M de Matrimonio [DRARRY]

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Teóricamente Draco no tenía que estar apresurando tanto las cosas en la relación, Harry era un ser de momentos y Draco comprendía que cuando sus emociones lo dominaban actuaba impulsivamente al respecto la mayor parte del tiempo así que al menos podía estar seguro de que este desenfrenado y repentino ataque carnal en su contra podría considerarse sincero por el momento, si se culparía y avergonzaría Harry después era una historia diferente.

—Harry—Draco se inclino hacia atrás intentando apartarse de la espiral placentera que estaba sumergiéndolo poniendo su voz pesada y rasposa—Harry—Repitió aclarándose la garganta

—No lo pienses tanto Dragón, dijiste que me querías, lo dijiste primero...—Draco se mordió el labio cuando Harry (sentado sobre sus piernas y viéndose indecentemente comestible) jalo su camiseta sacándola por encima de su cabeza sus lentes se movieron ligeramente pero no pareció importarle había una hambrienta expresión en su cara, una demoledora y ardiente necesidad de estar más cerca, muchísimo más cerca

—Lo dije pero...—Harry se movió, sus hombros morenos haciendo un movimiento sensual que puso el corazón de Draco a latir como loco.

Harry se sentía como movido por una fuerza invisible, desde que escucho las palabras salir de los labios de su esposo no pudo detenerse solo quería tenerlo, necesitaba que Draco lo sostuviera y ambos se perdieran por fin en ese placer exquisito del que Draco le había dado apenas una probada pero ahora con Draco pareciendo contenerse no pudo más que frustrarse y poner pucheros sin ser totalmente consiente.

—¿Estas arrepintiéndote? —Draco suspiro y se agarro de los brazos de su esposo que parecía decepcionado

—Podemos trasladarnos a la cama ¿Por favor? —Harry parecía no muy convencido de dejar el regazo de Draco pero finalmente cedió a las peticiones de su Dragón y cargándolo en sus brazos ambos se acomodaron en la cama matrimonial

—Vamos Draco—Harry se subió sobre sus caderas una vez mas y las manos blancas y heladas del rubio lo sujetaron firmemente por las caderas Harry cerró los ojos complacido con el apretón y el fuerte agarre

—Harry—El rubio inspiro llenándose los pulmones con el delicioso aroma de su esposo—Tengo que decirte algo primero—Harry sonrió y deslizo las caderas suavemente al inclinarse hacia abajo para besar a Draco en la clavícula besos húmedos y calientes que le provocaron escalofríos

—Dime entonces—Harry uso sus manos para deslizarlas secretamente debajo de la ropa de Draco y el rubio por un momento se olvido hasta de su nombre, la piel de Harry calentaba la suya y las manos callosas por el Quiddicht raspaban deliciosamente

—Y-Yo—Draco trago saliva queriendo luchar contra el placer que nublaba su mente, era algo importante que no podía dejar pasar algo que debía advertirle al moreno antes de que esto escalara demasiado.

—O quizás podamos solamente perder el control por un rato...—Harry sonrió de forma inocente y Draco deseo decir que si, aun recordaba la última vez que ellos estuvieron así de íntimos Draco se había sentido de maravilla y había sido un sueño hecho realidad pero ahora...

—Harry—Draco jalo los brazos de su esposo para que dejara de tocarlo los ojos verdes observaron confundidos

—No sé cuantas veces vas a tener esta oportunidad Draco ¿Seguro que quieres hablar? —Draco pensó brevemente (recordando a tiempo que era lo que quería tratar con Harry) pero ni todas las alarmas que sonaban en su mente lo hicieron desistir.

—Bueno Potter, he aprendido a aprovechar todas las oportunidades que la vida me arroje no creo que romper esa racha ahora sea prudente—Harry sonrió brillante, nada tímido en él