Éiren
Briana sonrió y yo seguí mirándoles, ella ya sabía lo que yo iba a hacer, había encontrado juguetes nuevos, los últimos aprendices no me duraron dos días. Literalmente, me los comí con patatas.
-Moveos, la Matriarca debe volver al castillo ahora, aún hay gente buscándola.-dije con autoridad.
-Vamos nena... no seas tan dura.. estoy seguro de que bajo toda esa... -me miró de arriba a abajo como si fuera comestible-...apariencia, existe una mujer frágil y asustada que busca los brazos de un hombre de verdad...- dijo con una sonrisa traviesa.
Le miré sonriendo. No me lo podía creer...
-Y... dime una cosa.. ¿se supone que ese hombre eres tú?- dije sonriendo aún.
-Por su puesto, muñeca.- se pasó la lengua por sus carnosos labios, hubieran sido apetecibles de no ser por toda la mierda que salía de ellos.
Sonreí y me acerqué a él, acaricié su mejilla con ternura y puse una mano en su cabeza, enredando su pelo en mis dedos y acercándole a mi cara. Entonces, reforcé el agarre y sonreí como la sádica que soy, golpeé su cara con mi rodilla y escuché su intento de insulto riendo.
-Guárdate la fragilidad para tus pelotas, "muñeco"- sonreí tierna y le golpeé en la entrepierna- Regla número uno: Trátame con respeto, soy tu superior
Gimió en el suelo de dolor. Miré a Artoria y le dije con voz autoritaria:
-Levántale, tienen trabajo que hacer, las compras de la Matriarca son demasiado para nosotras.- miré a Kalel- Cuida tu lenguaje la próxima vez.
Me dí la vuelta y ví a Bri muerta de risa, la miré y me fué imposible parar de reír.
-Vamos, Alanna está sola y me da miedo que le pase algo.- dije entre risas
Cuando encontramos a Alanna estaba escondida dentro de un barril comiendo chocolate, la sacamos de ahí y le contamos la historia de lo ocurrido. Acordamos que mañana empezaría la instrucción... y la Matriarca estaría presente.
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KALEL
¡ESA BRUJA LE HABÍA GOLPEADO! ¡DOS VECES!
Kalel no podía creerse lo que había pasado, ¿Qué se creía ese pequeño duendecillo? ¡Le había tratado como a la basura! ¡¡A ÉL!!
Y lo que era peor, ¡SE HABÍA REÍDO! Se había reído de él, en su cara, justo como hacía Artoria ahora que se habían ido.
-¿¡¡ME VAS A AYUDAR O QUÉ!!?-le grité.
Esa maldita patada me había dolido, sobretodo en mi orgullo.
-Tranquilo amigo, ella no va a volver a por ti.- se rió como un loco.
Maldito hijo de puta, ahora se reía el también.
Esa bruja iba a pagármelas mañana en la instrucción.
Y disfrutaría con ello.
★★★★★★★★★★★★★★★★
Hola personitas!! :3
Espero que os esté gustando.
¿Qué opináis de los nuevos? ¿Serán capaces de sobrevivir a la instrucción? ¿En que consiste la venganza de Kalel?
Lo sabremos pronto, en el próximo capítulo!!
♥♡♥♡♥♡
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La Profecía de los Marcados
FantasyLa Profecía se cumplirá pronto... ¿Estás preparad@?