Prólogo

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Desde que comencé a escribir mi vida cambió, me di cuenta de que sí hay algo para lo que soy realmente bueno, desde que desarrollé este hábito y lo complementé con el de la lectura, comencé a pensar de una manera diferente, podría decir que mi mente se ha desarrollado, al pensar de una manera diferente veo las cosas desde otro punto de vista, con lo que antes hacía nada, ahora puedo escribir algo sobre eso, no soy bueno expresando lo que siento a través de las palabras, siempre lo he dicho, quizás para algunos suene irónico, pero es la realidad, aunque de alguna manera encontré la fórmula para fluir con las palabras en mis escritos y ahora puedo decir que sé     expresarme de una mejor manera, sé que hay mucho por mejorar, mucha cosas que aprender, la vida misma se ha encargado de dejarme esas cosas claras, sé que como escritor tendré muy buenos momentos, de los cuales sacaré muchos beneficios, pero también tendré otros no tan buenos de los cuales espero aprender aún más, y es que ahí está la fórmula, aprender de los errores, sacar provecho de las malas rachas, espero que mis bloqueos (sé que vendrán en gran medida) sean una fuente, un canal, para conectar conmigo mismo, para conocerme más a fondo y para entender de una vez por todas que ellos serán una constante en mi vida y que cuando lleguen sólo tendré que aceptarlos y no forzarme, no eximirme demasiado, porque al final de cuentas, la inspiración es algo que no se puede forzar, te lo digo yo que he intentado sacarla muchas veces de su cueva cuando ella no está dispuesta a salir, y eso no me ha servido para mucho que digamos, la vida me ha colocado personas maravillosas en mi camino, personas sin las cuales no sé dónde estaría en estos momentos, se han vuelto el faro de este barco sin rumbo, la primera de ellas es Daniela Valera, ella fue la primera en llamar ARTE a mis escritos, eso es algo que no olvidaré nunca, me ayudó en mis inicios, difíciles inicios como escritor, me hizo entender que debo valorar lo que hago, aparte de que me ayudó a decidirme para por fin crear una página en la cual comparto parte de lo que escribo con todos ustedes, también está Nallerys Brea, quién me encontró en un momento muy débil y me hizo entender cosas importantes, me hizo entender que debo estar consciente de mi talento como escritor, que debo de reconocer mi talento, lo cual siempre se me ha hecho difícil porque casi nunca reconozco lo bueno que soy o puedo ser, en ese momento de debilidad donde no creía en mí mismo, ella me ayudó, me brindó su más sincero apoyo y me demostró lo mucho que valora mis letras, que así como ella lo hace, también muchas personas más hacen lo mismo, gracias a ella hoy soy alguien más seguro de sí mismo y eso me ha ayudado a salir de mis bloqueos temporales, así como ellas dos, hay muchas personas más, que si comienzo a mencionarlas no termino hoy, la verdad es que no sé para qué estoy escribiendo esto, sinceramente no sé qué haré con este escrito, la idea era escribir una línea y dejarlo así y ahora no sé cuántas llevo, pero esto es algo con lo que tenemos que lidiar todas las personas que nos dedicamos a escribir, cuando queremos escribir muchas veces no nos sale y de repente creamos un gran escrito cuando menos lo esperábamos, esto es algo increíble, amo escribir, no me había dado cuenta de qué tanto, pero ya veo las cosas mucho más claras, esto es algo que no quiero dejar de hacer nunca, cuando escribo me libero, y cuando me libero puedo ser completamente feliz, un brindis por todas esas palabras que me han acompañado por todo lo largo de este trayecto, y que lo seguirán haciendo, sin ustedes no sé qué haría, sin más que decir... 



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