Parte 3-Resaca

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Pov. Lu

Abrió los ojos y lo primero que vio fueron los rayos del sol golpeándole la cara a través de la ventana, giro su cuerpo y encontró el cuerpo desnudo de su medio hermano, reviso bajo sus sabanas y maldijo por lo bajo, había vuelto a caer en la tentación y la adicción que le suponía el chileno, se levanto con un terrible dolor de cabeza, bajo las escaleras y encontró las botellas vacías del día anterior, ya llamaría a alguien para que limpie todo ese desorden, entro a la cocina y se preparo una ensalada de frutas con la comida que había mandado comprar a su secretaria, cuando llevaba el primer bocado a la boca sintió unos brazos que la rodeaban por la cintura.

-Buenos días bonita-Val con una voz ronca mezcla del sueño y la resaca.

-Hola, querido-Lu alejándose para comer cómoda.

-¿Que paso? en la noche estabas mas cariñosa-Val frotándose los ojos, solo llevaba puesto su pantalón del día anterior.

-Hoy tengo mucho que hacer, y por tu culpa tengo resaca y me duele a morir el cuerpo-Lu

-Para empezar, es Domingo, nadie trabaja hoy, segundo yo solo abrí el champan, y tercero me pediste que no parara, yo solo te hice caso-Val

-Pues entérate, yo si debo trabajar, fuiste tu quien me hizo tomar y tres, nadie es cociente cuando esta ebrio-Lu dejando el recipiente de su desayuno en el lavadero.

-Por el trabajo no te preocupes, yo te ayudo, por el alcohol, ambos hemos perdido nuestra resistencia, por tu culpa anoche perdí mi récord de 1 año sin emborracharme, y por lo ultimo, no necesitas estar ebria para que ocurra, basta con una de mis sonrisas para que te derritas jaja- Val preparándose un sándwich.

-No necesito tu ayuda, creído-Lu tomando sus llaves y pidiendo un uber, nunca había disfrutado conducir, así que decidió no comprar un auto, solo la cochera por si acaso, dos en realidad para cuando recibiera a la musulmana a la cual apreciaba ya como a una hermana, pero una hermana normal todo lo contrario a lo que ocurría con el chileno.

-Espera-Val, bloqueandole la salida a la puerta-yo te llevo-tengo mi mercedes en la cochera-

-Veo que adoras ese carro, con lo que ganas ahora con tus compañías cualquiera diría que conducirías un carro de oro-Lu cruzándose de brazos

-Ese auto me ha acompañado en las buenas y en las malas, cometí el error de separarme de ti una vez, no quería cometer el mismo error con ese convertible-Val mirándola fijamente.

-No fue una pregunta, siéntate un rato, me cambio y vamos-Val

La mexicana bufo, pero en el fondo le conmovió aquel acto y aquellas palabras del pelinegro, quien siempre sabia como ponerle los pelos de punta, si no estuviese apurada, correría tras el y repetiría lo de anoche, pero tenia que terminar algunos balances y sin duda Valerio era el mejor empresario que conocía, incluso mas hábil que su padre, a quien por cierto no se había atrevido a invitar a la inauguración.

El sonido de su medio hermano bajando las escalera la hizo abandonar sus pensamientos, y pararse del sofá, para recoger los documentos que estaba olvidando en la oficina, otra razón para agradecerle al hombre que le movía el piso. 

Pov. Val

Bajaron al sótano y muy cortesmente le abrió la puerta a la mujer que le robaba el sueño, se dio la vuelta y prendió el carro sin intercambiar palabra alguna con la morena hasta que llegaron a un semáforo.

-¿Te comió la lengua el ratón, querida?¿O fui muy rudo ayer?-Val matandose de risa y provocando una mirada cargada de odio de parte de la Montesinos quien muy educada y elegantemente le saco el dedo medio y rodó los ojos.

-Estas de muy buen humor hoy, no malogres el mio, no querrás molestarme tan pronto cariño-Lu con sarcasmo.

Una vez que llegaron a la sucursal fueron recibidos por la recién contratada gerente quien les dio todas la explicaciones que necesitaban y recibió muy abiertamente los comentarios de los hermanos, corrección medio hermanos/amantes.

La reunión ya estaba acabando cuando la puerta de la oficina sonó.

-¿Esperamos a alguien?-Lu

-Perdón olvide avisarles, que la señorita Nadia enviaría un supervisor de confianza-gerente 

-¿Supervisor de confianza?- dijeron al mismo tiempo los Montesinos mientras la gerenta hacia pasar a nada mas ni nada menos que al hermano de la musulmana, Omar.

-Amor ¿Que haces aquí?-Lu, parándose a abrazar al chico de cejas.

-Nadia me contó que volverías, pensé que te aburrirías sola y quise venir a saludarte, pero veo que me equivoque- Omar, dándole una palmada en el hombro a Valerio

-En lo que a mi respecta , Lu no esta sola, de eso me encargo yo-Val abrazando a la morena e intercambiando risas con el musulmán, provocando un poco de rabia y gracia en la chica.

-Ya basta ustedes dos, estos son los papeles Omar, revisalos y envíaselos a Nadia-Lu

El chico los reviso con detenimiento y accedió.

-Bueno, pues si ya acabamos, vamos a almorzar, yo invito-Val

-Pues vamos tío, déjame llamar a Ander-Omar

-Perfecto, no lo he visto desde su boda-Lu

-Queda-Val, tomando  de la mano a la mexicana para llevarla al vehiculo y dirigirse al restaurante, pues Omar se dirigía en su propio carro a recoger a su esposo para luego alcanzarlos en el restaurante.

Valu//una historia para disfrutar...Where stories live. Discover now