Me subo el tirante del vestido y listo. Ya estoy preparada para una noche loca y desenfrenada.
Llevo el bonito vestido que le he cogido prestado a la zorra de Rachel con unas sandalias blancas a juego. El pelo me lo he ondulado y me lo he dejado suelto. En cuanto a maquillaje, el de hoy es más cargado que el habitual; base, rubor, contouring, sombras... le he dedicado mucho tiempo, pero merece la pena, estoy deslumbrante.
Casi se me olvida el perfume, me pongo dos suficientes gotas de mi inflatable good girl y ahora sí que estoy lista.
- Espejito espejito, ¿quién es la más guapa, elegante y sexy?- digo echando mi pelo para atrás y mirándome en el espejo del tocador.
- Sin duda soy yo- aparece Riley a mi lado y frunzo el ceño.
- ¡Pero no me robes el protagonismo perra!- la empujo levemente.
- ¿Pero qué protagonismo ilusa? Si es un espejo.
- Nadie mejor que uno mismo para subirse el autoestima.- canturrea Sammy desde la puerta. Ella ha acabado hace una hora y nos está esperando.
- Muy bien dicho Sammy. ¿Nos vamos ya?
- Yo ya estoy lista- dice por último Riley y salimos del cuarto.
*****
Empieza a hacer más calor de lo normal, ¿no podrían poner aire acondicionado? El ambiente esta muy cargado y por no hablar de la mezcla de perfumes combinada con sudor que me está asfixiando.
He perdido a las chicas hace un buen rato. Riley esta perreando por ahí con algún tío y Sammy estaba hablando con su profesora preferida, la de lengua, que se jubila y es su último día aquí. En verdad, a mí también me agrada. De pronto siento la garganta seca y me acerco a la mesa de las bebidas.
- Ponme una Coca-Cola por favor- le digo a la chica, que está detrás de la barra, y que por cierto, es bastante atractiva. Obviamente no sirven nada de alcohol, pero siendo sincera, hoy tampoco es que me apetezca mucho embriagarme.
Tras llenarme el vaso, me dirijo a la pista para ver si encuentro a Riley, pero me choco con Jaden. Ha bebido, se le nota, y no puedo evitar soltar una carcajada.
- ¿De que se supone que te estás riendo?- Me pregunta mientras se mueve al ritmo de la música.
- De ti, vas demasiado ebrio.
- No estoy ebrio, sólo contento- dice guiñándome un ojo.- ¿Estás buscando a alguien?
- Sí, a Riley. No la encuentro por ningún lado- Suelta una carcajada y me señala la puerta de emergencias, dónde está Riley morreándose con un chico que está bastante bueno.
- Algo me dice que no te sorprende- sonríe y se le achinan los ojos- Puedes quedarte conmigo si quieres- Lo que si me sorprende es que no me lo haya dicho con timidez, siempre me suele hablar con tono vergonzoso.
- No quiero molestarte, es tu graduación, seguro que querrás estar con tus amigos y no pinto mucho aquí.
- No digas bobadas anda.
Asiento y empiezo a mover mi cuerpo al ritmo de la canción, noto como Jaden se fija en mis movimientos, este vestido reluce todo mi cuerpo y no me imagino cómo se verá si bailo. Se acerca más a mí y yo le respondo dando un paso hacia él, los dos cantamos y bailamos como locos, nunca antes le había visto tan desatado, me encanta verlo así.
- ¿Quieres una copa?- me pregunta al acabar la canción.
- No gracias, hoy prefiero no beber, pero ¿De dónde sacáis el alcohol?
ESTÁS LEYENDO
¿𝐂𝐮á𝐧𝐭𝐨 𝐜𝐮𝐞𝐬𝐭𝐚𝐬?
Novela JuvenilIdaly Carson es una chica caprichosa, acostumbrada a una vida de lujo en la que todo es perfecto y nada le cuesta esfuerzo, con un simple parpadeo obtiene todo aquello que se le antoje, o eso creía ella. Un desagradable incidente le hizo ver a nuest...