12. No puedo creer que casi lo arrojaste al otro lado de la habitación

3.3K 122 54
                                    

DÍA CINCO

Nerviosismo. Estaba muerta de los nervios. La inmensidad del miedo que llevaba conmigo no era para nada saludable, pero no pude evitarlo.

Hoy era el día. No sabía por qué, pero sentía una profunda tristeza en mi alma. Intenté varias veces alejarla, pero siempre parecía volver.

-Melly, todo va a estar bien.-Harry dijo por enésima vez. Sabía que no podía prometerme eso, pero parecía tan convincente y seguro que casi le creía.

-Sí, sí. Yo, eh, lo sé. Es solo que los nervios me están afectando.- Harry me atrajo a sus fuertes brazos, besándose suavemente en el pelo.- Eres la persona más valiente, más fuerte y más segura que conozco. Todo va a estar...

-Bien.- Terminé por él, sonriendo porque sabía exactamente lo que iba a decir.

-Si, vale.- Dejé que nuestra pequeña unión permaneciera por unos minutos. Extrañaba a Jamie. Desearía que ella estuviera aquí conmigo durante este proceso. Decidiendo dejar mi orgullo de lado, saqué mi celular del bolsillo y marqué su número.

-¿Qué estás haciendo?

-Llamando a Jamie.- Respondí suspirando después. Harry gentilmente tomó mi teléfono de mi mano y fruncí el ceño.

-Por favor, primero bebe tu píldora. No quiero que te desmayes en el auto camino al hospital. Podría sufrir un ataque al corazón.- Puso ambas manos una sobre la otra como un niño, estirando los labios.

Poniendo los ojos en blanco, me reí. -Esta bien, padre.

Rápidamente saqué la botella de agua del armario y saqué dos píldoras. Colocándolas en mi lengua, bebí la mitad de la botella y las tragué. Cuando regresé, Harry me entregó el teléfono con una sonrisa triunfante.

-Gracias por obedecerme por primera vez en tu vida.

Haciendo una mueca graciosa, le golpeé el hombro. - Muy divertido.-Volví a concentrarme en mi teléfono y toqué el botón de llamada.

Después del primer timbre, ella respondió. -Oye.

-Hola.- Respondí, sin saber que decir. Pero estaba feliz de que sonara bien y segura.- Acabo de llamar para decirte que tengo un donante y que me van a hacer el transplante hoy.

-Eso es asombroso, Mel. Estoy tan feliz por ti. ¿Estás yendo al hospital ahora mismo?

Vi a Harry ponerse las botas en la sala de estar. -Estamos a punto de irnos. Quería llamarte primero.

-Mel, lo siento, no puedo estar allí. Realmente, realmente no puedo ir. Por favor, no me odies.

-No te odio, James. Solo estoy decepcionada. Eres mi mejor amiga y me abandonaste cuando te necesitaba.

-Lo sé, lo sé. Creo que estaba tan asustada como tú y pensé que huir era la mejor decisión en ese momento.

Harry me indicó indudablemente que teníamos cinco minutos más antes de irnos.

-Lo superarás, ¿De acuerdo? Te veré cuando regrese de Canadá.

-Te amo James. Cuídate, ¿De acuerdo?- Las lágrimas comenzaron a brotar en mis ojos.

-Yo también te amo, cariño. Más, de hecho. Te amo más. Y lamento mucho haberte lastimado así. Espero que algún día puedas perdonar mi estúpido trasero. Ve a esa cirugía y patea a ese tonto doctor en su cara, ¿De acuerdo?

Sonriendo suavemente, agarré mi bolso con una mano. -Adiós James.

-Adios Mel. -Después de terminar la llamada, me di cuenta de lo deprimente que era la voz de Jamie. No era su habitual tono alegre y salvaje. Sabía que a ella le importaba. Supongo que la odié por irse cuando las cosas se pusieron difíciles.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 24, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Sex Buddies |Español| H.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora