Capitulo 02

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tres semanas después...

- Felicidades señorita Azcurra, va hacer mamá.- cuando el doctor soltó esas palabras resonaron en todo mi cuerpo, tanta fue la emoción que me desmaye.
- señorita, ¿me oye?- me pregunto el doctor moviendo de un lado a otro un algodón con alcohol. - si me siento bien, fue solo un desmayo.- hable y me acomode mejor en la camilla. luego de algunos segundos el doctor me dejo ir, debía ir rápido para ducharme e irme a visitar a mi madre.

me tome el único bus que conducía a la ciudad de Bilbao, una vez que estuviera allí debía tomar el ferri para ir hacia Madrid. tenia en total todo un día de viaje.

_ hola ma, ya estoy en madrid ¿vienes por mi o nos encontramos?_
llame a mi madre desde un teléfono publico.

_voy por ti hija, quédate en la estación en unos minutos llego_

- ¡Justi! ¡mi niña!- grito mi mamá al verme de lejos, corrí y la abrace. - ¿ y como anda Leo?- le pregunte, mientras miraba por la ventanilla del carro, hace mucho que no venia a madrid.
- bien, esta preparando todo para la boda.- me contesto y corrió los ojos por un segundo del camino. - me había olvidado, ¿como esta jeraldine?- volví a interrogarla, pero ahora era el turno de mi cuñada. - exhausta, Eliseo no la deja en paz ni un segundo.- contesto sonriendo.
¿Como estará mi sobrino? Hace un año que no lo veía...

Bajamos del auto y entramos a la casa, tantos recuerdos se me vinieron a la mente en cuestión de segundos. Mi hermano jugando en el living, yo en mi cama estudiando por cualquier examen que tenía dos semanas después y mi madre cocinando.
- me encanta esta foto.- dije admirando la foto en la que estábamos los tres de vacaciones.

- en unas horas viene leo, me dijo que te quiere ver. - hablo mi mamá, ordenando un poco mi antigua habitación.
- ¡Perfecto!, yo también quiero verlo y abrazar muy fuerte al gordito.- le contesté tranquila y me tiré en el sofá del living.

- ¡Bueno hagan espacio que traje la comida!- grito mamá sujetando la olla muy fuerte. la mejor paella del mundo la cocinaba mi madre.

-Ma, estaba riquísima.- hablo mi hermano.
Levantamos la mesa y ayude a servir el postre.
- Ma, leo, jeraldine y eliseo- hablé y sacudi el cabello de mi hermoso sobrino y ahijado. - quería contarles, que voy hacer madre..- solté rápido y con prisa, Me encontraba algo nerviosa.

- Te Felicito!- hablo mi cuñada y me abrazo. -¡me pone muy feliz hermana!- salto leo y también se unió al abrazo.

Mi mamá se encontraba llorando.
- ma.. ¿no te alegra?- le pregunté, quizás estaba decepcionada de mi.

- Justina como no me va alegrar, lloro de felicidad algo hice bien en esta vida para que me hagas abuela...- me largue a llorar al escuchar esas palabras y nos abrazamos tan fuerte que me quedé un poco sin aire.
- ¿de cuánto estás? - hablo jeraldine intrigada. - en realidad desde ahora. - solté riéndome.
- ¿como de ahora?- pregunto mi hermano confundido.
- si, hoy me dijeron que tengo un poroto en la panza.- dije sonriendo y me toque la panza se sentía raro pero me salió natural.

Estuve cuatro semanas en la casa de mi madre, le conté todo lo que había pasado en el año que no nos vimos. De como fueron mis viajes, estuve viviendo en valencia unos meses, desde ahí me fui a Málaga Le mostré las fotos que había sacado, pero a mi lo que más me gustaba era ver a mi mamá admirando todos esos paisajes que se mostraban en las fotos.

- Hija, son una maravilla estos lugares..- dijo y suspiró. - si ma, y las personas son muy buenas. - hable, me levanté y fui a tomar algo. - y ¿como esta nacho?, que raro que no vino.- interrumpió leo, mi familia conocía a nacho porque en algunas visitas que hacia el me acompañaba.

- Se encuentra bien, esta en el festival de ferias artesanales ya sabes el trabaja de vender sus pinturas.- le conteste.
- Qué mal que no pudo venir, de seguro podría haber visto a su hermano.- lamento mi madre
- ¿Su hermano se encuentra aquí?- pregunte intrigante.

- Sí, lo vi por el diario iba a dar charlas en los talleres de actuación.- me contesto y fue a buscar rápidamente el diario .

"Pablo Echeverria dará una charla para todos los alumnos de actuación en el teatro sircus".

- Parece algo serio, siempre se saca fotos con cara de enojado- soltó mi cuñada.

- Es una buena persona, con nacho siempre se comporto de maravilla. Es mas fue el único de la familia que acepto su manera de vivir.- dije, admirando la foto.

- Bueno, ya es tarde..- hablo leo y fue a buscar a mi sobrino que se había dormido en la cama de su abuela.

- mañana venimos.. nos podrías hacer el desayuno- soltó mi hermano bromeando y se despidió.

los días fueron pasando, y debía volver de nuevo a tereñes para encontrarme con los chicos y comenzar a viajar.

- ¿ cuando vendrás de nuevo justi?- hablo mi hermano, me rompía el corazón por que sabia que los extrañaría pero mi vida era otra y la amaba.

- vendré para tu boda tonto, te lo prometo.- solté y sonreí, pero esa sonrisa se lleno de lagrimas que no podía dejar de reprimirlas.

- hija debes venir antes, llámame, desde donde estés no importa la hora sabes que voy a estar colgada al teléfono ya sabes mis horarios. - soltó rápido mamá.
- esta bien ma, te juro que te llamare todos los días que tenga controles y que voy a grabar todo para que lo veas.- hable y mi familia me dio un gran abrazo.
El claxo del ferri comenzó a sonar y debía subirme, pero antes alze a mi ahijado y le di un gran beso. mirarlos desde la ventanilla me saco varias lagrimas pero sabia que siempre estarían conmigo.

- ¡Tina!.- gritaron por detrás.

- ¡hey hola! - grite, saludando a todos mis compañeros ellos también llegaban a la cabaña. Nos adentramos todos para almorzar, pero antes meditamos y nos abrazamos.
Era la ultima comida que comeríamos juntos, luego de eso cada uno se iba donde el viento los llevaba.

- Si necesitas algo.. sabes que puedes llamarme, te adoro y voy amar a ese bebe..- me hablo romi abrazándome fuerte. ella se iba con su novio para Dinamarca.
- cuídala tonto.- agrego y señalo a nacho.
- lo se ro..- contesto mi hermano del alma.

- bueno ya estamos.- soltó mi amigo, me coloque mi mochila y comenzamos a caminar.

- Me encantaría volver a Perú o conocer Brasil o Argentina..- dije balbuceando sin parar.

- ¡Tengo una sorpresa! - soltó eufórico.

- ¿¡cual es nacho sabes que soy impaciente!?- grite nerviosa, odiaba las sorpresas.
- bueno pero tenes que cerrar un minuto los ojos.- agrego y cerré mis ojos,
- ¡ábrelos!- grito fuerte.
Era lo que creía, una ¡camioneta! era hermosa tenia los asientos adelante y atrás tenia un gran espacio para dormir y comer. - ¡es hermosa nacho!- solté y lo abrace.
- No podíamos seguir caminando y mucho menos ahora que va a nacer un poroto o porota.- me contesto.
- ¡Sos un genio! por eso eres mi mejor amigo.- dije y lo ayude a subir la cosas.

- Ahora si, nos vamos ¡Argentina!- arranco y nos fuimos alejando de la comunidad.

Pasitos en la montaña.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora