Capitulo XXIII

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Yo de por sí siempre tuve el presentimiento de que esa familia era lo peor. No podía quedarme de brazos cruzados, si Lisanna tuvo intenciones de entrar, eso significa que ya lo había hecho antes, y no permitiría que vuelva a hacerle la vida imposible a Valentina.

- Necesito entrar.

- No podemos abrirle, son las órdenes de nuestro señor - El guardia se negaba a abrirme la puerta - Vuelva a su casa, mi señor no quiere visitas de nadie.

- ¡Que me dejen entrar! - Agarré cabreado las rejas - ¡Necesito hablar con Valentina! ¡Quiero hablar con mi esposa!

Agarré con cólera al hombre del cuello de su traje ya que estaba cerca mío, solo los barrotes nos separaban.

- Déjame pasar o no respondo - advertí serio.

- Mi señor...

- ¡No me iré si no es con mi mujer!

- La señorita Valentina no está - Una criada, nana mejor dicho, se aproximó al oírme y solté al tipo con rostro pálido - Ella, mi niña Luna y el señor salieron rumbo al aeropuerto.

- ¿Qué? - debía ser una broma - ¡¿Y a dónde piensan ir?! ¡Yo necesito hablar con Valentina! ¡Dígame a dónde se la llevaron!

- No sabemos, ellos salieron de pronto con sus maletas y el señor dijo que darían un pequeño viaje.

- No - negué serio, eso sobre mi cadáver.

Fui directamente a mi coche y me dirigí rumbo al único aeropuerto de la ciudad. Natsu estaba pasando la raya al llevarse a Valentina fuera de la ciudad sin consultarme antes.

Además, los documentos de Valentina los tenía yo así que ella no podía salir.

A menos que ese maldito....

...

Pov N.

Estábamos en el aeropuerto, hace unos segundos nos llamaron para pasar por la ventanilla donde nos harían unas pequeñas preguntas además de verificar nuestros papeles para permitirnos la salida del país.

- ¿Natsu Dragneel? - La señora se levantó para mirarme - ¿Lucy Heartfilia? - Miré a mi rubia favorita, ella bufo y levantó la mano - Y... ¿Luna Dragneel?

- ¡Aquí! - Mi hija saltó con una sonrisa - y ella es Gogo y no tiene nada malo en sus bolsillos - Le mostró su muñeca a través de la ventanilla.

- Sus documentos están en orden, pueden pasar a recoger sus equipajes - Yo sonreí - Que tengan un feliz viaje a Miami.

Nos dirigimos a la inspección de equipajes y tomamos nuestras maletas para ponernos en la fila de personas que iban a nuestro mismo destino.

- Puedo ir a la cárcel, ¿Sabes? - Ella sonaba molesta - Usar dos identificaciones es ilegal.

- De eso me encargo yo - La tranquilice - Ahora relájate, este viaje es para olvidar nuestras diferencias.

- No es justo que no pueda ni siquiera avisarle a mi familia.

- Tu familia está aquí - Corregí.

- Me refiero a Taeyang, él se molestará conmigo si se entera que acepté esta propuesta - Se preocupó - Además, debe sentirse muy solo.

- Cuando lleguemos a nuestro hotel puedes llamarlo.

- ¿En serio?

- Pero obviamente no le puedes decir nuestra ubicación, de lo contrario nuestros planes se irían a la mierda.

- Papi - Luna me miró enojada - No digas palabrotas, eso está mal.

- Lo siento, princesa. No lo volveré a hacer.

...

Llegué al aeropuerto con la respiración agitada, no me detuve a pesar de ello y busqué como loco a Valentina entre las personas. Pregunté por ella en las ventanillas y también le fui mostrando la foto que tenía de ella en mi móvil a la gente que me cruzaba.

- No, no la he visto.

- De todas forma le agradezco su cooperación.

Dejé que la pareja de ancianos siguiera su camino y subí las escaleras, tal vez estaban arriba esperando alguno de los vuelos a Asia.

Estaba desesperado, cansado y con la respiración entrecortada. No veía a Valentina por ningún lado, ni siquiera a Luna o a Natsu. La sola idea de que pudieron haberse ido antes me llenaba de coraje.

- Si, si la he visto - Vi un rayo de esperanza cuando oí a una muchacha de aproximadamente 19 años - Estaba con un señor en una silla de ruedas y con una niña pequeña, estaban hace unos quince minutos en la fila de las personas con destino a Miami.

- ¿Miami? - Frunci el ceño.

- El vuelo supuestamente es a las una de la tarde, eso es todo lo que sé.

Yo miré la hora en mi móvil, hace diez minutos que eran las una y de seguro ellos ya estaban abordando el avión.

No tuve tiempo de darle las gracias a la joven porque me dirigí a las ventanas del aeropuerto, busqué con la mirada a Valentina, solo esperaba que no fuera demasiado tarde.

- ¡Valentina! - Grité cuando logré verla entrando a uno de los aviones.

Como si mi vida dependiera de ello, corrí para llegar a ella e impedir que se vaya con ese hipócrita. Para mi mala suerte, choque con un guardia y este sopló su silbato para llamar refuerzos.

Con el objetivo de detenerme me comenzaron a perseguir.

- ¡Valentina! - Grité cuando estuve por llegar al avión donde ella ingresó - ¡Valentina! - Sentí unos agarres en mis brazos, los guardias lograron agarrarme y me impidieron seguir avanzando - ¡Valentina no te vayas!

Me tumbaron en el suelo para ponerme unas esposas.

- ¡VALENTINA!

...

Pov L.

Me quité los audífonos, me pareció oír mi nombre, miré detrás mío a los otros pasajeros, pero todos seguían en sus mundos.

- ¿Qué pasa, mami? - Luna dejó de jugar con su muñeca - ¿A quién buscas?

- No, a nadie - Sonreí y pasé mi mano por sus hombros para que ella se recargue en mi - Tú sigue jugando, amor.

- Este viaje será el mejor que haya hecho antes.

- ¿Por qué?

- Por qué ahora me divertire con mis papás juntos - Sonrió y yo reí - He soñado mucho con esto, mamá.

Nuestro conflicto quedó en el pasado, ella me prometió que no volvería a ser irrespetuosa con nadie si yo le hacía realidad un sueño que ella tenía desde que tenía memoria.

- Oye, pesas - El orangután de su padre también apoyó su cabeza en mi hombro - Natsu quita tu...

Sus ojos estaban cerrados.

- Ustedes dos me volverán loca... - Susurre en voz baja.

- Es así como deben ser las cosas... - Respondió él levantando el rostro - Así somos felices...

Yo no respondí nada, él sonrió de lado y yo reí desviando la mirada, admito que era un poco divertido oír sus locuras.

- Tú... - mis labios callaron.

Mis ojos se ampliaron con sorpresa y fui incapaz de mover un músculo.

- Vuelve a mi... Lucy... - Se separó unos centímetros, yo estaba pálida - Vuelve a mi...

Y nuevamente lo hizo.

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Continuará***

||" En esa habitación, contigo" [ Una Vida Sin Lucy ] || #Wattpad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora