Capitulo XXVI

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Pov L.

Estaba incrédula, sorprendida, absorta.

Me levanté haciendo a un lado a mi hija y le quité a Natsu aquellos análisis de... ¿Sangre?

- Por el momento lo que les puedo recomendar es que la futura mamá descanse mucho y que lleve una alimentación muy sana.

Esto parecía un sueño, un sueño que no sabía si era bonito o triste para mí.

El Doctor salió de la habitación y yo levanté la mirada con temor, Natsu nunca me lo perdonaría.

- Tres semanas... - No pude hacer otra cosa más que pedirle comprensión con la mirada en cuanto se volteó a verme - ¡Tres semanas!

- Yo te puedo explicar todo... - Mis ojos se llenaron de lágrimas - P-por favor... escúchame...

- ¡Tú te revolcaste con ese imbecil! - Su voz cargaba mucha rabia y eso me estremeció - ¡Tú no vas a tener un hijo de otro hombre! ¡Nunca lo aceptaré!

- ¿Q-qué me estás queriendo decir...? - Hablé llorosa.

- Lo que oyes - Su tono era muy frío - No sé como, pero te deshaces de ese bebé o esto se termina aquí.

- No... - Negué - ¡No! - Lo golpeé en el pecho - ¡Cómo puedes pedirme eso! - Mis lagrimas cayeron - ¡Yo no puedo hacer algo así! ¡No lo haré!

- ¡Si Taeyang se entera no nos dejará en paz! - Me agarró de los brazos - ¡Podemos impedir que eso pase acabando con el problema ya mismo antes de volver a Londres!

- ¡Ya te dije que no! - Me separé de él - ¡No voy a matar a mi bebé! ¡No haré la monstruosidad que me pides!

- ¡Lucy!

- ¡Es mi hijo! - Grité furiosa con él - ¡Yo no le haré nada! ¡Me creas o no este bebé fue hecho con mucho amor y no lo perderé! - Tenía un gran nudo en la garganta - ¡Es mío y tiene derecho a vivir porque no tiene la culpa de nada! ¡No lo abortare! - Me toqué el vientre - ¡Yo lo tendré aunque eso signifique que tengo que renunciar a ti!

- ¡Lucy, no hemos terminado!

Yo salí de ahí con el corazón hecho pedazos, no podía y no quería, mi bebé nacería, sin importar qué, la personita que llevaba en mi vientre conocería este mundo.

Un hijo mío y de Taeyang... un bebé que siempre me unirá a él, es como si la vida no quisiera que renunciara a mi coreanito.

Y no lo haría, nunca dejaría solo al hombre tan bueno que cuidó de mi todos estos años y que me hizo inmensamente feliz con su compañía.

- ¡Mamá! - Oí la voz de Luna, ella me buscaba con la mirada y se dirigió a mi corriendo cuando me encontró - ¡Mamá! - me abrazó con fuerza.

- Hija... - Yo la separé para ponerme a su altura y así sentir mejor su calor en aquel abrace que correspondi.

- No le hagas caso a mi papá - Se alejó - Él está muy enojado, pero ya se le pasará - Sonrió, quise hacerlo también pero las palabras de Natsu me habían lastimado profundamente - Yo quiero a mi hermanito.

- ¿En serio? - La miré feliz entre lágrimas, ella asintió.

- Por favor no le hagas caso a papá, yo quiero que mi hermanito nazca para jugar con él - Yo me levanté conmovida y ella me abrazó la cintura para pegar su oído en mi vientre - Yo lo amo... y no me importa si no tenemos el mismo papá, compartimos la misma madre y eso me hace muy feliz...

- Luna... - Acaricie su cabellera.

Saber que mi hija aceptaba a su hermanito alivió mi dolor. A mi solo me importaban mis hijos, sin importar quién fueran sus padres, eran míos y siempre serían lo primero en mi vida.

||" En esa habitación, contigo" [ Una Vida Sin Lucy ] || #Wattpad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora