Juliana pov.
Suspire pausadamente. Me encanta mirarla mientras se acomoda la camisa, incluso esa corbata la hace ver sexi.
— te ves hermosa — dije con una voz sensual. Aproveche que estoy detrás de ella y se está mirando al espejo para abrazarla. El espejo me ayudó a visualizar su hermosa sonrisa.
— tengo que verme presentable, hoy le daremos la noticia a mi suegro— le di un pequeño beso sobre el hombro derecho. Camine hacia al pechero y tome el saco que más me gusto — este te hará ver mas elegante y sexi— me extendió la mano para que se lo entregue. Negué con la cabeza y la ayude a vestirse. Me puse frente a ella y le acomode la ropa, en el proceso me distraje con su mirada intensa. Este conjunto resalta con el color de sus ojos. Me dio la vuelta haciendo que quede frente al espejo, sus manos se posaron en mi vientre y su mentón sobre mi hombro.
—ustedes son quienes se ven de maravilla. Te ves muy guapa Juls y estoy segura que nuestros hijos o hijas están de acuerdo con eso... ¿Cierto mis amores? — dijo con emoción mientras se arrodillaba frente a mi y besaba repetidas veces mi vientre. — "¡Si mamá, mami Juls es hermosa, por eso te enamoraste de ella desde el primer momento en que la viste!" , "¡Mi mamá es hermosa, cuando crezca yo la cuidare, seré su pequeño príncipe! Y la protegeré como tu lo harías..." — hablo con la voz chillona en diferentes tonos, morí de amor cuando la note hablando emocionada. Un día de estos está mujer me terminará matando de amor.
—¿Como sabes que será niño?— pregunté curiosa, trate de guardar una risita.
—tengo poderes mágico jajaja ¿olvidas que con mi varita mágica te embarace de gemelos? — solté una carcajada al mismo tiempo que empuje su hombro, con amor. Me aparague sobre su pecho y roce nuestras narices. Llevamos una relación hermosa, nos demostramos nuestro amor en todo momento, nos hablamos con ternura y otras veces con perversión, esos gestos hacen que nuestra relación se fortalezca. Me encanta que sea amorosa y cariñosa, también cuando se comporta pervertida. Amo todas sus facetas.
Llegamos a casa de mi padre, bajamos del auto y toque el timbre. Después de hacer el amor en el auto, Valentina me convenció de que hablará con él para invitarlo a cenar, estaba tan emocionada que no podía esperar hablar con su suegro. Mi padre no acepto ir a un restaurante pero si nos invitó a su casa, se que me extraña y está solo. Soy una mala hija, lo dejé sólo desde que murió mi madre, pero... no podía soportar ver sus fotografías en todas partes y saber que muerte fue mi culpa. He estado recibiendo ayuda de una Psicóloga personal, me ha ayudado pero aún me duele recordar ese momento.
— ¿estas bien?— me pregunto Val. Mi mirada estaba clavada en el suelo, sacudí mi cabeza cuando recordé la imagen de mi madre cayendo al suelo.
—si... si mi amor— dije con desconcierto. La puerta se abrió. Las lágrimas de mi padre empezaron a recorrer su rostro. Traté de respirar cuando me recibió con un fuerte abrazo. Mire a mi chica, tiene mordido el labio formando una línea, si ceño fruncido es de preocupación. La vi tratar de meter las manos tratando de cuidar mi estómago.
—despacio suegro... por favor -— dijo preocupada Valentina. Mi padre lo miro confundido después de que me soltó.
—¿pasa algo?— pregunto angustiado.
— bueno es que... — trato de responderle Valentina pero le tape la boca. Aun no es momento para que le de la noticia.
—no es nada padre... también yo te extrañe— dije rápidamente.
—¡Ven aquí!— halo a Valentina y la abrazo fuertemente. Es raro que mi padre la aprecie demasiado, si cuando estudiaba espantaba a todos mis pretendiente, con Val es diferente, Igual me sorprenda la manera en cómo aboga por ella — también a ti te extrañaba, aunque... no te escapas de la regañada que te daré por no venir a visitarme antes, y también por no traer a mi hija — sonrió ampliamente. Se que bromea porque hablamos por videollamada. Nos abrió paso para que pasemos.
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"La Teniente" G!P
DiversosValentina Carvajal, una chica audaz, inteligente. Desde muy joven ha dedicado su vida a su nación, su patria, su gente. Ha luchado para llegar hasta donde está, llegando al grado de "teniente" en la marina. Su mayor afán, capturar a un peligroso cri...