Sorpresa ¿Te amo? ❥ Ateez present! ❥

IV

Aquel día Seonghwa se había despertado con la charla que tuvo con su compañero en el bar, las cosas que se habían confesado y los secretos que parecían guardar ahora el uno del otro. Hizo el desayuno y mientras tomaba de su café vio como los demás iban saliendo de sus madrigueras hacía la cocina, le ofreció un poco de café a Yeosang quien llegó a su lado primero que el resto y le dedicó una pequeña sonrisa.

Ciertos dos asomaron a la cocina con algunas carcajadas, Seonghwa y Yeosang miraron hacía donde Mingi y Hongjoong y el menor no pudo evitar ver a su compañero de café de reojo, el mayor del grupo se giró dándole la espalda a los demás y puso más café a preparar.

—Se ven bastante animados ¿Ya no estás enojado, Mingi? —Yeo saludó con una pequeña sonrisa tras decir aquello y Mingi formó una sonrisa algo avergonzada por cómo había actuado el día anterior.

—Perdón por eso, han sido días difíciles para mí, casi me muerde un mapache —el rubio soltó un "pff" por las ocurrencias del pelirrojo y negó caminando hacía la mesa para sentarse y continuar con su taza.

—Fuimos a jugar bolos para soltar el estrés ¿Qué hicieron ustedes? —preguntó entonces el líder caminando hasta quedar junto al mayor del grupo y palmeó su espalda antes de ayudarle con el café.

Seonghwa se tensó un poco, ya sea por el contacto o por los recuerdos de la charla que había tenido, solo dibujó una pequeña sonrisa esperando que fuese Yeosang quien comenzara a decir lo que había hecho en su tarde libre.

—Buenos días~ —dijo de forma perezosa Wooyoung asomándose a la sala, todos levantaron la vista y notaron que traía cara de que había pasado tiempo demasiado pegado a alguien engripado.

—No me digas que también te enfermaste —no había terminado de decir aquello Hongjoong que el menor estornudo con todas sus fuerzas. Yeosang le miró arrugando la cara.

—Tápate la boca —le regaño y Woo le miró con ojitos de cachorro. Tras su aparición se asomó San con las medicinas que había tomado antes y saludo con su mano a los demás, pasó de largo y tomó un vaso para llenarlo con agua y entregárselo a Woo junto a la medicina.

—¿Cómo te sientes? —Le preguntó Seonghwa al falso maknae con una pequeña sonrisa mientras ponía algo de agua para un par de tés de limón.

—Mejor, Woo se ha quedado toda la noche cuidándome —sonrió formando aquellos hoyuelos que lo caracterizaban—. Aunque ahora creo se ha resfriado.

—¿Y Yunho?

—Durmió conmigo —dijo Yeosang, todos llevaron la vista hasta el rubio quien sintió la cara arder por la atención recibida—. Es decir, cambió de cuarto con Woo.

Hubo un silencio donde se escuchaban las tazas y los platos con el desayuno que iban llevando los dos mayores a la mesa, en ese momento se asomó Yunho y saludó al resto con una sonrisa. La mirada ahora de todos se posó sobre él, la de Woo, Seonghwa y Mingi era curiosa mientras que el líder le miraba hasta divertido al notar que Yeosang seguía algo incómodo por cómo había sonado al decir aquello.

—Perdón, Yunho. Tuviste que irte del cuarto ayer por mi culpa —y allí estaba San abrazando la cintura ajena de forma tierna. El más alto sintió un cosquilleo en el estómago por aquel gesto, un gesto que, si bien el menor solía tener con todos, en esos momentos fue completamente distinto para la mente de Yunho.

—Lo vas a terminar contagiando a él también —el tono mordaz de aquella voz hizo que volvieran a poner sus ojos sobre la figura del rubio. Seonghwa arrugó un tanto su entrecejo y ante aquello Yeosang apartó la mirada y la clavo sobre su taza. No sabía porque lo había dicho de esa manera, pero ya lo había dicho.