Parte III

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La conversación se había tornado bastante más profunda, entre ambos intentaban descifrar qué había más allá de lo que se conocía de Bruce Wayne. Era increíble que habiendo compartido tanto tiempo con una persona, ninguno llegara a conocerle realmente. Dick le sirvió una copa a Kate y se sentó frente a ella.

—Siempre creí que había algo detrás de todo esto, pero jamás imaginé que sería algo tan grande como que estuviesen emparentados. -Suspiró- Era increíble ver como Bruce iba perdiendo el control con cada uno de los criminales de esta ciudad, pero nunca perdió los estribos con el peor de todos, siempre caía en un círculo vicioso que también me arrastraba a mi. Nunca se lo cuestioné, aunque debí hacerlo.

—Creo que ninguno esperaba algo como eso. Y quizás fue el punto de inflexión que le hizo perder completamente la cabeza. -Dick suspiró-

—Él había perdido la cabeza hace mucho tiempo. Ya no había una diferencia entre Batman y Bruce Wayne. El “Personaje” se había vuelto la persona, y no era fácil de manejar. Puede sonar mal lo que voy a decir, pero creo que aguantó demasiado tiempo siendo él. No había mucha diferencia entre Batman y el Joker, sus caminos estaban marcados desde el principio.

—Pero haber estado en el medio de todo esto fue agobiante, haberlo descubierto así, no lo sé, siento que aún no puedo asimilarlo.

—Todo se puede, con calma y paciencia. Lo que sí me parece muy curioso es que esto no haya salido a la luz, sobre todo en esta ciudad ¿Quiénes lo saben?

—Además de ti y de mi, solo el comisionado Trenton y Clark Kent. -Al escuchar esto Dick bufó con desprecio-

—¿Por qué Clark? ¿Qué pinta él en todo esto? Ellos ni siquiera se llevaban bien.

—En eso te equivocas. Si hubo alguien que estuvo al pendiente de Bruce, fue Clark, no pasó un día en el que estuviese aquí o buscara la forma de saber sobre él. Dick, no es mentira cuando te digo que entre los dos tenemos una versión diferente de Bruce, el mundo conoce otra, Clark conoce otra. Y ninguna es falsa. Era un hombre muy complejo, pero que sabía lo que hacía. Muy a su manera, sabía lo que hacía.

—Ni que utilices esos métodos de manipulación mental, a mi no me sirve, a mi no me convence. Lo que yo viví durante años a su lado, no solo marcó mi destino, marcó mi vida para siempre. Y ya te lo dije, no puedo tomar un manto al que renuncié antes de siquiera saber que podía ser mío. No quiero terminar como él.

—Entonces no sea como él, sé una mejor versión.

—No es tan sencillo, y tu lo sabes. -Se bebió el contenido completo de su copa- No puedo hacerlo, perdón. -Dijo con un tanto de pesar, dejando el vaso sobre la mesa y saliendo de aquella habitación-


A la mañana siguiente Kate recibía a Clark, ambos tenían mucho de qué hablar.

—Me alegra muchísimo que hayas venido. -Comentaba la chica mientras caminaba hacia el escritorio- La verdad me reconforta.

—Sabes que puedes contar conmigo para lo que necesites. -Ella suspiró- ¿Cómo lo estás tomando?

—Como se puede, intento tomarlo del mejor modo posible, pero es muy difícil. Tanto para Kate Kane como Batwoman. -Clark movió los ojos hacia un lado- Sabes, yo me quedo en un punto ciego y me veo, me veo autosuficiente, no me hace falta nadie a mi lado. Puede sonar soberbio pero yo me gané esto, yo elegí esto. Prácticamente pasé por encima de Bruce para ganarme este puesto, y sé que puedo hacerlo. Pero llega un momento en el que me veo vulnerable, veo que todo me está afectando emocionalmente y me doy cuenta que no puedo hacerlo sola, por lo menos no ahora, no en este momento. Lo necesito a él a mi lado para poder tomar el rumbo.

—Richard es un poco complicado, no ha tenido una vida fácil, ha tenido que sortear una gran cantidad de obstáculos para poder llegar a donde está. Sí, Bruce fue un Pilar en su vida, fue esa figura paterna, un tanto disfuncional, pero fue quien le enseñó todo lo que sabe. Fue su influencia fue tal, que se podría decir quedó un poco traumado.

—¿Un poco? Está renuente a siquiera escuchar.

—Tienes que darle su espacio, su tiempo. Si Richard realmente quisiera estar alejado del mundo de Bruce, del mundo de Batman, jamás hubiese adoptado la identidad de Nightwing. Dale un poco más de tiempo, que vea cuanto lo necesitas. No tengas miedo a mostrarte vulnerable, porque con ese pensamiento de ser autosuficiente, suenas como tu primo. -Kate encogió los hombros- 

—¿Y si hablas con él? -Clark se sorprendió- Sí, no creo que alguien se resista a una charla con el último hijo de Kriptón.

—Sí, no creo que sea una buena idea. La última vez que hablamos, las cosas no quedaron muy bien. Al menos tomó un buen camino, pero, no, no es una buena idea que hable con él. Solo si se da el momento y la situación.

—¿Solo me queda esperar? ¡Vaya! Es un gran plan. -Este comentario lo había hecho con muchísimo sarcasmo-


Dick se había dispuesto a dar una caminata por la ciudad, quería ver con sus propios ojos cómo se estaban manejando las cosas, cómo estaba viviendo la gente. Y la verdad es que la realidad superaba a lo que pudiese siquiera imaginar. El miedo se sentía en cada esquina, podías ver como las personas prácticamente huían de quien tuviese al lado, podías ver a la policía correteando a algún ratero. Era increíble todo lo que pudo ver en apenas una hora de caminata. La ciudad estaba perdida, desde que Batman había desaparecido se podría decir que hasta la esperanza se había ido. Al pasar cerca de un puerto de periódicos se detuvo a ver aquella primera plana que mostraba una instantánea de la batiseñal con la leyenda “¿Qué sigue después de Batman?”. Por unos segundos se quedó viendo aquella foto, y apenas pudo murmurar.

—Es increíble que aún en la muerte no pueda librarme de ti. -Su atención fue rápidamente desviada hacia la voz de una chica que le habló a la espalda-

—¿Eres Dick Grayson? -Él volteó lentamente encontrándose con una pequeña y delgada rubia-

—¡Sí!

—Lo sabía, te vi caminando y te reconocí. -Dijo un poco emociona- Mi nombre es Lucy, acabo de empezar a trabajar en el Observador de Gótica. -Él escuchaba atento- Tu eres el hijo adoptivo de Bruce Wayne ¿No? -Una media sonrisa se dibujó en el rostro de Dick-

—Al parecer eso es lo único que importa con respecto a mi en esta ciudad.

—Quizás a los demás solo le importe eso, a mi me gustaría hacerte una pregunta y que me la respondas como detective no como “El hijo adoptivo”. -Él frunció el ceño- Con respecto a los rumores que están corriendo, esos que dicen que la policía está ocultando información con respecto a lo que ocurrió con el señor Wayne, manipulando evidencia para que la gente crea que fue Arthur Fleck quien le asesinó ¿Qué dices de eso? -Dick había quedado en blanco, se suponía que nadie sabía aquello-

—No sé de qué me estás hablando. Yo manejo la versión oficial, la real, la que sustenta la evidencia. No sé de dónde pudiste sacar esto. Lo siento. -Encogió los hombros y empezó a caminar. Pero ella volvió a hablarle-

—Pero eso no es lo único que la policía está ocultando, al parece hay evidencia que sustenta que Bruce Wayne tenía alguna relación con Batman. -Ahí paró en seco ¿Qué estaba pasando?- Son solo rumores, pero no dejan de ser curiosos, imagino que tendrás una opinión al respecto.

—Sí la tengo, es una reverenda estupidez la que estás diciendo. Te recomiendo indagues mejor, te informes mejor, y así no creas en rumores mal fundados. Con permiso. -Apresuró el paso para alejarse de aquel lugar-


De vuelta a la mansión Wayne, Kate volvía de la puerta, acababa de despedir a Clark. Cuando se dio la vuelta, se llevó un gran susto al ver a Dick caminando hacia ella.

—Tenemos un problema, uno enorme y…

—¿Cómo entraste aquí? -Preguntó preocupada-

—¿Olvidas que viví casi 20 años aquí? Tengo mis trucos. Pero ese no es el punto, lo importante aquí es que hay problemas. -Kate le miró expectante- Acabo de cruzarme con una reportera que me estaba preguntando sobre la muerte de Bruce, pero me habló justo de lo que hablábamos anoche.

—No es posible…

—Lo es, era una reportera del Observador, se llama Lucy. -Kate se quedó esperando el apellido- Lo siento, me faltó agilidad, no pregunté su apellido.

—Buen trabajo detective Grayson. -Dijo sarcásticamente mientras se dirigía con rapidez a la baticueva. Al apenas entrar, los monitores empezaron a mostrar un estado de emergencia. En el centro de la ciudad estaba explotando un motín. La cara de ambos fue de agobio total.-

—Odio esta maldita ciudad. -Dijo de muy mala gana Dick-

(Bat) Family Business 🦇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora