CAPÍTULO 6

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Salgo de su departamento con una sonrisa de oreja a oreja. No puedo evitar sentirme tan feliz. Al final se me ha hecho tarde. Miro el reloj del móvil y son las dos de la tarde. Tengo hambre. Voy a llamar a Nadia para invitarla a comer cuando me entra una llamada. Mateo. Mierda,no, no es el momento.

No contesto, pero insiste y vuelve a llamar. Al final no me queda otra que aceptar la llamada y responder.

MATEO:Hola Mara-. Me dice y noto su voz quebrada.

MARA: Hola...-. Y mi voz se quiebra también. La culpa por todo lo que he hecho, por lo bien que lo he estado pasando mientras él probablemente estuviera sufriendo, llega a mi.

MATEO:Quizás esta vez, será la última vez que tú sepas de mi, es que en verdad no sé qué nos paso, si todo te daba y la luna ya no brilla sin ti. Estés donde estés quiero que sepas que escucho tu voz y que yo vivo extrañándote, que no hay distancia entre tú y yo que me impida seguir amándote, que necesito hacerte el amor como la primera vez, que aún recuerdo tu olor y cada lunar de tu piel. Quiero volver, volverte a ver. Quiero volverte a besar y abrazarte para nunca más soltarte. -Su voz se rompe. Sé que está llorando, al igual que yo.

MARA: Yo... no sé que decirte Mateo...

MATEO: Mati, por favor, llámame Mati... no sabes como extraño cuando lo dices así.

MARA: No me lo pongas más difícil Mateo, por favor-. Le escucho llorar a través del teléfono. -Está bien. Veámonos. ¿Quieres ir a comer?


Tras una muy dura comida con Mateo estoy más perdida que antes. Ahora sí tengo que asumir una posición. Debo decidir si quedarme con el amor de mi vida o con el hombre que me descontrola.

Necesito a mis amigas. Llamo a Nadia y la cito en mi casa. Hago lo mismo con Dakota y mi madre. Necesito que entre las cuatro dilucidemos la solución.

DAKOTA: Vais a decir que estoy loca porque fui la primera en apoyar tu relación con Gato, pero después de todo lo que me has contado sobre Mateo... Creo que nosotras nos equivocamos con él. Que definitivamente él te quiere y que no había nada con Linda.

NADIA: Yo opino lo mismo que Duck. Quizás Gorka sea un buen chico, pero no le conocemos. No podemos decirte que dejes una relación de cinco años por una calentura. Yo hablaría con Mateo, le contaría la situación y si no le importa lo que hayas hecho en este tiempo,volvería a intentarlo con él.

MAMÁ:Pues yo chicas no lo veo de ese modo. Creo que Marita tiene alguien nuevo a quien conocer. Alguien que la ilusiona como Matt hace años que no hace. Hija, yo te veo cada día llegar con una sonrisa de oreja a oreja. Ese chico te hace feliz.

MARA: Sí, mamá, pero hasta hace unos meses Mati me hacía igual de feliz.Yo sé que aún le quiero y que es el amor de mi vida. Pero Gorka...No le quiero hacer daño.

DAKOTA: Acabas de contestarte tu misma. Quieres estar con Mateo, no con Gorka. Ya tienes la respuesta a tu pregunta.

MARA: No es tan fácil Daki. Gorka me da algo que hace tiempo no sentía.

DAKOTA: Lo que te da es mambo todo el día guarrilla, y de eso es difícil desengancharse.

MARA: Él me quiere y no me conoce y cuando le llamo para janguear, mira lo bonito que se pone...

MAMÁ: ¿Jangue qué?- Todas reímos.

NADIA: Janguear es como Hugo y Gorka le llaman a salir de fiesta o con nosotras.

MAMÁ: Estas modernidades. A ver, enséñame esa foto-. Le enseño la foto del día que nos fuimos al parque Europa y las va pasando hasta llegar a la de París. -Hija...

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