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Farah.

Ha pasado menos de una semana desde que Miles se disculpó con todos y lo cierto es, que aunque estoy actuando como si nada hubiera pasado, no puedo olvidar lo que me dijo. Intento no pensarlo, pero de vez en cuando se me viene todo a la cabeza.
Esa noche fue horrible, estuve llorando hasta que me quedé dormida con Adrien a mi lado, sabía que quería preguntarme muchas cosas, pero no lo hizo, aunque por la mañana quise darle algunas explicaciones.

-Farah, no tienes que preocuparte por lo de ayer. Ni Peter ni yo diremos nada a nadie, te lo prometo
-Lo sé, pero no es eso...
-Entonces qué es?
-No quiero que penséis que estoy loca, nunca he intentado...ya sabes -me miró confundido- nunca he intentado suicidarme
-Oh -parecía sorprendido- y lo que dijo Miles?
-No sé, supongo que sacó sus conclusiones cuando le dije que tengo depresión y pensó que la razón por la que tomo la medicación es esa
-Es un hijo de puta.
-Da igual, ya lo ha dicho y tampoco podemos hacer nada
-Tendría que haberle pegado cuando estábamos en el bar
-No ibas a conseguir nada con eso, solo poner las cosas peor -dió un largo suspiro y sacó un cigarro de la cajetilla-
-Y, porque estás deprimida?
-Pues la verdad es que no lo sé...supongo que tengo algo en la cabeza que no encaja bien
-No es por algo en concreto?
-No lo sé, no creo...es un cúmulo de cosas, me cuesta ver lo bueno de la vida muchas veces y me siento sola, aunque sé que no lo estoy. Es algo difícil de explicar
-Bueno, creo que te entiendo...más o menos

No me hizo más preguntas sobre el tema y no hemos vuelto a hablar de ello, pero puedo notar que sigue queriendo saber más sobre el tema. Supongo que no insiste porque no querrá hacerme sentir incómoda o puede que no sepa cómo preguntarme lo. De todas formas agradezco que no lo haga, aún no me siento preparada para hablar de todo eso.

Estos días a penas he visto a los demás, nos hemos mudado por fin a la casa nueva y me estoy dedicando casi todo el tiempo a decorarla a mi gusto. He comprado algunos muebles por internet pero en lo que tardan en llegar estoy pintando toda la habitación, ya está casi terminada, no me he complicado mucho la verdad, he escogido un blanco muy simple, pero el trabajo gordo fue quitar todo el gotelé, tuve que hacerlo prácticamente yo sola porque mis padres se estaban ocupando de su habitación y del salón. Adrien vino un día a ayudarme, la verdad es que fue bastante divertido, las horas que metimos se me hicieron mucho más amenas con sus bromas y sus comentarios.
Hoy he decidido que voy a pintar una de las paredes, quiero hacer una especie de mural, así que me pongo a pensar en lo que quiero hacer exactamente y lo dibujo en una hoja de papel. Cuando lo tengo terminado y antes de empezar a pintar, me cambio de ropa, me he puesto lo más viejo que tenía en el armario, unos leggins que debería haber tirado hace unos años y una camiseta que es tres veces yo.
Empiezo a hacer el dibujo en la pared, lo hago con cuidado intentando que quede perfecto, una vez hechas las siluetas cojo la pintura y empiezo a rellenar todo.
No me he complicado demasiado con el diseño, simplemente he hecho unos árboles y he usado unos colores más claros o más oscuros dependiendo de donde quería darle más profundidad y para las hojas he usado los colores de siempre, pero la verdad es que me ha quedado bastante bien. Decido hacerle una foto y mandárselo a mis amigas de Ámsterdam, estoy orgullosa del trabajo que he hecho.

He salido al jardín a fumar un cigarro con la misma ropa vieja con la que estaba pintando, estoy apoyada en la pared mientras me da el sol y cierro los ojos, empiezo a repasar mentalmente todo lo que tengo que hacer durante estos días; acabar de montar los muebles de la habitación, colocar todas mis cosas en los armarios, pasarme por Correos y hacer los ejercicios que me ha mandado la nueva psicóloga.
Si, he empezado una terapia nueva, quería seguir con la terapeuta que tenía en Ámsterdam pero era algo absurdo teniendo aquí un montón de psicólogos, así que me ha derivado a una conocida suya y de momento la cosa no va mal. He decidido que voy a tomármelo cien por cien en serio esta vez, quiero estar bien y que el psiquiatra me quite ya la medicación de una puta vez. Salgo de mi trance cuando oigo que me llaman, abro los ojos y veo a Miles, Adrien, Nora y JJ en la entrada de casa.

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⏰ Última actualización: Apr 02, 2020 ⏰

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Acantilados MalvaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora