¨𝓶𝓸𝓸𝓷¨ ꧁ ( 𝙧𝙪𝙗𝙚𝙜𝙚𝙩𝙩𝙖 ) ꧂

✦ 𝙘𝙖𝙥𝙞𝙩𝙪𝙡𝙤 10 ✦

A la mañana siguiente, Rubén despertó, apenas lo hizo se levantó de golpe corriendo a su baño, viendo su reflejo, soltó un suspiro aliviado viendo que seguía siendo chica, cepillo y ordenó su cabello para menos incomodidad y regreso a la sala más tranquilo, viendo a Samuel recostado, seguía dormido.

Comenzó a darle vueltas a que hubiera pasado si despertaba siendo chico, y si Samuel lo veía antes, situaciones muy incómodas, decidió ignorar todo eso, si no pasó, no había porque prestarle importancia, caminó hasta la cocina, lo mínimo que podía hacer era preparar algo rico de desayunar para el pelinegro. No sabía hacer gran cosa pues casi todos los días comía fuera de casa, pero lo que mejor le salía eran unos hotcakes, su madre los preparaba cuando él era pequeño, y era el mejor desayuno del mundo, no le quedaban idénticos, pero estaban hechos con ese amoroso recuerdo de mamá.

Samuel despertó unos cuantos minutos después, aturdido, su cabello estaba desordenado, algunos mechones estaban sobre su rostro, sus ojos apenas enfocaban, cuando finalmente lo hicieron, notó que ese no era su cuarto, recordando al instante el día pasado, se había quedado dormido, avergonzado por esto, se levantó, ordenando un poco su cabello pasando sus dedos sobre este, vió a aquella chica que lo tenía tan confundido sentada, ella estaba viendo una pila de hotcakes mientras su cabeza estaba recargada en su mano, su mirada se dirigió hacia él, mostrando una sonrisa.

- Despertaste, ¡buenos días!

-Buen día... -Se acercó, sentándose en donde le indicó - perdón... me quedé dormido ayer, no era mi intención quedarme a pasar la noche en tu casa -realmente apenado, bajó la mirada-

-No te preocupes, eso no importa, no eres ningún extraño, la lluvia era fuerte, y además tú me cuidaste, así que darte un lugar cómodo para descansar y un buen desayuno me hace sentir mucho mejor - Sirvió un plato con 3 hotcakes, entregándoselo mostrando una amable sonrisa- Bueno, no puedo decir que es el mejor desayuno, y que sabe delicioso, pero espero te gusten...

-Samuel miró la comida, sonriendo, sus palabras lo habían hecho sentir mucho más cómodo, era cierto, no son extraños, agradecido, probó aquellos hotcakes, quedando muy sorprendido por su delicioso sabor- Saben demasiado ricos

-¿en serio?, ¡me alegra!, pero no se acercan a los que prepara mamá, ella los hacía para mí cuando era peque, son el cielo... extraño sus comidas -Igualmente comenzó a comer, la luz matutina entraba por las grandes ventanas, dando un ambiente muy cálido-

- ¿Cuándo volverás a visitar a tus padres? -preguntó Samuel mirándola atentamente, mientras disfrutaba del desayuno -

- Tenía planeando ir en unos cuantos meses, pero no sé si pueda, están pasando tantas cosas, y no creo poder darme ese lujo de un viaje a Noruega en estos momentos - el ánimo de Rubén decayó un poco-

-Yo se que los vas a poder ir a visitar, así que no te preocupes - El ánimo volvió a subir cuando escuchó esto, mirando agradecido al pelinegro-

-Gracias...

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La mañana pasó tranquila, entre algunas risas, y conversaciones interesantes, cada vez sentían más interés por el otro, el físico poco a poco dejaba de ser el atractivo principal, si, ambos tenían características que atrapaban al otro, pero no había nada mejor que enamorarse de una linda personalidad.

Samuel se despidió muy agradecido, cuando Rubén cerró la puerta, soltó un suspiro sintiéndose completamente en las nubes, se sentía demasiado mareado y eufórico, como sí estuviera drogado, su corazón saltaba emocionado al pensar en lo poco que habían vivido, se dejó caer en su cama viendo el techo de color blanco.