ARCO DE ENTRENAMIENTO
FLOR DEL DESIERTO PARTE II
Los ojos de Temari se abrieron de forma lenta, tratando de acostumbrase a luz del sol que golpeaba su rostro. La chica froto sus ojos un poco, antes de comenzar a sentarse en la cama donde estaba, miro a su al rededor para hacer un análisis de donde estaba y como llego allí. Lo ultimo que recordaba era ir en los brazos de Naruto antes de que ella se quedara dormida por lo que había pasado. Observando el lugar con atención no logro reconocerla como la habitación de la posada donde ella y Naruto se estaban quedando.
Para empezar el cuarto tenia una sola cama, al lado había una pequeña mesa que tenia un vaso con agua y un plato con unas pastillas en el. Las paredes y techo eran de madera, por lo que era obvio que estaba en una cabaña o algo por el estilo. La chica entonces se vio a si misma tenia varias vendas en su cuerpo, sus brazos estaban vendados hasta el codo, levanto la camisa blanca que llevaba puesta y noto moretones en su abdomen y cu pecho, toco sus costillas y siseo un poco al sentir el dolor, Temari hizo un ultimo análisis de si misma notando que solo llevaba unas bragas negras y la camisa que tenia sobre ella"Donde estoy?" se pregunto sin esperar respuesta.
"estas en una casa de seguridad en el país del fuego" La chica miro hacia donde sintió la voz, viendo la puerta que estaba abierta se sorprendió al ver a una mujer bastante alta, Temari podía jurar que su estatura estaba entre 1.87cm, lleva el pelo corto de un color plateado, aunque del lado derecho de la cabeza le caen sobre el pecho dos pequeñas trenzas adornadas y sujetas con cuencas redondeadas. Sus ojos son de un color gris, lleva un sencillo kimono modificado de color negro, el kimono en ves de llegar hasta los tobillos llegaba hasta la mitad de sus muslos con una abertura a los lados para mejorar su movilidad tambien se podía notar unos pants cortos negros. "Espero te sientas mejor"
"Que...donde estoy...donde esta Naruto... quien eres?" Temari dijo mientras se movía por instinto bruscamente haciendo que gimiera de dolor.
"Por favor evita movimientos bruscos, tus costillas aun no sanan por completo" La mujer cerro la puerta y se movio hasta ella "Mi nombre es Isane, soy una de las invocaciones de Naruto-kun, soy la jefa del cuerpo medico del clan de los zorros" las manos de las mujer brillaron en verde y las puso sobre las costillas de la chica. "Estamos en una de las casas de Seguridad de Naruto-kun, el esta a fuera resolviendo unos asuntos, te cuidare hasta que te sientas mejor"
Temari admitía estar sorprendida y un poco desconfiada aun, pero la sonrisa amable de la mujer mas los tratamientos que estaba recibiendo y la mención del rubio, ademas del aura que la misma mujer exudaba una gran paz y calma lograron bajar su creciente desconfianza . "cuanto tiempo ha pasado desde que llegamos aqui"
La mujer paso sus manos a sus muslos viendo que aun tenia moretones "Un día" ella respondió y la miro a los ojos "Naruto-kun viajo rápido para llegar aquí" Isane no mintió de hecho el rubio había viajado a una velocidad sorprendente para llegar a este lugar, ademas de no haber dormido en todo el tiempo que había pasado. "Mas le vale que duerma lo suficiente o lo obligare"
Temari sintió como su cuerpo mejoraba rápidamente ante los cuidados de la mujer, su ninjutsu medico realmente era algo que no estaba en su comprensión, según sabia incluso un medico normal no podría aliviar el dolor ni heridas tan rápido como esta mujer lo hacia. Temari se sintió curiosa por eso. Temari se perdió en sus pensamientos mientras la mujer realizaba su trabajo, recordó esos momentos cuando Doragon se desquito con ella sin retenerse mientras la tenia a su merced. Recordo cuando con sus asquerosas manos comenzó a tocarla en lugares que jamas dejo que ningún hombre tocara antes, un escalofrió le recorrió la columna solo de recordarlo, el temor que sintió en ese momento dentro de ella volvió con fuerza y la hizo abrazarse.
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Una Segunda Oportunidad
FanficEs mi primera historia espero lo disfruten. El equipo 7 se le da una segunda oportunidad de vivir para corregir los errores, conocer nuevas personas, tener nuevas aventuras y muchas sorpresas