Los labios de Draco se movían suavemente sobre los de Eileen, ella mantuvo los ojos abiertos durante unos segundo y luego los cerró disfrutando el momento. Draco posó sus brazos alrededor de la pequeña cintura de Leen y ella enterró sus dedos entre las hebras rubias del chico, de a poco ambos comenzaron a retroceder hasta que la espalda de Eileen chocó con la pared de piedra.
Sus respiraciones eran aceleradas. Entonces se separaron lentamente.
Eileen no se atrevía a abrir los ojos, sentía la respiración de Draco chocar contra su mejilla pero cuando acarició su cara se apartó de él empujándolo con ambas manos sobre su pecho.
—¿Por qué?
La chica susurró sin mirar al rostro de Draco quien la miraba confuso, tomó su mentón suavemente para que lo viera. Los ojos de la chica estaban brillosos y sus mejillas muy sonrojadas.
—¿Por qué? No entiendo por qué lo haces...
—¿Hacer qué?
—¿Por qué querías besarme? Lo intentaste en la mansión, lo intentaste en el tren y lo hiciste ahora.
Draco la miraba fijamente sin decir ni una palabra y Eileen al ver que no contestaba se apartó completamente de él y se acercó a la chimenea.
La sala común tenía un ambiente frió pero el calor del fuego de la chimenea lo volvía a agradable. Eileen se sentó sobre la alfombra frente a la chimenea abrazando sus rodillas mirando fijamente la madera quemándose. Draco se sentó junto a ella luego de unos minutos.
—¿Por qué creés que intentaba besarte, Leen? —Draco la miraba pero ella no a él.
—Tengo varias ideas. Tal vez otra absurda apuesta con Blaise, o ya no tienes más chicas detrás de tí, o Pansy te tiene harto que decidiste hacerla enojar para que te deje en paz, y muchas otras razones.
—¿No se te cruzó por la cabeza que quería hacerlo por mí mismo?
Entonces la chica lo miró, los ojos grises de Draco brillaban por la luz del fuego.
—¿Por qué? —volvió a repetir la pregunta.
Draco suspiró y luego rió levemente.
—Eres muy lista para muchas cosas, Leen, pero eres lenta ahora.
—Bella me dijo algo similar en la mansión. —murmuró.
—No hice ninguna apuesta con Blaise, ni con nadie. No me importan quienes están detrás de mí. Y Pansy me molesta desde que somos niños, no me importa lo que ella haga o diga.
—¿Entonces...?
—Piensa un poco. —la chica se mantuvo en silencio y giró su cabeza hacia la chimenea —Me gustas desde que tenemos 10 años, Leen.
Los ojos de Eileen se abrieron abruptamente, la sala se llenó de silencio nuevamente. Mantuvo la mirada sobre las brasas para luego mirar al rubio con timidez, Draco la miraba fijamente con una tímida sonrisa torcida. Eileen lo miró confundido frunciendo el entrecejo haciendo que él ria apartando la mirada hacia el fuego.
—¿Lo dices en serio?
—¿Por qué te cuesta creerme? —su voz sonó cansada.
Ahora Draco se había girado hacia ella quedando cara a cara, su rostro tenía un semblante serio.
—Tal vez porque tu reputación te precede, Draco. ¿Cómo puedo creer que te gusto si has estado con casi todas las chicas de Hogwarts?
—Eso no es verdad. Tal vez haya coqueteado con algunas pero nunca las besé.
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The Princess of Slytherin (En pausa temporalmente)
Fanfiction¿Severus Snape con una hija? No serían los únicos en entrar sorprendidos. Eileen Snape, hija del murciélago de las mazmorras y una muggle muy alegre. Esta sarcástica chica convive tanto con Serpientes como con Leones, Tejones y Águilas, aunque sus...