XII

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Caminaba, no con lluvias,

con tormentas.

Aquello que alguna vez amó 

había sido destruido

Cada parte de aquel lugar 

Tenía pedazos del corazón de la marchita Lola,

que era quizás, la flor más bella

de aquel jardín.

Pero ahora ¿Qué importaba?

Ya nada importaba

porque ya nada había,

y los pétalos de Lola

se iban ahogando más y más

en una fría laguna de sangre

y se desprendían de ella.

L

E

N

T

A

M

E

N

T

E

Cuando las flores se marchitanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora