Colapso

"Tu hermanita ya nació"

Desperté y entonces recordé lo que estaba pasando, afuera se oía mucha gente así que me quedé en mi cuarto recordando el día en el que Giselle nació: Tenía 7 años. Estaba en clase de español, ese día tenía examen. La maestra nos había puesto palabras a las que le faltaba una letra para rellenar. Eran muy fáciles, hasta que vi una "d_dal". ¿Dedal? no, nunca habia escuchado esa palabra. Taché la "d" y escribí "p": pedal. Mi mamá siempre lo menciona en el carro, -ay, pobre maestra, siempre equivocándose!- pensé.

En eso, la maestra me llama: -Dakota Ramírez, tu padre está afuera. Ya te puedes ir-Todos los niños miraban y yo hacía mi caminado de "bye bitches". Llegué afuera y ahí estaba mi padre.
-Dakota, ¡adivina qué!
-¿Qué?
-No,adivina- odiaba cuando papá me hacia esperar-Ya sé,¿te compraste la tanga que tanto querías para impresionar a mamá?- Lo admito, para tener 7 años ya sabía ciertas cosas, gracias a mis primas mayores.
Le tapó los oídos a mi hermanito y  me miró "furioso" pero no podía aguantar la risa. -¿Qué te he dicho de escuchar mis conversaciones?
-¡Yo quiero escuchar!- dijo Nicolai y pateó a mi papá a lo que este saltó en un pie y lo regañó. -Ah y  tu hermanita ya nació.

Grité y salté de la emoción, al fin alguien con quien hablar de mis cosas y que no me mire como si estuviera loca, bueno tendría que esperar a que creciera pero no importa, estaba muy feliz.                             

Llegamos al hospital y mi papá nos dijo que esperáramos abajo.  Después de 15 minutos llegó con mi mamá, ella es tan bonita, tiene ojos color miel, cabello castaño claro y una sonrisa hermosa. Y yo soy todo lo contrario: ojos castaño oscuro, al igual que el cabello y una nariz un poco grande. -Mamá!-Nicolai y yo corrimos hacia ella -Miren a su hermanita, se llama Giselle. -¿La puedo cargar?-dije con emoción- Si, con cuidado. La tomé entre mis brazos y la observé con atención, era tan pequeña, tenia el cabello chocolate, ni muy oscuro ni muy claro  y el mismo color de piel de papá, bronceada. Mientras N y yo la admirábamos mi mamá dijo que tenia que ir a hacer unas compras así que fuimos a Peter's.
Cuando mamá ya había terminado de pagar y todo nos íbamos a ir, cuando antes de salir nos dimos cuenta de que alguien había desaparecido.
-¿Dónde esta Nicolai?- justo en ese momento el guardia de seguridad llegó con Nicolai, quién estaba llorando.
Creo que será difícil para mamá y papá tener 3 hijos, pero al menos nos tenemos los unos a los otros.