Corazón Solitario.

Capítulo 9. El final de una historia y el comienzo de otra.

Bulma abrió los ojos con cuidado. Sentía que sus párpados estaban hechos de plomo. El dolor de cabeza seguía golpeando en la parte superior de su cráneo y su boca se sentía reseca. Intentó en vano tragarse el sabor rancio. Instantáneamente se arrepintió de haber bebido tanto ayer.

Cerró los ojos de nuevo, respiró hondo y se masajeó las sienes.De repente, el olor de Vegetas se elevó en su nariz. Bulma no podía explicar de dónde provenía el olor. Cuando olió su almohada, el recuerdo vino como una bofetada en la cara. Bulma había estado muy borracha, pero aún no había perdido el recuerdo de la noche anterior. Recordó lo que le dijo ayer a Vegeta y que le había pedido que se acostara con ella. La sola idea de eso la hizo sonrojarse en su rostro.

¿Qué había hecho ella allí? ¿Y cómo debería comportarse ahora? ¡Nada de esto podría ser cierto! - Seguramente este mono arrogante está imaginando algo y cree que me tiene en sus manos. ¡Y Yamcha! ¿Qué pasaría ahora entre los dos? ."Es el fin todo acabo con él nunca le perdonare que me haya engañado, y aunque me duela y tenga que dejar muchos años de mi vida, y recuerdos a su lado atrás, yo lo olvidare, Yamcha no volverá a burlarse de mi otra vez", dijo Bulma totalmente decidida a dejar su historia con Yamcha atrás, aunque sea difícil ella cambiaria de página y no pensaba volver a llorar por él. Sintiendo una vez más un fuerte dolor de cabeza Bulma juró no volver a beber alcohol nunca más.

Cuando no pudo soportar más en la cama, se levantó y se dirigió a su baño una ducha helada le sentaría muy bien, se cepilló los dientes y por ultimo busco ropa para cambiarse. Después de eso se sintió un poco mejor. Al menos se sentía fresca. Cuando se vistió, buscó una pastilla para el dolor de cabeza en el botiquín. Cuando finalmente encontró lo que estaba buscando, lo tomó con agua y rezó para que actuara rápidamente. Él estómago de Bulma gruñó. Debe haber sido mediodía. Entonces ella bajó a la cocina. Desafortunadamente, la Sra. Briefs acababa de preparar la comida y todos estaban reunidos en la cocina. Cuando vio a Vegeta, se puso roja . Vegeta tomó nota de esto con una sonrisa desagradable. Trató de ocultar la vergüenza que sentía sobre esta situación. ¿Por qué habiendo tantas personas en el mundo? Tenía que ser Vegeta a quién le pidió consuelo para enfrentar la Infidelidad de su novio. Debe estar feliz por eso, de seguro me empezara a molestar cada vez que tenga la oportunidad pensó.

"Hola Bulma bebé. ¡Por qué te quedaste dormida por tanto tiempo ! "¿Fue una noche larga?", La señora Briefs le espetó. "Sí lo fue. Y por favor, no me digas bebé Mamá ya no soy una niña, "Bulma respondió irritada.

Bulma tomó un café, se sentó a la mesa y se volvió hacia el periódico. "Oh, sí, antes de que lo olvide el joven Yamcha te a llamado como 3 veces, deberías hablar con él". ¡No lo hare!, respondió Bulma llena de ira. Es más si ese idiota vuelve a llamar dile que no estoy, que me fui de viaje a algún lado, oh que me mude a otro país oh a otro planeta, pero no quiero verlo ni hablarle nunca más". Pero Bulma, que ocurrió entre ustedes para que digas eso, de seguro debieron tener una pelea no es así, Oh cariño las peleas entre las parejas son nórmales, nada es perfecto pero todo tiene solución descuida deja que te pase la rabia y cuando te sientas mejor habla con Yamcha." No Mamá, me temo que esta vez no ahí solución, ni vuelta atrás lo mío con Yamcha termino y no quiero hablar más de ese asunto".

Vegeta escucho atentamente lo que la mujer de cabello azul decía, por alguna razón le dio gusto saber que su relación con ese debilucho había terminado no es que le importara en lo absoluto, solo que siempre pensó que la peli azul a pesar de ser una mujer vulgar, gritona y mandona merecía a alguien mejor. Después de todo no era cualquier mujer tenía que reconocer que era muy bella, tenía un buen cuerpo y más que nada poseía una inteligencia superior a la de un humano promedio lo cuál era admirable sin contar que tenía mucho carácter, quizás sea débil en fuerza pero en carácter no esa forma de ser tan explosiva a menudo le recordaba al que tenían las mujeres de su planeta.. Al darse cuenta de que estaba adulando a esa mujer otra vez, decidió retirarse para continuar con su entrenamiento, no podía perder el tiempo el ya tenia una meta fijada y no podía distraerse con los problemas de una débil terrícola.