dυℓce navιdad {נυѕтιɴ&тú} єяóтιcα; especial navidad

Capítulo 1 ; "La apuesta"

Justin bostezó poniendo su mano en la boca, mientras encorvaba su espalda. _________ lo miró detenidamente apartando su mirada de la televisión, la cual estaban transmitiendo una película de navidad, verdaderamente bonita y romántica. En que la protagonista había tenido un accidente de tráfico leve, con el protagonista el cual su nombre se llamaba Alex, era realmente atractivo a simple vista.

Y ellos se iban conociendo poco a poco, ________ agradecía eternamente que no pasaran una escena de sexo porque estaban sus hijos delante y sería realmente incómodo, aunque ellos aún eran pequeños. Tenía a Oscar con sus 7 años, y a Elena con 6 años. Solo se llevaban un año y tres meses de diferencia.

Y encima Justin estaba deseando tener otro hijo, otra niña concretamente. Ya que él decía que Elena le pedía que le trajeran una hermanita, aunque ella sigue dudando si es porque quiere tener sexo todas las noches. Aunque no puede quejarse de ello. Hoy intentaría descubrir lo que realmente quería y deseaba.

-Tienes sueño? -Le preguntó a Justin, quién paso el brazo izquierdo por encima de sus hombros y acercó sus labios hacia su cuello, depositando besos mojados en él. Ella cerró los ojos, lanzando un suspiro poco después. -No, es la película que me aburre.- Comentó.

Ella lo empujó posando su mano en su pecho apartándolo hacia atrás.

-La película no es aburrida, es muy bonita. -Defendió.

Él se encogió de hombros y volvió a acercar sus labios a su cuello.

-Solo quiero ir a la habitación, a hacer nuestras cosas….- Le susurró sobre su cuello. Ella tragó el nudo que se había formado en su garganta.

-Justin están los niños delante.. -Dijo, volviéndolo apartar hacia atrás.

Él lanzó un suspiro y se levantó del sofá. -Venga chicos, a la cama que es tarde.- Les anunció aplaudiendo para que se dieran prisa. Ellos se quejaron cruzándose de brazos, en protesta.

-No es tarde papá, quiero quedarme a terminar de ver la película..- Se quejó Elena mirándolo con la cara de perrito, Justin siempre se ablandaba al ver esa cara que ponía su hija y cedía en lo que ella quisiese. Desde que Elena a estado en los brazos de su padre por primera vez, desde ese momento a sido la niña de sus ojos.

Él negó con la cabeza, y __________ frunció el ceño al ver como Justin se negaba por primera vez a dejarle hacer lo que ella quería.- Es tarde cielo, mañana tienes escuela, verdad?

Elena asintió con la cabeza descontenta. Él se agachó a su altura y la cogió en brazos sin ningún esfuerzo.- Mamá yo no quiero irme a la cama, me levanto mucho después que Elena, puedo quedarme un rato más? -Le preguntó Oscar a su madre juntando sus manos en señal de “Por favor”.

Su madre suspiró antes de abrir la boca y decir algo, pero Justin no le dejó ya que le había interrumpido.- Tú, a la cama, ahora. Luego siempre acaban llamándome quejándose de que te quedas dormido en clase.- Dijo Justin no muy feliz señalando su cuarto.

Oscar se cruzó de brazos con el ceño fruncido. -Mamaaaaaaaaa…. -Se quejó.

-Ya has escuchado a tu padre, cariño. -Comentó antes de que Justin la volviera a interrumpir.

Oscar se levantó rápidamente del suelo y corrió escaleras arriba hacia su habitación enfadado. ________ suspiró, nunca le había gustado enfadarse con sus hijos, pero en cierta parte Justin tenía razón. Oscar siempre acababa durmiendo en sus clases, y eso verdaderamente le afectaba en cierto modo.

Justin sin siquiera inmutarse se dirigió al cuarto de su hija a dejarla en su cama, obligándola a dormir. _________ vio como desaparecía escaleras arriba, se levantó del sofá y se dirigió a la cocina para beber agua antes de irse a su habitación. Entró en su habitación y se dio cuenta que Justin aún seguía en la habitación de su hija, seguramente leyéndole un cuento.

Se deshizo de su camiseta y se colocó una sudadera de Justin, se miró al espejo y se deshizo de la goma que amarraba su pelo. Finalmente apagó las luces de la habitación y se acomodó en la cama matrimonial que compartía con Justin. Suspiró sabiendo lo que venía ahora, la verdad es que no tenía muchas ganas, hoy domingo había tenido que limpiar y ordenar todas las habitaciones de la casa, por así decirlo, hacer limpieza general.Era realmente agotador y así de paso hacia ejercicio, porque había sudado como un pollo.

Escuchó la puerta abrirse y cerrarse poco después, notó como Justin se acomodaba a su lado. Ella intentó hacerse la dormida, cosa que no funcionó ya que Justin pasaba sus manos por dentro de su sudadera y besaba su mejilla y parte de su boca.

Ella gruñó dándose la vuelta, y dándole a Justin la espalda.- Justin hoy no, no tengo ganas. -Se quejó intentando que Justin la dejara un poco en paz.

Suspiró cuando fue un intento nulo.- Nena, estoy muy caliente.- Contestó pegando su cuerpo con su espalda, ella tragó saliva al sentir su dureza pegarse contra su trasero.

-Lo sientes? -Le preguntó pasando su labios por su cuello.

Ella asintió con la cabeza, cerrando los ojos intentando no caer en sus redes.- Justin. -Se quejó girando su cuerpo para darle la cara, mientras estiraba su brazo alcanzando el interruptor de la luz.

Se acomodó sentándose en la cama.- Tenemos que hablar, en serio, esto no es normal, lo hacemos todas las noches y estoy cansada hoy. No puedes aguantar un solo día sin tener sexo? -Preguntó mirándole seriamente.

Él frunció el ceño. -Sí que puedo aguantar. Puedo aguantar mucho más tiempo.- Afirmó encogiéndose de hombros.

-Pues no lo parece.

-Ya, quieres apostarte algo a que sí que puedo aguantar? -Le preguntó Justin con la ceja enarcada.

Ella frunció el ceño. -Esto no es un juego de niños pequeños, Justin.

-Te aseguro que puedo aguantar más tiempo de tú. -Siguió diciendo.

Ella se sorprendió al oírlo, y se rió.- Justin esto se está yendo de las manos.- Comentó, negando con la cabeza.

-Lo que pasa es que no eres lo suficiente valiente para aceptar esta apuesta? Admítelo cariño.- Le retó.

Ella lo miró fijamente, él sabía su debilidad desde hace mucho tiempo y ahora lo estaba usando en su contra. Ella nunca permite que le llamen gallina, desde lo ocurrido en el pasado.

-Y qué te apuestas? -Preguntó, sin negar la petición. Nadie la llamaba gallina y menos su marido.

-Lo que tu quieras cariño.- Se encogió de hombros, sonriendo de costado.

-Mmmm… Si yo gano, un día de compras… No…. Un día entero en el balneario, tú conmigo. Ahora que es navidad está a mitad de precio.- Le señaló diciendo la penúltima frase.

Él asintió acorde, ella sabía que odiaba esos sitios pero él en esos momentos no se podía negar ante eso.

-Y si yo gano, harás lo que yo te diga y no habló precisamente fuera de la cama.

Ella se rió con ganas, nunca cambiaría.- Está bien. Trato echo. Quien lo diría apostando contra mi propio marido.- Rodó los ojos.

-Este año la navidad va a ser dulce, una dulce navidad.- Sonrió Justin, antes de apagar las luces y dormir pensando lo que tenía preparado para ella para el día siguiente. Él nunca perdía en las apuestas y esa no era la excepción. Haría lo imposible para que su mujer cayera en sus redes.

¿Quién crees que perderá la apuesta?

*~*

Aquí tenéis el primer capítulo de "Dulce navidad". 

Y esto se pondrá más bien caliente, de aquí poco..

Espero con ansias vuestros comentarios.

SOIS DEL #TEMRAYIS O #TEAMBIEBER?

Muchas graacias a todas.