¡ᴊɪᴍɪɴ ϙᴜɪᴇʀᴇ ᴜɴ ʙᴇʙé! © 𝙫𝙢𝙞𝙣 𝙢𝙥𝙧𝙚𝙜

12

—Tenemos un zombi con el culo abierto. Repito, un zombi con el culo abierto.

—¡Hoseok, deja de avergonzarme! —Chilló Jimin con las mejillas calientes. Se tocó el rostro apenado—. ¿Tan mal me veo?

—El kilo de ojeras que te cargas no es novedad, pero ese... pantalón no crees que llegue a explotar tu regordete trasero.

Jimin cayó al sofá abatido junto a Hoseok quien bebía de su soda con popote.

Hoseok volteó la mirada y encontró el temblor en los labios de Jimin. ¡Oh no, no, no, va llorar! ¡Ah! Esta vez sí que la he cagado.

—No, no, no ¡No me muevas los labios así! Vamos Jimin, no te desanimes ¡I-Iremos de compras sí prefieres!

Solo el parlotear hizo que ahora los ojos de Jimin se llenaran agua, reteniendo su puchero. Hoseok se puso aún más nervioso sin saber que hacer.

—¡Qué caso tiene si me veo mal! ¡No pienso salir así! —Se derrumbó Jimin más en el sofá, hundiendo su rostro de cachorro en la almohada.

—¡Ah! ¡Jungkook!

Hoseok corrió hacia la puerta de Jungkook, tocando varias veces sobre la madera, desesperado.

—¡Jungkook! ¡Jungkook! ¡Tenemos un código rojo!

Abrió la puerta Jungkook, asustado.

—¿Qué le has hecho ahora a Jimin, imbécil? ¡Qué no olvidas la última paliza que nos dio Taehyung por robarle el juego!

—¡Tienes que ver esto! —Lo tomó de los hombros hacia el pasillo de la sala, para esconderse detrás de la pared.

—¿Qué es lo que tengo que ver?

—¡¿Acaso no lo has notado?!  Jimin se está deprimiendo en la almohada, ¡otra vez!

—¿Y? Jimin es todo un drama.

—¿Qué no recuerdas lo que ha pasado en la semana? —Exclamó más desesperado Hoseok.

Jungkook negó, haciendo a Hoseok golpear su rostro.

—El lunes trajo más de 10 paquetes de Nuggets de pollo congelados. El martes lloró todo el día porque recordó a su mascota "el pez" que accidentalmente murió. El miércoles lavo nuestra ropa y plancho nuestras camisas sin cobrarnos nada ¡Hasta nos hizo galletas! Uh, pero el jueves fue lo peor. Los pobres de Yoongi y Taehyung tenía la marca de una plancha en sus mejillas por intentar hablar con Jimin —Dijo Hoseok, enumerando todo eso con sus dedos, para variar— De milagro no estuve ese día por mi turno.

Jungkook seguía procesando con una mueca más confundida.

—¿Ahora lo comprendes o te lo pongo con zanahorias?

—Ve la parte buena Hoseok, nos lavó nuestra ropa sin golpearnos por ser unos holgazanes —Sonrío Jungkook satisfecho.

Hoseok refunfuño y lo tomó de la oreja para que viera de nuevo a Jimin.

—¡Auch! ¡Ah! ¡Mi orejita!

—Jimin odia la comida congelada. Jamás tuvo un pez. ¡Y si lava nuestra lava nuestra ropa es para hacerla rosa y encogerla! Jimin odia cocinar postres y además, ¿por qué mataría a Taehyung cuando siempre es Jimin quien suspira por él? —Hoseok lo tomó por las mejillas para hacerlo reaccionar—. ¡Vamos Jungkook, que tus pocas neuronas se conecten!

—Dios... esta embarazado —Murmuró Yoongi detrás de ellos.

Hoseok y Jungkook giraron hacia Yoongi quien tiró su teléfono al suelo, congelado de su propia revelación.