S I C K N E S S | Twilight

[III]

[ E P H R A I M  B L A C K ]

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Agua era todo lo que podía sentir a mi alrededor y agua era todo lo que alcanzaba a ver cuando abrí mis ojos por primera vez.

No sentía la nesesidad de respirar y ni tampoco sentía ganas de subir a la superficie. Todo está asunto me superaba tanto como para que me importara poco lo que se que soy ahora, pero aún así no podía evitar preguntarme que será de mi.

No tengo lugar a donde ir ni nadie me espera con el o ella así que ¿cual era el punto de salir ahora? tengo todo el tiempo del mundo.... Típico pensamiento de un procastinador nato. Jamás hubiese salido de la comodidad y paz que me otorga la inmortalidad y el agua hasta que por azares de la naturaleza la corriente del río me arrastró hasta la orilla.

Me paré y observé el panorama pero más bien lo sentí, mis nuevos sentidos actuaban por si solos. Los colores eran más claros, el olor a polem inundaba mi nariz y escuchaba como un conejo se arrastraba por su madriguera subterránea. Hubiese estado tranquilo aquí sin embargo el Lobo gigante se avecina hacia mí dir...!¿Que mierda?! ¡¿Un lobo gigante?!

Esa cosa tenía un tamaño descomunal y su velocidad... Estoy jodido. Corrí todo lo que mi nueva naturaleza me permitía hasta lo profundo del bosque intentando escapar pero mi velocidad era ridícula comparada con el lobo super desarrollado que me pisaba los talones y solo habían pasado 10 segundos desde que empezé a correr.

Cuando intenté mirar atrás ya tenía a la bestia sobre mi. Sus fauces estaban tan cerca de mi cara que casi tenía mi cabeza en su boca, sus patas eran 3 veces más grandes que las de un oso y estaban a cada lado de mi cuerpo.

Lo miré a los ojos y me di cuenta que estaba estático, desde el momento en que nos estamos mirando no se ha movido en lo absoluto. No entendía que pasaba pero de algún modo sentí conexión con esta bestia que incluso me tome el atrevimiento de poner mi mano al lado de su cabeza aunque me gruñera de mala gana.