30 Day's OTP

Day 12

ADVERTENCIA

Quisiera dejar en claro que es mi primera vez escribiendo cosas de este estilo por lo cual no se me da bien.

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Sus gemidos se dejaban escuchar por toda la habitación, podía sentir su cuerpo arder en cada una de las partes en las que las fuertes manos del contrario se posaban, soltó un chillido al sentir los dientes del mayor en su piel, abrió los ojos estaciado por él mar de sensaciobes que él albino le hacia sentir.

-Te amo~ -Sonrió ante la declaración-

-Y-yo mas

Con maestría se impulso hacia delante para lograr atrapar los labios de su pareja mientras pasaba sus brazos al rededor de su cuello para atraerlo a él, sus labios encajaban perfectamente los unos como los otros como si de piezas de un rompecabezas se traran, sus lenguas dansaban entrelazándose entre ellas mientras sus gemidos se escapaban de su boca. Se separó del mayor dándole un leve golpe en él pecho al sentir como una mano hacia de las suyas en su trasero.

-No hagas eso! -Grito con sus mejillas sonrojadas recibiendo como respuesta la risa del hombre que mas amaba en el mundo-

-No me arrepiento, -El contrario sonrió tomando sus manos posando las en su pecho- me traes loco mi príncipe

-Se mordió él labio al pasar sus manos por los pectorales del de ojos turquesa- Debería ser ilegal tener ese cuerpo

-Debería serlo él no hacerte mio en este momento -Un escalofrío recorrió su cuerpo al escuchar aquella voz ronca llena de lujuria en su oído-

Su mirada se curso con la del mayor, tras tantos años de conocerse, de tantas cosas que han vivido juntos no lograba entender como aquel al que se suponía debía guardar respeto y devoción termino eligiéndolo a él como su pareja. Amaba a su rey, sus pensamientos, sus suspiros, sus sonrisas, su todo se lo habia entregado al albino, él era suyo desde hace años.

-Entonces hasme él amor Riku...

Su respiración era agitada, sentía leves corrientes eléctricas todavía pasar por su cuerpo, y aquel desconcierto que tenia por encontrarse en papado paso rápidamente a convertirse en rabia cuando la estrepitosa risa de su hermano termino de traerlo a la realidad.

Un sueño húmedo

En cualquier otra situación se hubiera sentido avergonzado consigo mismo, se hubiera encargado del problema entre sus piernas de una manera manual o dándose una ducha con agua helada, pero en ese mismo instante eso era lo ultimo que le importaba.

-Te voy a matar Vanitas! -Salio de la cama dispuesto a vengarse de la broma de pésimo gusto que él mayor le había tendido-

-No es mi culpa que Riku no te satisfaga, tus gemidos fueron los que me despertaron! -Se escucho al contrario en la legania-

En serio deseaba ser hijo único.

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Día 12 "Besar/Tocar de manera sexual"