Prologo

690 32 3
                                    

Era una noche lluviosa, aun la recuerdo.

Ese día parecía ser como cualquier otro, mama y papa sentados en la biblioteca leyendo los fascinantes y poco usuales libros, mi hermana mayor enseñándome acerca de sus libros de anatomía y química y por supuesto, yo limpiando las marionetas que mi abuelo André me regalo, sus amigos, mis amigos.

Esos eran para mis los momentos más maravillosos en la vida, quien diría que las dos tonadas del timbre del portón de la mansión marcarían el final de esta.

Aun escucho los tacones de mama caminando por el pasillo para ir abrir la puerta a quien sea que estuviera llamando del otro lado. La emisión que sentía era increíble, pensé que se trataba de mi abuelo, quien al fin había vuelto de su viaje.
mi abuelo, yo siempre me sentía bien cando estaba con el, el era mi amigo, el era mi mentor, el para mi era un ejemplo a seguir, una leyenda viviente, recuerdo cuando me contaba las historias cuando estuvo en la guerra, me llenaba de fantásticas ideas y sueños llenos de esperanza, la verdad casi es chistoso, ni siquiera supe jamás la edad de mi abuelo, pero fácilmente el excedía los cien años de edad, aun así , en todos mis recuerdos en donde el esta presente nunca enfermaba, ni parecía sentir dolor, era casi si el fuera a vivir para siempre, y es por eso que fue tan difícil para mi el recuerdo de cuando mi madre abrió la puerta aquel día.

Al abrir la puerta un policía entro a la casa, aun tengo presente ese momento pues yo los veía desde la planta alta.

El policía pregunto si éramos los familiares del hombre llamado André Toulon pues lo habían hallado muerto en el hotel llamado Bodega Bay Inn, se había suicidado...

PUPPET MASTERS: Lincoln el gran maestro de las marionetasWhere stories live. Discover now