CAPÍTULO 4

77 1 0
                                    

Salimos de la oficina sonrientes. Pregunto por el aseo y voy a retocarme un poco antes de ver a mis amigas, que se preguntarán donde me he metido.

Me sorprende que al llegar a la piscina Nadia no está y que Dakota no se había percatado de mi tan larga ausencia. Estaba bastante distraída con un par de bomberos.

Me siento en la mesa en la que estábamos antes de que Gorka me"secuestrase". Pocos minutos después él llega con un "Sex on the beach" en una mano y una cerveza en la otra. -No sabía que podías estar más preciosa que hace un momento-. Me dice juguetón.-Deberías saber que el buen sexo produce en nosotras un efecto belleza automático-. Le digo siguiendo su juego. Él se muerde el labio y se acerca para darme un beso. Yo me aparto. No quiero que mis amigas me vean. -Mejor que no me beses si no quieres que esto termine en una orgía. -¿Y por qué iba a terminar así?- pregunta divertido. -Porque como empiece a besarte ya no voy a poder parar hasta el final-. Digo justo antes de dar un sorbo a mi bebida mientras miro fijamente sus ojos. El traga con dificultad y sonríe coqueto.

Pasamos un rato en silencio y empiezo a sentirme un poco incómoda. Estoy cayendo en lo que acabo de hacer. Me he acostado con otro chico.Tengo novio y he hecho eso de lo que tanto he acusado a Mateo. Soy lo peor. Gorka debe notar que algo me pasa porque me dice. -Ey! No me digas que te sientes mal y que este sitio no te está gustando. Solo faltan unas copas más-. Me sonríe, pero veo su angustia en esa sonrisa. Trato de apartar a Mateo de mi mente. -No, es que esta música no me...-. Acaban de cambiar la música y han puesto reggaetón. Seguro que es cosa de Daki.

Justo en ese momento me interrumpe y dice: "Dice que le gusta el honey y baladas un montón, pero cuando está en la disco y le ponen reggaetón ella se vuelve loca. Le encanta que la vean cuando ella perrea, cuando se remenea". Y me hace reír. Creo que la muy tonta vio mi cara de preocupación y convenció al DJ para que pusiera otra de mis canciones favoritas. "Me necesita".

Mis piernas comienzan a moverse y no puedo evitar ponerme a bailar. Él se levanta y se acerca a mi cuerpo. Comenzamos con un juego de roces constante. Siento su erección cerca de mi trasero y sonrío para mis adentros. Este chico no ha tenido suficiente. Me doy la vuelta y nuestras caras quedan muy cerca. Dakota nos mira con una sonrisa en los labios. Triunfante. -No se que tienes que me enamora. Cuando estoy contigo se paran las horas. Quédate conmigo-. Le digo con mis labios sobre sus labios. -No te dejo sola, tu tienes algo que me descontrola-. Me contesta justo antes de besarme. Escucho un vaso romperse y me separo rápidamente. Nadia ha dejado caer su copa al salir a la terraza. Imagino que me ha visto y me mira con cara interrogante. No me juzga, lo sé, no me mira mal ni sonríe como Daki. Ella estaba deseando que terminara con Mateo desde que le vieron por primera vez con Linda. Pero Nadia... Nadia sabe todo lo que he sufrido por la supuesta infidelidad de mi pareja y ahora quien lo ha hecho de verdad he sido yo. Le devuelvo la mirada, pero la mía no es interrogante, es la mirada de una chica confundida. Una chica que ha ido perdiendo poco a poco al amor de su vida y a conocido a alguien que simplemente le vuelve loca.


Han pasado varios días y yo sigo sin hablar con Mateo. Dakita le dio mi número de teléfono a Gorka, con lo cual seguimos en contacto. No voy a decir que me arrepiento de lo que hice, pero no me siento bien del todo.

Mi madre se ha ido con mis tíos este fin de semana y mis amigas y yo pensamos en hacer una fiesta en mi casa. He estado dándole vueltas ala idea de invitar a Gorka. Él dice que ya le puedo llamar Gato,pero yo insisto en que no somos amigos. Aunque en mi agenda si le tengo con ese apodo.

Como si me leyera la mente Gorka me llama por teléfono. -Hola Mara, ¿estás ocupada esta noche? -Pues precisamente quería avisarte deque hay una fiesta en mi casa y bueno, había pensado en ti. -¿A sí?¿Y en qué pensabas exactamente? -En que nos cae la noche y tu me abrazas. En que te llevo a la Luna sin la NASA. -¿Haremos travesuras y veremos lo que pasa?-. Pregunta con la voz ronca. -Contigo puedo ver planetas en el techo- suspira. -A cada rincón le sacaremos provecho-. Le digo picarona. -Seremos felices, eso dalo por hecho-.Me contesta justo después de tragar saliva con dificultad. -Cuando estamos juntos el mundo se detiene. -Porque hacemos todo lo que es bueno y conviene-. Me dice. -Yo te entretengo, tu me entretienes...¿Como me niegas esa boquita que tienes?. -¿Buscamos excusas para quedarnos solos, hacer de todo, volvernos locos? Con esa carita de princesita. ¿Cómo que me niego a esa boquita?-. Una risa tonta me invade y él se contagia. -No hace falta buscar excusas, tu sólo espera a que los demás se vayan y quédate conmigo. -Hecho-.

TÓXICA [√]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora