꧁𝑯𝒂𝒔𝒕𝒂 𝒒𝒖𝒆 𝒎𝒆 𝒓𝒆𝒄𝒖𝒆𝒓𝒅𝒆𝒔꧂

Capítulo V

[Narra la escritora]

Krist no sabía como reaccionar ante aquellas palabras, no sabía sí simplemente sacar a ese chico de su casa o derrumbarse a llorar.

Un recuerdo había llegado, otra frase que chocaba en su corazón. Un mensaje que lo marcó.

《Tú novio no es tan bueno cómo crees ¿Qué crees que hace en sus giras mientras tú no estás? Solamente hablar no creo. Hasta imagino que no irá al día de su boda ya que ha de estar ocupado. 》

-Bueno cómo no está aquí ahora, creo que sí puedo hacer esto- habló Nicky acercándose de manera cazadora hacía Krist, mientras este todavía estaba aturdido- ¿Puedo comenzar el cortejeo?

Krist no sabía que hacer exactamente así que solo se quedo inmóvil hasta que el ruido de una puerta capto su atención.

-¿Krist?- hablo Singto entrando a la casa del menor con la llave que la madre de este le había otorgado.

Singto miró en dirección a Nicky y se sorprendió al verlo ahí, aunque no fue una sorpresa de la buena.

-¿Qué haces aquí?- pregunto tratando de mantener la calma- O mejor dicho ¿Qué haces aquí con él?

-Joo... Sigues siendo un aguafiestas

-Me importa poco que pienses ¿Qué haces aquí?

-Pues diciéndole a este hermoso chico unos datos curiosos- dijo sobando la mejilla del menor a lo que rápidamente Singto saco aquella mano de un movimiento.

-Pues no creo que a Krist le interese mucho.

-Pues el no a dicho eso así que...- dijo esta vez mirando a Singto- Creo que puedo comenzar ir tras él.

-¡Fuera!- habló Singto cansado de está conversación- ¡Fuera maldita sea!

Al instante Nicky se levantó dispuesto a irse, no sin antes mandarle una mirada coqueta a Krist que aún seguía procesando lo que había pasado frente a él.

-Krist ¿estás bien? ¿No te hizo algo?- comenzó a preguntar Singto preocupado.

-Pues estoy bien ¿Qué me pudo haber hecho? Además ¿Me puedes explicar que acaba de pasar y por que no quieres que se me acerque?

-Krist... Lo siento...

-Lo siento pero no puedo decirte nada de eso para no alterar tus recuerdos- interrumpió Krist- Ya me se ese diálogo, así que mejor ahorratelo.

-Lo siento Krist, solo te pido que no dejes que el se te acerque por favor- habló tratando de agarrar la mano del menor aunque este rápidamente la apartó.

-Primero dime por qué debería hacerlo.

-No puedo, yo...

-Pues sí no me das una razón válida no lo haré.