Corazón Solitario.

Capítulo 8. Sentimientos Heridos.

Había transcurrido medio año desde que los guerreros Z fueron avisados de la llegada de los Androides. Todo seguía como antes, Vegeta entrenaba cada vez más duro y aunque había incrementado su fuerza enormemente, todavía no llegaba a convertirse en un Súper Saiyajin lo que lo molestaba constantemente razón por la que empezó a considerar irse a entrenar al espacio pues sentía que no podía liberar todo su poder interior si seguía en La Tierra.

Para Bulma las cosas no habían cambiado mucho, los nuevos Proyectos de la Corporación Capsula que dirigía la mantenían agotada, sin contar que su huésped alienígena la molestaba constantemente para que le reparara su Cámara de Gravedad, oh para que le repare sus robots. Después de todo este tiempo no había logrado llevarse muy bien con Vegeta. El todavía mostraba arrogancia y superioridad, de forma que se volvió normal para ella mantener una discusión con él casi a diario, después de todo ambos tenían un carácter explosivo por lo que siempre estaban a la par a la hora de un intercambio verbal.

Y por otro lado estaba Yamcha, las cosas con él tampoco habían cambiado mucho. A menudo discutían y se volvían a reconciliar. Muchas veces Bulma se cuestionaba si realmente seguía amando a Yamcha, oh si todo entre los dos se había vuelto costumbre. Después de todo salía con él desde que tenía 16 años así que era normal que se acostumbrara a su presencia y a ese tipo de relación que a veces podía resultar bastante Toxica. Pero que podía hacer no podía dejar atrás tantos años de relación, además ya empezaba a ser hora de que ella asiente cabeza y empiece a formar una familia. Por supuesto no es qué estuviera vieja es solo que ya tenía 31 años y era una edad apropiada para dejar atrás su vida de soltera y empezar a formar una familia. La pregunta era ¿Con quién?. Yamcha no parecía dar muestras de querer formalizar su relación. Y ella tampoco se sentía con ganas de conocer a otra persona.

Justamente ese día Yamcha la había invitado a cenar en un lujoso restaurante con todos sus compañeros de su equipo de Béisbol era una celebración tras su última victoria, así que era el motivo perfecto para cambiar de look. Luego de pasar gran parte del día de compras en el Centro Comercial, se dirigió a su Peluquería favorita era hora de despedirse de sus rizos y opto por llevar el pelo lacio y largo de nuevo, le gustaba como se veía en especial su flequillo la hicieron sentirse joven otra vez, como si hubiera vuelto a aquellos tiempos en los que viajaba por el mundo en busca de las Esferas del Dragón.

Al llegar a la Corporación Capsula se encontró a Vegeta haciendo flexiones de pecho en el jardín y quiso ir a saludarlo. ¡ Buenas tardes Vegeta!,¿Cómo va tu entrenamiento?. Vegeta volteo a mirarla, pero como era de esperarse no le devolvió el saludo. "Hasta que por fin regresaste, necesito que me hagas más robots , los que me diste la otra vez se destruyeron por completo, deberías hacer unos más resistentes" ¡Aquí vas de nuevo, no soy tu sirvienta!. "Y me temo que tendrás que esperar voy a salir esta noche así que cualquier cosa que desees tendrá que esperar". Vegeta gruño en respuesta y ella sonrió por eso siempre le parecía divertido la cara que ponía el Saiyajin, cuando ella le negaba algo. Por cierto Vegeta, ¿Qué piensas de mi nuevo look?, le pregunto con entusiasmo. Vegeta la miro de pies a cabeza y él dijo. ¡Luces fatal, igual oh peor que antes!, ¿Qué?, Pero como te atreves a decirme algo así Mono Incivilizado. Vegeta decidió entrar a la cocina empezaba a sentir hambre y no tenía ánimos de discutir con la mujer de cabello azul, así que sin decir más siguió su camino dejando una estérica Bulma gritando tras de él. Pero como se atreve a dejarme hablando sola otra vez, parece que nunca tendrá modales, suspiro Bulma. Bien eso me gano por preguntar algo así a un hombre tan arrogante, será mejor que vaya a arreglarme seguramente Yamcha no debe tardar en llegar.

***

Yamcha llego vestido formalmente y fue atendido por la Sra. Briefs quién le dijo que esperara en la sala a Bulma ya que no tardaría mucho en bajar. De repente su atención se desvió al huésped de su novia que en ese momento entro en la sala. ¡Hola, Vegeta!, Yamcha lo saludo sin embargo Vegeta no le contesto. Tan simpático como siempre eh, pero descuida que no me afecta el hecho de que no me devuelvas el saludo solo estoy aquí por Bulma. En ese momento se escucho la voz de Bulma diciendo que ya estaba lista. Ambos voltearon a verla, y quedaron con la boca abierta. Bulma lucia esplendorosa, usaba un hermoso vestido de color negro que resaltaba muy bien las curvas de su cuerpo, además ese vestido tenia un corte que permitía divisar una de sus piernas. ¡Te vez hermosa Princesa!, y se acercó para tomar la mano de Bulma y posteriormente darle un tierno beso en los labios. Vegeta se sintió disgustado ante esa escena, muchas veces se preguntaba que podía ver esa mujer en él. En fin eso no es problema mío pensó y mejor procedió a beber una lata de cerveza que tenía en la mano.