Por Ti Volví A Creer *Emiliaco* (Adaptación)

Capítulo 7

¡¡Oh Dios!! Que sueño

'' Entro en la ducha y abro la llave del agua fría. Me empiezo a enjabonar todo el cuerpo pero en eso siento una cálida respiración en mi cuello que hace mi piel estremecerse. Quise volverme y verlo pero sus labios tocan el lugar donde sentí su aliento, los besos siguen por todo el contorno de mi cuello y luego empieza a bajar por la línea de mi espalda provocando que suelte el aire bruscamente y un leve gemido salga de mis labios.

Veo como rodea mi cintura con sus manos hasta que las coloca en mi pecho y lentamente empieza a bajar hasta mi abdomen y sigue ese camino hasta casi llegar a mi parte íntima pero lo detengo, giro en sus brazos y quedo frente a frente a... Emilio. Mis ojos se abren por la sorpresa pero mentiría si digo que no lo esperaba a él.

En mi rostro aparece una tímida sonrisa y el hace esa media sonrisa que en este momento siento que me puede derretir bajo esta agua fría en donde estamos. Ahora soy yo el que coloca mis manos en su cintura y lo atraigo más cerca de mí y cuando estamos a solo pocos centímetros de distancia él me besa.

El beso no es tierno ni lento es totalmente apasionado y feroz y nuestras lenguas empiezan a acariciarse voraz, Emilio coloca sus manos en mi cuello y se acerca más de lo posible, siento como nuestros miembros se rozan y se me escapa un fuerte jadeo que Emilio lo calla, el beso se intensifica y como se dio cuenta que el roce de nuestros miembros me dio una sensación de placer mueve sus caderas y ahora es un fuerte gemido el que se me escapa.

Deja de mover sus caderas y yo protesto con un fuerte quejido, sujeta mis manos y las coloca por encima de mi cabeza y me deja de besar, nos miramos en silencio y lo único que se puede escuchar es nuestra errática respiración y el agua cayendo. Emilio me vuelve a dar un pequeño beso en los labios y luego va a mi cuello donde siento su lengua recorrer mi piel ahora sensible, varios gemidos salen mi control de mi boca y quiero tocarlo pero no me suelta las manos y cuando creí que me volvería a besar puedo sentir como succiona la piel de mi cuello, me muerdo el labio inferior intentando controlar más gemidos que quieren salir sin control pero fracaso, Emilio sigue besando y succionando mi cuello y empieza a bajar a mi pecho hasta que llega a mis tetillas y vuelve a hacer lo que hizo arriba, me siento mareado por tanto placer que siento que solo me rindo a que Emilio me haga lo que quiera.

Deja mis manos cuando ya está en mi vientre entonces abro mis ojos y puedo ver como me mira desde abajo, mi respiración se agita cada vez más cuando sé lo que planea hacer, no puedo dejar de verlo a los ojos y Emilio no deja de verme directamente hasta que llega a mi miembro y cuando lo tiene en sus manos, viéndome fijamente abre la boca...''

- ¡¡Joaquín!!

Me despierto y me siento de golpe en la cama, estoy totalmente sudando y me siento tan caliente, hace mucho calor aquí.

- ¡Joaquín! – levanto la mirada y veo a Itzi y a Renata frente a mí.

¡Maldición era solo un sueño! Pero se sentía tan real, los besos, las caricias y los roces. Ahora odio a mi hermana y a Itzi por haberme despertado.

- ¿¡Por qué gritan?! – les pregunto muy enojado y frustrado.

- Mira bajo las mantas – me dice Renata y la miro confundido pero le hago caso. Cuando veo debajo las mantas puedo notar a lo que se refiere, ¡tengo una erección! Dios que vergüenza.

Me pongo totalmente rojo de inmediato y me tapo con las mantas, puedo oír como se ríen ese par por mi bochornoso momento, pero es que tan solo recordar lo que estaba a punto de hacer Emilio si no me hubieran interrumpido estas dos, la erección que tengo se abulta más y el calor que tengo se hace más fuerte. Decido salir de mi escondite e irme directo al baño, necesito agua fría.