Capitulo 35

5.9K 372 81
                                    

Valentina pov.

Un gemido de placer inundo mis oídos cuando le rompí el vestido para atacar sus pechos con mis labios. Lo siento pero fue la emoción al verla desesperada por desasherse de mi ropa.

J— metemela

Su respiración agitada y su jodida voz tan sexi no me ayudan en nada para controlar mis deseos de ella, porque sinceramente aun tengo miedo a no hacerlo bien, no medir mi fuerza e incluso lastimarla por lo mismo.

J— por favor te necesito dentro

Mi mano derecha bajo a su sexo y empecé a masajear su clitoris, cada vez con más rapidez, en cuestión de segundos ya se encontraba mojada, Dios! Creo que eso me éxito mucho más y ahora solamente deseaba cogerla de verdad.

V— no quiero lastimarte...

J— se... Que...  También lo deseas lo... Veo en tu mirada

Sus palabras salían pausadas entre gemidos y agitación, como no hacerlo si mis labios apretaban y chupaban su pezon mientras que mis dedos empezaban hacer camino para entrar en ella. Con su mano derecha tomó mi mentón y me subió a la altura de sus labios, estuve apuntó de hablar pero me callo con un beso y no cualquiera, este está lleno de desesperación y deseos, incluso nuestras lenguas empezaron a peliar por ver quién tenía el control. Las manos de Juliana masturbando mi miembro me descontrolaban, tanto así que no me di cuenta en que momento se puso de rodillas e introdujo mi pene en su boca, empezó hacer más placentero cuando empezó apretarlo con sus labios, me refiero a que contrajo mi pene con sus labios y eso hacía que el placer aumentará, incluso el cálido aliento de su boca lo hacía mejor. Me sorprendio cuando tomó mis manos y las llevó a su cabello para que fuera yo quien la obligará a chuparmela? En verdad quiere eso? Eso supuse cuando empezó a intudujir mas mi pene en ella obligándome a seguirla sugetando del cabello, lo pensé un poco pero al final hice lo que ella quería y la tomé del cabello asiendo que mi miembro saliera y entrará de su boca una y otra vez. La solté, pensé que me diría algo pero al contrario de eso solamente empecé a gemir cuando empezó a pasar varias veces seguidas, su lengua por mi glande (la punta de mi pene), Juro que si sigue así esta mujer me terminará matando. La tomé de su brazo he hice que se ponga de pie contra la puerta.

V— sube una pierna en mi hombro.

Le pedí cuando me puse de rodillas, inmediatamente lo hizo y ahí empezó mi obsecion por cogerla como se lo merece. Separe sus pliegues y admire su hermosa anatomía, antes de que la haga repetir mi nombre una y otra vez, antes de que pida piedad porque me detenga.

Juliana pov.

Hice lo que Valentina me pidió, estando de pie frente a ella subí una pierna en su hombro. Sentí sus dedos deslizarse entre mis húmedos pliegues hasta que los separó, me pregunté qué tanto hace mirándome. Solté un gran gemido de placer cuando empezó a pasar su lengua de arriba abajo por todo mi húmedo sexo, mis manos temblorosas se sostuvieron de su cabello cuando sin previo aviso introdujo dos dedos dentro de mi y su lengua fue directamente a jugar de arriba abajo con mi clitoris, mis gemidos se empezaron a escuchar más fuertes por todo el cuarto cuando introdujo un dedo más y sus embestidas se hacían más rápidas, su lengua en mi clitoris cambió a un movimiento en círculos alrededor. Mis manos querían aferrarse a algo más pero es imposible agarrarse de la puerta, lo intente y no pude así que solamente luchaba por sostenerme de su cabeza, incluso mis piernas empezaban a temblar.

J— hay, Val! Por favor...

Estuve apuntó de pedirle piedad pero no fue necesario ya que se puso de pie.

V— haré que pidas que me detenga.

J— eso ya lo veremos m...

Antes de que siga hablando se inclino un poco hacia mí, me tomo de las nalgas y me puso de golpe sobre su cintura, por lo menos su duro miembro se quedó rozando mis glúteos.

"La Teniente" G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora