Harry Potter One-Shots (@everlovingdeer Traducciones)

"PERCEPCIONES DE SLYTHERIN" - BLAISE ZABINI

Algunas veces odiaba en donde se encontraba la sala común de Slytherin. Siempre era la única que se encontraba más alejada de todos los salones de clases y debido a eso, me veía forzada a caminar por miles de pasillos dentro del castillo para poder llegar a ella. Al final del día lo único que quería era dejarme caer sobre mi cama, sin embargo aún seguía dando vueltas por los corredores.

Milagrosamente la entrada de la sala común siempre estaba despejada. No había estudiantes deambulando afuera del retrato, por lo que no tenía que esperar a que la multitud comenzará a desaparecer. En lugar de eso lo único que tenía que hacer era caminar hacia el retrato, decirle la contraseña e ingresar.

Tal vez parecía que no siempre había sido así, pero en realidad había muchísimas ventajas al pertenecer en Slytherin, pensé mientras me dirigía al lugar en donde se encontraba la sala común, el retrato ya estaba en mi campo de visión. En primer lugar, ganabas un respeto instantáneo por estar en Slytherin, y el estatus que venía de la mano junto con lo primero. Además, tal vez estaba dejando un sesgo, pero Slytherin siempre ofrecía las mejores fiestas después de cada juego.

Sin embargo, junto con todo lo positivo también venían todas las desventajas. La sala común, a pesar de ser una de las más grandes, dejaba ingresar muchas corrientes de aire, ¿Pero qué otra cosa esperaba? La sala común estaba dentro de las mazmorras. Después también estaba toda aquella locura por la sangre, la cual parecía haberse convertido en un sinónimo de la palabra Slytherin. Y con aquella creencia también estaban las suposiciones de que cada día, un nuevo estudiante, era el más reciente mortífago.

Pero al contrario de la creencia popular, ese no era el caso. Era como si la mayoría esperaba que todos los Slytherins caminarán por los pasillos enseñando la marca tenebrosa mientras seguían ciegamente los prejuicios de sus padres. Ese no era el caso en absoluto.

Por ejemplo, yo conocía gente de las otras tres casas que creían en la pureza de la sangre. Además también estaba el tema de los prejuicios, no era como si la casa de Slytherin fuera la única con un montón de prejuicios. No - los Gryffindors, a pesar de ser conocidos como los todopoderosos héroes también tenían dentro de sus mentes una buena cantidad de prejuicios.

Yo, por ejemplo, era una excepción a todos los estereotipos que había sobre Slytherin. Yo prefería morir a alguna vez aceptar llevar en mi antebrazo la marca tenebrosa, ciertamente yo nunca abogue nada acerca de la manía por la pureza de la sangre que era lo que representaba dicha marca. Al dar mi primer paso dentro de la sala común mis ojos instantáneamente fueron a dar a los chicos que se encontraban sentados en el sofá que estaba en medio de la sala común. El príncipe de Slytherin Draco Malfoy, y el chico que era su mano derecha, Blaise Zabini, estaban hablando tranquilamente el uno al otro como si las demás personas dentro de la sala no fueran lo suficientemente importantes como para escuchar su conversación.

Los dos eran tan diferentes como la noche y el día. Sus personalidades y conductas chocaban por completo. Pero para ellos, parecía funcionar. Mucha gente se preguntaba porque ellos dos eran mejores amigos. ¿Pero cómo era posible que nadie viera la respuesta cuando era más que obvia? Draco constantemente estaba rodeado de simpáticas chicas que solo estaban tras el dinero de su familia y tras el estatus que estaba ligado al apellido de los Malfoy. También estaba rodeado de un montón de aburridos chicos que tan solo esperaban asegurar una buena relación con una de las más influyentes familias de sangre pura que existían. En pocas palabras, él era idolatrado, adorado. Él era el modelo perfecto de un sangre pura, para cada familia o amigo él era la joya de la corona. Draco necesitaba a alguien quien no estuviera deslumbrado por el contenido que había dentro de la bóveda de su familia en Gringotts, alguien que lo considerara como su igual en cada sentido del mundo habido y por haber. Ahí era en donde Blaise encajaba perfectamente.