado en todo el día- dijo con la esperanza de que Jimin aceptara.
-Esta bien, vamos- contestó
Llegaron a la cafetería del hospital y pidieron algo de comer y beber, comenzaron a charlar acerca del día agotador que ambos habían tenido. Entonces Chanyeol soltó lo que tenía contenido en su pecho.
-Oye Jimin, sé que no debería hacer esto pero tengo que decirlo antes de que mi cuerpo explote-
Jimin lo miró curioso
-Realmente me gustas demasiado- dijo mientras alcanzaba su mano la cual Jimin retiró de manera lenta.
Chanyeol le caía bien, le parecía un tipo guapo y quizás si su corazón no tuviese dueño le hubiese dado una oportunidad, pero las cosas no eran así y aunque no quería hacerlo sentir mal debía ser claro para que no se creara falsas expectativas.
-Chan, yo realmente aprecio tus palabras pero sabes que tengo una relación seria, estoy enamorado de alguien y no me gustaría que entre nosotros las cosas se pongan raras.
-Con tu novio quien vive del otro lado del mundo?- preguntó arqueando una ceja y con una pequeña sonrisa en los labios.
-No con su novio quien está aquí y viene a buscarlo para dormir juntos- se escuchó una voz gruesa que miraba al par sentados en esa mesa.
Jimin giró su cuerpo y abrió sus ojos, su rostro pintó una sonrisa de esas en las que sus ojitos se hacen pequeños y se levantó a tomar las manos del hombre que lo miraba con un toque de sensualidad y celos, vaya con muchos celos, pensó Jimin.
-¡Amor!- susurró mientras se levantaba del lugar y se acercaba a tomar su mano, - si viniste-
-Lo prometí- contestó sin dejar de mirar al tipo que se convertía en su enemigo por querer enamorar a su chico.
-Yoon el es Chanyeol, un compañero de trabajo- los presentó tratando que el momento sea menos incómodo, aunque era imposible.
-Un gusto- soltó su compañero
-Si claro- contestó sin dejar de mirarlo y apretando la cintura de su novio.
Jimin mentiría si dijera que la situación no le causaba gracia, su hombre estaba allí siendo posesivo y tan celoso, en lo único que pensaba era en besarlo hasta que sus labios se volviesen rojos de tanto apretar.
-Debo volver a urgencias- comentó el muchacho, entendiendo que nada tenía ya que hacer allí, el chico que le gustaba estaba con alguien más y eso no lo podía evitar aunque quisiera.
-Si ve con Dios- soltó Yoongi en un sonido ronco que demostraba lo incómodo que se sentía al verlo desesperado por su novio.
-¿En serio Min Yoongi?- preguntó con un tono jocoso luego de que su compañero se retirara.
-¿En serio Park Jimin?- re preguntó mirando con molestia al chico, -si no llego a tiempo el tipo estaría ahora intentando besarte, no lo culpo a cualquiera le dan ganas de besarte, eres demasiado hermoso, y sexy, y tierno y candente y provocador y MIO,- dijo ya con algo de mal humor en su tono, abrazandolo más a su cuerpo y tratando de que todos vean que él era suyo, solo suyo.
-Me encanta que te pongas celoso. ¿Ahora sí entiendes que odié que alguien atendiera tu teléfono mientras te estabas bañando?- soltó sin dejar de mirarlo a los ojos y dejando un pequeño beso en sus labios.
-¿Esta ha sido tu pequeña venganza? Preguntó para luego sentarse junto a él en la misma mesa que antes estaba sentado con Chanyeol.
-Oye no sabía que estabas aquí, si lo hubiese planeado no me hubiese salido tan bien- contestó entre sonrisas.
- Pues la diferencia es que yo no le gusto a Yen, ya que está felizmente casada con Lina, ¡una hermosa americana que es la luz de sus ojos!. Y tu amiguito Chanyeol babea por ti aunque le hayas dicho que tienes un novio sexy al que amas demasiado- dijo mirándolo fijamente.
-¡Esta bien! Tu ganas, ¡no tengo la culpa de ser irresistible!- soltó
-En eso estamos de acuerdo, eres irresistible bebé.