Corazón Solitario.

Capítulo 4. No te preocupes por mí.

Vegeta entro a la Cámara de Gravedad, estaba molesto por el enfrenamiento que acaba de tener con la fastidiosa mujer de cabello azul, y con esa Sabandija amigo suyo oh lo que sea que fuera. "Pero quien se cree que es para hablarme así". Desde que llegué a la Tierra lo único que ha hecho esa estúpida terrícola ha sido retarme, pareciera como si no le tuviera miedo ni mucho menos respeto acaso no sabe que él es un Príncipe y por lo tanto merece respeto. Entonces recordó. "Soy un Príncipe sin reino y sin nadie sobre quien gobernar. El Príncipe de un planeta que ya no existe". Muchas veces esa mujer se lo recordaba al momento de mantener una discusión. Es increíble que me haya visto obligado a quedarme en este miserable planeta, debí exterminar a todos cuando tuve la oportunidad dijo con rabia, sin embargo me vi obligado a quedarme porque no tenía a donde ir, y aquí estoy viviendo bajo el mismo techo de esa insoportable mujer que lo único que hace es retarme y burlarse de mí, nunca le perdonare haberme obligado a usar esa ridícula camiseta rosa el día que volví a La Tierra. Se acercó al panel de Control de la Cámara de Gravedad y presionó el botón que controlaba el núcleo gravitacional, en un instante su cuerpo se volvió más pesado ahora estaba bajo una gravedad aumentada 300 veces, activo los robots que usaba en su entrenamiento y concentrándose comenzó a lanzar golpes en el aire y concentrándose aumento su ki enviando disparos hacia esas chatarras.

Vegeta aumento su ki, la ira que sentía en su interior aumentaba cada segundo, no podía asimilar el hecho de que un guerrero de clases baja lo haya superado alcanzando la transformación de Súper Saiyajin, y en cambió él que había nacido con el nivel de poder más alto conocido entre los Saiyajin, que desde pequeño fue capaz de aniquilar mundos enteros, ahora era humillado. "Como pudo ser posible que yo el Gran Vegeta, el heredero al trono del planeta Vegita, haya sido superado por un miserable de clase baja". "Yo era quién tenía el derecho de convertirse en un Súper Saiyajin, y ser encargado de eliminar al infeliz de Freezer". En ese momento Vegeta no midió su fuerza envió una ráfaga de ki tan grande que la nave no pudo resistir más, en menos de un segundo La Cámara de Gravedad se llenó de una fuerte luz blanca para posteriormente explotar en mil pedazos.

***

Yamcha empezó su entrenamiento en el patio trasero de la Corporación Capsula, inicio con un pequeño calentamiento antes de iniciar dando unas patadas y golpes en el aire. Todavía no podía entender por qué su novia permitía que alguien tan peligroso y mal agradecido como Vegeta se quedara con ella haciendo uso de la Tecnología de la Corporación Capsula sin siquiera mostrar gratitud. A veces tenía la impresión de que Bulma sentía cierta admiración hacia ese Saiyajin, pero ¿Podría ser eso posible?, Bulma nunca sentiría atracción hacia alguien tan detestable como Vegeta, además él era su novio, el la amaba y ella lo amaba, al menos eso era lo que pensaba. ¡No puedo concentrarme sabiendo que ese Saiyajin está cerca ¡no entiendo porque le tiene tanta admiración, ¿será por su fuerza?, si es así le demostrare a Bulma que puedo entrenar al mismo nivel que ese loco alienígena lo hace.

Decidido se escabullo por el patio en busca de una de las Cámara de Gravedad que el Dr. Briefs había construido sabía que tenían una de emergencia en caso de que la otra pudiera dañarse, sintiéndose seguro de que nadie lo observaba abrió la compuerta de la nave y cerró la puerta tras él. Completamente decidido en demostrar que podía entrenar del mismo modo en que lo hace Vegeta presionó el botón que activaba la gravedad mismo que ya estaba activado para alcanzar 300 grados de gravedad, sin embargó en cuento presiono ese botón fue tumbado inmediatamente al suelo, su cuerpo se volvió muy pesado y la presión era insoportable.

Sabiendo que no resistiría mucho tiempo, hizo un último esfuerzo para para apagar la gravedad antes de quedar aplastado. Una vez que la gravedad en la Cámara volvió a la normalidad no entendía como Vegeta podía entrenar de ese modo, ¡Definitivamente debo esforzarme más en mi entrenamiento! exclamo. Volvió a entrenar en el patio como lo estaba haciendo en un comienzo cuando de repente una fuerte explosión se escuchó.