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Narrador omnisciente

Las dos semanas en el bosque habían acabado para fortuna de Verónica sin ningún altercado, para desgracia de Lucy y sus compañeras limpiando el Salón cada día pero su castigo ya había terminado.
Ahora que Lucy sabía dónde vivía su maestra de español no iba a desperdiciar tiempo pues haría lo que fuera posible para verla aunque fuera una vez al día ya que hoy era sábado y lamentablemente para la mala suerte de Lucy hoy no había clase, no sabía si era conveniente ir pero realmente ella quería hacerlo y buscaría la excusa más tonta para lograr su meta. . .

Tomó su celular y unos cuantos dólares pues era esencial para ella siempre andar dinero nunca sabía que situación podía ocurrir o muy bien no sabía que antojo podía tener, penso si caminar sería bueno pero la idea de conducir su auto nunca le sentaba mal, término por tomar las llaves y despedirse de sus padres para montarse en su auto y ponerse en marcha a su destino el cual no duro ni dos minutos en llegar, estacionó su auto enfrente de la casa y miro todo a su alrededor incluso el auto de su maestra que parecía que lo había usado para salir antes ya que no estaba en el garaje.

Camino hasta llegar a la puerta y tocó el timbre una vez esperando que su profesora de español atendiera, para su mala suerte la puerta fue abierta por Camila que la miraba con el ceño fruncido, a esta altura Lucy a un creía que la nerd como ella solía llamarle era una más de las chicas de Verónica pero al punto de que durmiera diario con ella le fastidiaba

Si? -pregunta Camila amablemente-

Verónica esta? -pregunta Lucy cruzada de brazos- vives con ella?  Eres la oficial entonces? 

Como? -pregunta Camila confundida sin entender la situación- claro vivo con ella si te refieres a Vero

Ah entonces si eres la oficial -repite Lucy y frunce el ceño a lo que Camila eleva una ceja y se cruza de brazo- desde cuando? 

Que intensa eres -la pelinegra hace una mueca y niega- deberias calmarte un poco y pensar bien Lucy -le sonríe de lado y luego suspira- respondiendo a tu primera pregunta, si ella está

Por qué no me contestas? -la cara de Camila mostraba el desinterés de seguir la conversión- le puedes decir que venga -Camila niega- por que? -la pelinegra hace el ademán de que Lucy siga hablando, entonces después hace cara de indignación pero de igual forma dice lo siguiente - por favor... -entonces Camila le sonríe para después darse la vuelta y irse-

Señorita vives -un minutos después Verónica aparece en el marco de la puerta, lucy no puede hacer más que mirarla ya que su profesora de español traía puestos unos shorts y una camisa que dejaba a la vista todo su abdomen, Lucy pensó que se miraba muy hermosa con el pelo suelto y su rostro totalmente al natural como casi siempre, entonces despertó de su hipnotismo al recordar con quien estaba Verónica- si? A que viene?

Desde cuando vives con ella? -Verónica se sorprerde un poco y a diferencia de Camila esta se hecha a reir- que es tan gracioso? Vine por tu número de teléfono -pregunta Lucy es entonces que Verónica decide dejar de reírse y mirar a atrás de Lucy para volver a sorprenderse y hacer una cara de confusión y nuevamente volver a reir-

No se que es más gracioso lo tonta que es tu pregunta, que hayas venido hasta acá por mi número de celular o que hayas venido en auto estando a dos calles de aquí -Verónica se a recuesta en el marco de la puerta  y respira profundamente- no es de su incumbencia señorita vives y no suelo dar mi números a alumnos pero haré una excepción

Sabemos que no soy solo tu alumna así al igual que Camila -Lucy le tiende su celular y Verónica no puede evitar reír por lo bajo, empieza a anotar su número para después devolverselo-

Mi profesora de españolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora