Cap1- el encuentro [JINKUSU]

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        Abrí los ojos, estaba en un sendero de piedras Japonés, entre el camino había cerezos secos, parecía ser Otoño, al final del sendero estaba mi antigua casa de cuando vivía en Japón ya destrozada y, delante mía, mis padres, me sonreían y se acercaban hacia mí, el rostro de ellos era tal y como los recordaba. Cuando estuvieron lo suficientemente cerca de mi ambos alargaron sus manos para cogerme en brazos, y yo les cogí la mano, sentí su calor por unos instantes pero de repente ambas manos apretaron y no me podía hacer nada para soltarme y de sus ojos sin expresión explotaron y corrieron como una masa blanca y gelatinosa por sus mejillas; sus cuerpos rápidamente empezaron a descomponerse. De sus gargantas salían roncos gemidos y empezaron a devorarme vivo...

        Un sudor frio corrió por mi espalda seguido de un escalofrió al despertar; seguía en el Aeropuerto desde que esta mañana se declarara el estado de cuarentena, mucha gente parecía preocupada, se escuchaba el llanto de los niños y otras intentaban inútilmente hablar por móvil ya que las lineas estaban saturadas. Todas las salidas estaban vigiladas por soldados de la FUAE e intentar salir era inútil. Un soldado disparó a uno que se negaba quedarse dentro. De fondo se escuchaban disparos lejanos provenientes de distintos lugares del aeropuerto.

        Yo me volví a sentar en la silla, abrí mi mochila y saqué de mi Botiquín una jeringuilla, lo observé detenidamente y empecé a recordar lo que pasó hace 2 días en el laboratorio mientras miraba por la ventana. De repente vi como el último avión que salió esta mañana volvía a tierra, volaba muy inclinado. De repente choco con el aeropuerto y explotó lo cual destrozó la pared y abrió un gran agujero por el que empezó a entrar gente… yo no sabía que eso ya no era gente… los soldados empezaron a disparar, la gente a gritar y el pánico se apoderó de todos. Pronto empezaron a llegar hasta nosotros.

        En medio del caos aproveche para tomar una SA80 de un soldado que estaba en el suelo malherido debido a un mordisco zombie y salir de allí.

         Me encontré en un largo pasillo donde varios muertos vivientes andaban con dificultad hacia a mí. Ya no podía volver atrás así que apreté el gatillo con miedo y apenas sin fuerza y una ráfaga de balas se dispararon hacia arriba y el culetazo me tiró al suelo. En ese momento deseé haber aprobado educación física, pero los zombies estaban ya peligrosamente cerca de modo que respire hondo y apreté el gatillo, la sangre de los zombies salpicaba en la pared mientras yo me abría paso. Cuando yo llegue al final vi que estaba ya en el hall pero aquí había sido donde había explotado el avión minutos atrás y había escombros ardiendo en todas partes y muchos zombies y. Tenía que salir de allí como fuese.

        El aeropuerto era todo un caos. Se podían ver cadáveres por todas partes,  en el suelo de aquellos que murieron sin ser infectados y andando en busca de más víctimas con las que saciar su sed de sangre. Los soldados seguían disparando y cayendo según se les agotaban las balas y en medio de todo este desorden estaba yo un estudiante de biomedicina huérfano y a 1200km de casa.

        Acababa de salir de aquel pasillo donde había disparado a varios zombies. Continué lo más silencioso posible ya que los zombies estaban ocupados pero, como nadie había tenido tiempo para desconectar las alarmas y sistemas de seguridad, el detector de metales sonó cuando pasé bajo el por culpa del arma que llevaba, y eso llamo su atención. Un grupo de zombies me rodearon en un instante.

        Apunté con el arma y disparé al zombie más cercano. “click” no me quedaban balas y los zombies seguían acercándose y yo apretaba inútilmente el gatillo “click”, “click”, “click, click,  click, click” sin parar para ver si milagrosamente una bala salía disparada de la ametralladora, pero todo era inútil y los zombies estaban cada vez más cerca. Note un peso extraño y humedad en mis pantalones…

ZOMBIPOCALYPSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora