CAPÍTULO 1

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Llevo horas dando vueltas en la cama,sé que tengo que hacer algo, que algo tiene que cambiar, pero no sé como hacerlo. Son tantos años juntos que no me imagino mi vida sin él. No tiene sentido creer todo lo que me dicen, lo sé, pero son mis amigas, ellas jamás me mentirían.

Recuerdo cuando nos conocimos, nos prometimos tantas cosas... Eramos unos críos, apenas tenía 18 años cuando le vi por primera vez. Estaba de fiesta con Nadia y Dakota,mis amigas desde el instituto. Habían puesto esa canción que nos volvía locas, "Hey DJ" se llamaba. Estábamos cantando a voz en grito mientras bailábamos cuando al darme la vuelta le vi. Me miró,le miré y se encendió algo en mi. Nos acercamos despacio mientras seguíamos bailando. Entonces tropecé y me caí al suelo. Fue lo más vergonzoso que me pasó en la vida. Él se asombró y corriendo me ayudó a levantarme. Yo quería que me tragara la tierra, pero sin embargo me empecé a reír al ver su cara de angustia. -Tranquilo,estoy bien. Son estos tacones, que han decidido que era un buen momento para doblarse-. Dije con fingida calma. Aunque en realidad por dentro quería morirme, tanto de dolor como de vergüenza.

Pasamos la noche bailando, hablando y tomando chupitos. Creo que eso fue lo que me llevó a decirle esto al despedirnos:

YO: Yo quiero que tus ojos me miren y tus labios me besen, para que nunca me olvides. Dime ¿Qué te parece?- Hice una pausa para morderme los labios y justo cuando él iba a contestar seguí- Será tan fácil... para mi será tan fácil llegar a tu corazón y llenarte de ilusión-. Entonces se hizo el silencio. Fue largo, pero para nada incómodo. Nos mirábamos a los ojos fijamente cuando decidió contestar.

ÉL: ¿Será tan fácil para ti?,¿será tan fácil llegar a mi corazón y llenarme de ilusión?Porque tu me miras y yo siento lo mismo que tu. Cuando te miro siento que me estoy enamorando. -Le miro sorprendida y entre risas sigue.-De ti me estoy enamorando, no sé que está pasando, creo que son tus ojos que me están hechizando...- suspira. -Me tienes loco bebé,me tienes a tus pies-. Fue precioso, ¿verdad? Pues yo empecé a reírme como una loca y entre risas le contesté: No, a tus pies estaba yo hace un momento-. Rememorando así mi caída en medio de la pista.

Y así comenzó la preciosa y larga historia entre Mateo y Mara. Pasábamos algunas tardes juntos, aveces incluso estudiábamos juntos con tal de vernos.

He de contaros que por aquel entonces yo aún era una chica pura y casta... No mentira, pero me gustaba que las cosas fueran despacio. Había tenido un novio antes, que fue con quien perdí mi virginidad y un par de amigos con derecho a roce pocos meses antes de conocer a Mati.

Pensé que con ellos había ido todo muy rápido así que con Mateo decidí tomarlo con calma.

En nuestra segunda cita me llevó a pasear por la playa y su cara se desfiguró cuando nos cruzamos con su mejor amigo Jorge. Mateo le tiene pánico a lo bocazas que es. Por ese entonces yo no conocía esa faceta suya, pero no tardé mucho en descubrirla. -Mara, ¿Te ha contado Matt lo que me dijo cuando te vio por primera vez?- Los ojos de Mati en ese momento se abrieron como platos y le dio un codazo. -No. pero ahora que veo su reacción quiero saberlo-. Contesté yo divertida. Habíamos parado en un chiringuito para tomar algo cuando me lo contó.

MATEO: Puff... Que bien se ve- pensó en voz alta mientras te miraba. -Me trae loco su figura y ese trajecito corto le queda bien...

JORGE: ¿Qué? No te escucho nada.-Creo que le corté cuando trataba de decirme algo, pero es que la música estaba muy alta.

MATEO: ¡Que si has visto que bien se ve! Me hipnotiza su cintura. Cuando baila hasta los dioses la quieren ver.

JORGE: ¿Pero qué dices? ¿Qué dio...?- En ese momento me giré y os vimos. -Vale, sí, está buena la chica, así que o te das prisa o me adelanto.

TÓXICA [√]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora