➵even a fool knows✧

❛ Capítulo 7 ❜

⚘.┋Hwang Kkami.

❛ ୫ ❜

Dos días después, Jeongin estaba nervioso, su cuerpo temblaba un poco y sus manos sudaban, era exagerado pero para él estar cerca de su platónico no es algo para tomarlo tan a la ligera, más cuando estaba tan lastimado por experiencia pasadas y no sabía si Hyunjin podía corresponderle.

Literalmente, Dawoon fue capaz de quitar toda su ropa del placard y combinó un montón de prendas, entre su criterio de moda y los gustos de Jeongin, decidieron por un buzo gris sin capucha de varias tallas más grandes y jean azul sueltos alrededor de sus piernas. Su outfit terminaba con un par de zapatillas blancas, un collar dorado con un colgante de plata y anillos en sus hermosas manos. Su cabello negro permaneció lizo y su pequeño flequillo partido a la mitad. Para su propio criterio, se veía decente y casual. Para el criterio de su amiga, estaba precioso y si Hyunjin no quedaba bobo al verlo, entonces el mayor estaba ciego.

Yang Jeongin es un monumento, fin de la historia.

En este momento, Jeongin se encontraba en un parque que, según las indicaciones vía mensaje de texto de Hyunjin, estaba cerca de la residencia Hwang. Enviando un mensaje que ya estaba en el lugar acordado, se sentó en una banca a esperar al mayor. Tenían que encontrarse ahí, luego irían al instituto para la práctica de fútbol del mayor y él se aventuraría por los alrededores junto al perrito.

Mientras esperaba se entretuvo con su teléfono, entre redes sociales y candy crash, se habían pasado casi quince minutos y no llegaba Hyunjin. Por un momento se preguntó si al final el mayor decidió no ir a su práctica y se había olvidado de avisarle. Últimamente Jeongin se sentía patético por hacerse ilusiones, emocionarse y luego su mente lo traía a la realidad de sopetón, como en esos momentos.

Se emocionó, se arregló quedando bastante decente y hasta bonito, había caminado y viajado en bus hasta ahí, ¿para nada? Jeongin bloqueo el teléfono y cubrió su rostro con sus manos, tratando que su cabeza se calmara y dejé de alterarlo con la situación. Respiro hondo y largo el aire por entre sus labios, los cuales estaban más brillantes por el bálsamo labial que le había aplicado Dawoon.

Un pequeño y ligero peso se apoyó por su pierna, apartando enseguida sus pensamientos y descubriendo su rostro, vio un perro de pelaje blanco. El animalito era de tamaño mediano, con bastantes mechones alrededor del cuello con las puntas indicando hacia todas partes, un ligero rosado recubriendo los contornos de sus ojos marrones oscuros y su boca, pero cubriendo completamente su nariz y el interior de sus orejas, las cuales estaban paradas. El precioso perro lo veía contento, apoyando su pequeña cabeza en la rodilla derecha de Jeongin, viéndose absolutamente tierno. Por el cuello del perrito hermoso y desconocido, se encontraba un collar rojo y por detrás del animal, se alzaba una correa del mismo color.

Los ojos de Jeongin impactaron con los de Hyunjin, quien miraba al menor curiosamente. Jeongin sintió su boca seca y al mismo tiempo que era capaz de babear a mares por el mayor. Y como no sí Hwang hacia lucir el uniforme del equipo, el cual contaba con camiseta y short hasta arriba de la rodilla, medias hasta la pantorrilla y zapatillas, pero aquella bandana descubriendo la frente contraria y dejando el cabello oscuro caer a los lados fue, sin duda, la perdición emocional y mental del menor.

Y ni hablar de Hyunjin, que quedó en medio de un corto trance al ver lo lindo y adorable que se veía Jeongin con un buzo de varias tallas más grandes que su menudo cuerpo junto a los sueltos jeans. La manera en la que estaba su cabello y el leve sonrojo que siempre parecía adornar las mejillas del menor era lo que complementaba la preciosa vista, una obra de arte sin dudas.

"¿Pero qué estás pensando, Hwang Hyunjin?" La pregunta se disparó en su mente con la voz de su padre, siendo un repelente para todos los adjetivos que estaba enumerando su voz interna por el chico frente a él. Sintió la irritación subir entre sus venas, corto la conexión entre los ojos de ambos y suspiro fregando su rostro con su mano libre.