Amor en Tiempos de Cuarentena | Tucu Correa

Puede ser hoy.

Al abrir los ojos, otra vez me perdí por unos milisegundos. Otra vez no estaba en el lugar al que me había acostumbrado los últimos días. Ahora estaba en una cama mucho más grande y cómoda. Y había dormido toda la noche con el calorcito del cuerpo del Tucu junto al mío. Tucu. Él ya no estaba al lado mío, de seguro ya se había levantado. Me estiré en la cama y hundí mi nariz en su almohada. Sentí el aroma a su perfumito impregnado en ella y suspiré. Ese chico me estaba haciendo sentir cosquillitas en la panza. Me sentía una adolescente embelesada por su amado. Estaba volviendo a sentir cosas que tenía olvidadas.

-Buongiorno principessa- dijo él en un fluido italiano, mientras prendía la luz y dejaba algo sobre la mesita de luz

-Ciao principe- le respondí utilizando lo poco que manejaba del idioma y sonreí

-Te voglio bene- sonrió con ternura. Y sí, me daban ganas de morfarlo a besos

-¿Qué hora es?-

-Las dos… Madrugamos hoy- bromeó

-¿Hace mucho te levantaste?- dije sentándome en la cama

-No mucho… Pero quería preparar esto- se sentó al lado mío y puso la bandeja en medio de nosotros -Chocolatada con medialunas… Otra vez- rió -Pero sé que te encantan- agarró una y me la acercó a la boca para que le dé un mordisco -¿Qué vemos?- prendió la tele que tenía en su cuarto

-¿Ponemos Élite? Nunca la terminé de ver-

-Bueno, la ponemos y vemos hasta dónde llegamos-

-¿Tenemos algo que hacer acaso?- reí

-No… Pero no me voy a aguantar de darte besos así- me dio varios besos cortos -Y no te voy a dejar ver nada-

-Tonto- me puse colorada

-¿Te gusta estar así?-

-Sí…- suspiré

-¿Pero?-

-Tucu- lo miré -¿Qué va a pasar después?-

-¿A qué te referís?-

-Bueno, Desiré…-

-¿No te dije que la iba a dejar acaso?-

-Pero todavía no lo hiciste y… No sé, tengo miedo-

-Bueno, no la dejé porque ni siquiera hablamos más- se alzó de hombros -Confiá en mi, Galita-

-Confío, pero no me falles-

-Desde los doce años que estoy enamorado de vos, ¿Te parece que te voy a fallar?-

-¿Tanto tiempo?- me reí y negué con la cabeza, mordiéndome el labio

-Desde que entré al colegio y te vi ahí toda rockerita… Tenías tu estilo, distinta al resto-

-Eras dormilón en serio, eh… Años ocultándolo-

-¿Me hubieses dado bola?-

-Seguro que sí, si eras tan lindo y tan buenito… Bueno, sos- aclaré -Pero… Por algo las cosas se dieron así, imaginate, si me costó alejarme de vos siendo una amiga, mirá si me dejabas para venirte para acá-

-Te iba a traer conmigo-

-Tucu, éramos chicos- dije con obviedad

-En serio Gala… Durante el primer año me la pasé ahorrando para mandarte un pasaje… Me había decidido a invitarte, que vinieras y como quien no quiere la cosa te iba a confesar todo esto- me quedé mirándolo perpleja porque no esperaba esa confesión