No todo puede ser color de rosas, Ya iban 1 años viviendo juntos y no todo era como cuando todo inició ya que tenían algunas diferencias, Mateo era un Desordenado y a Manuel le gustaba que todo esté en orden.
Mateo le encantaba Estudiar con música fuerte mientras que a Manuel le gustas el silencio.
Y muchas cosas que lo llevan a discutir constantemente y como los dos vivían junto y ya no podían hacerse los orgullosos y en una discusión salir e ir cada uno en sus casas, tenían que tragarse el orgullo y arreglarlo antes que acaben el día.
-Mateo puedes bajarle la música por favor. - dice Un Manuel bastante cabreado.
- A quien llamas Mateo tu eh? - dice Mateo yendo a la mesa del comedor, donde estaba Manuel estudiando.
- Así te pusieron tus padres no- Dice Manuel tratando de seguir enojado.
-Sí, pero tu solo puedes llamarme, mi Amor, mi Bebé, mi dulce de leche. Pero no Mateo.
- Yo nunca te he llamado Mi dulce de leche- dice Manuel cerrando su libro ya sabía que debía esperar a que Mateo se duerma para poder estudiar tranquilo.
- Oh mira que distraído te confundí- Manuel lo mira serio haciendo que se marque bastante sus mandíbulas. - Sabes que estoy jugando amor. Que caliente te ves así.
- si sigues jugando así Te irás a dormir en el cuarto de invitados.
- Te pusiste celoso mi amor- Dice Mateo subiendo a su regreso.
- Yo celoso? Jamás.
Esa noche no pudo estudiar por qué tuvo que hacer cosas divertidas con su Novio
(...)
Ya que Manuel siempre se quejaba de que Mateo era muy ruidoso y no podía estudiar de él. Ese año Mateo le dio el mejor regalo a su novio. Mientras Manuel iba para el trabajo, él se quedaba a arreglar una habitación para que Manuel pueda estar tranquilo.
-Por qué tengo que tengo que tapar los ojos- decía Manuel que era guiado por su novio- Si esto es una de tus raras Fantasía sexuales no me está gustando amor.
- Puedes Guardar silencio amor? Ya casi llegamos.
- Esta bien- dice escucha la llave y una puerta abrirse.
-Feliz cumpleaños amor, sé que a veces quieres librarte de mí, porque no puedes estudiar por lo ruidoso que soy así que- dice quitando la venda- puedes escaparte aquí cuando ya no me soportes.
-Matuu- Dice entrando en la que antes era la habitación de huéspedes- Te pasaste amooor, como es que yo no me di cuenta de esto- dice mirando todo.
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- Gracias amor esto es hermoso, pero quiero decirte que no me quiero librar de vos. Te amo ruidoso, Desordenado y todo lo que traigas encima
(...)
Un sábado por la noche ya habían hecho todo lo que debían hacer entonces se pusieron a ver alguna serie, ahora que vivían junto Mateo obligaba a ver alguna que otra serie o película y así como también Manuel obligaba a Mateo ver algún documental.
Escucharon el timbre. Extrañados porque solo suelen tener visitas los Domingos Mateo va y abre la puerta.
-Buenas noches Vecino tienen una tasa de azúcar para prestarnos.
- Como que vecino boludo, cuando se mudaron y no dijeron nada. - Dice Mateo abrazando a sus amigos.
-Nos mudamos ayer y hoy estuvimos arreglando. Valen quería que sea una sorpresa- dice Dani
-Amooor tenemos vecinos nuevos, dos idiotas se mudaron en frente de nuestra casa. - Grita Mateo
-Jajaaja, uy que gracioso Teo. - dice valen entrando a la casa de sus amigos- Hola vecino. - dice cuándo ve a Manuel sentado en el living
- No puedo creer Daniel y no fuiste capaz de contarme- Dice Mateo claramente molesto.
- Bueno les cuento como fue, estábamos en mi habitación fumando un porro a escondidas de mis padres, porque saben que él odia eso. Y creo que ya estábamos un poco mal y le dije a Valen sí que pensaba de vivir juntos y él se emoción dijo que si, y llamo al que le ayudo a conseguir este a ustedes y nos dijo que estaba desocupado y rápidamente le dijimos que nos guarde y así. Ya somos Vecinos.
Estuvieron hablando así riendo contando como fue para hablar con sus padres de que iban a mudarse juntos. Los chicos estaban contentos, esa amistad de tantos años, que han pasado muchas cosas juntos buenas y malas aún seguía ahí intacto y se sentía afortunados realmente.
(...)
Un día Manuel estaba buscando una cosa que recordaba que había traído de su casa, empezó a buscar en el sótano donde guardaban cosas que no usaban, buscando entre cajas encontró un celular, extrañado por que parecía estar aún en buen estado, lo guardo en su bolsillo y siguió buscando.
Cuando encontró su libreta vieja fue a su habitación puso a cargar el celular que había encontrado. Al ver que prendió se puso a revisar. Seguro era de Mateo.
Encontró la aplicación de WhatsApp se metió por que le dio curiosidad. Se sorprendió al encontrar su nombre.
Manucho 😍
Entro y no pudo creer al encontrar todos los mensajes que aquel número desconocido, que le mandaba mensajes constantemente.
Decidió esperar a que Mateo vuela a la casa para poder preguntarle.
(...)
- Amor por si acaso no se te hace conocido este celular? - dice Manuel ya cuando estaban acostados en la cama, Mate cambio su cara por uno de susto.
- Donde encontraste eso? - dice
- En alguna caja del sótano fui a buscar mi libreta y lo encontré. Quieres decirme algo al respecto?
- Emm, estaba un día en mi habitación y encontré mi celular viejo entonces se me pasó por la cabeza, enviarte mensajes desde ese número y hacerme pasa por alguien anónimo y decirte todo lo que no podía decirte en persona. En ese momento me pareció una idea brillante. Pero no sé si te disté cuenta que dejé de hacerlo cuando nos volvimos novios.
- La verdad pensé que dejó de intentar de tener algo conmigo porque supo que estábamos juntos que se yo. ¿Por qué nunca me dijiste que eras tú?
- No amor alta vergüenza, ahora estoy muriendo de vergüenza.
- Jajaja. Te amo tanto mi bebé. - Dice besando a Mateo.
Manuel agarró el celular y comenzó a leer las conversaciones que había, Con un Mateo avergonzado recostado en su pecho. Recordando todos los momentos.
FIN
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Bueno chicos este es el fin de esta novelita.
Espero que le haya gustado.
No se olviden de pasar a mis otras historias a darle amor
