Fithpo: Fight The Power (Green Land)

La Huída En Tall Trees Woods

Con completo sigilo Vert iba avanzando cargando el cuerpo inconsciente de Amelie Baudin a sus espaldas. Hacía unas dos horas que abandonó el pueblo, y para salir de aquel bosque aún necesitaría un día completo más. No podía usar el camino principal de Tall Trees Woods, así que había decidido ir bosque a través. Debía estar muy pendiente todo el rato de no encontrar algún grupo de guardias del ejército de Kruschev, pero también debía estar pendiente de no encontrarse con los ladrones del bosque. Tampoco podía desatender a Amelie, la había dejado inconsciente y no podía dejar que le pase nada malo.

-Hmm...

-Oh, veo que estás despertando.- Dijo Vert.

-¿Vert? ¿Dónde estamos?- Preguntó la niña

-En mitad de Tall Trees Woods.

Amelie parecía estar recuperando el conocimiento poco a poco. Repentinamente dio un salto hacia atrás y se bajó de la espalda del joven. Al hacerlo cayó sentada sobre la tierra.

-¡Ah, ya recuerdo! ¡Vert, tenemos que volver a por mamá!- Gritó la niña.

-No podemos volver. Si lo hacemos vamos a morir también.

-¡Me da igual, quiero ver a mamá una última vez!

-¡No voy a dejar que tires tu vida por algo así! ¡Tristemente tu madre ha fallecido, pero ella no quería que tú corras esa misma suerte!

-¿¡Y qué sabrás tú de lo que querría mi madre!?

-¡Ella me puso a tú cargo hasta que llegáramos a la capital a ver a tú padre! ¡Y mientras estés bajo mi responsabilidad no vas a morir!

Amelie se quedó callada, con la mirada baja. Las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos. Vert observaba con triste expresión.

-Amelie, no quiero que te pase nada. Así que por favor, continuemos el camino.

La niña seguía llorando. Levantó la cabeza y vió al joven esperándola.

-Vert... Continuemos...

Amelie se levantó y comenzó a caminar al lado del chico. Estuvieron andando sin mediar palabra aproximadamente otra hora y media, cuando comenzaba a oscurecer.

-Creo que deberíamos descansar. Aún nos queda un largo camino, busquemos algún sitio para descansar.- Dijo de repente Vert.

-¿Dónde? ¡Estamos en mitad del bosque!- Respondió Amelie.

-Sí, en eso tienes razón.

El joven y la niña comenzaron a pensar.

-¿No puedes usar magia para hacer una hoguera o algo así?- Preguntó la niña.

-No puedo.

-¡Pero si sabes usar magia! ¿No puedes hacer luz aunque sea?

-Yo uso la magia para aumentar mi velocidad y reflejos, no tiene nada que ver con la magia elemental ni con la de invocación.

-¿Es que hay distintos tipos de magia?

-Sí. Te lo explicaré en cuanto encontremos algún sitio pa-

Una macabra sensación inundó al joven. Había notado algo cerca.

-Amelie, agáchate y no hagas ruido.

Seguido de la niña, Vert comenzó a avanzar en completo silencio. Se asomó por encima de unos matorrales y dejó salir una exclamación de sorpresa.

-Oh, mierda.

El claro del bosque que había justo delante estaba cubierto por los cadáveres de un montón de personas, y la hierba y tierra de la zona se encontraban cubiertas de sangre y vísceras. Parecía que allí había ocurrido una auténtica masacre, probablemente por el ejército de ese Mago Oscuro. Quiénes eran las personas era un auténtico misterio. Iban vestidas (lo poco que no estaba cubierto se sangre y vísceras o destrozado) como si fueran gente de algún pueblo. La villa más cercana no era el pueblo del que Amelie y él venían, pero tampoco estaba lo suficientemente cerca. Vert notó una pequeña luz al otro lado del claro.