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Me levanté de la cama y apresuradamente tomé mi mochila para salir de allí e ir a buscar a mi familia en mi Mundo.
-¿Qué haces? -Dice Minho alzando la voz y apoyándose en la puerta de entrada de su casa.
-Debo irme -Contesté también alzando la voz para que logre escucharme.
Minho hizo una mueca y cerró rápidamente la puerta de su casa para luego extender sus alas y alcanzarlo. -Cómo que debes irte, ¿Hacía dónde? -Preguntó ahora estando detrás mío.
-A buscar a mi familia, no puedo quedarme de brazos cruzados esperando noticias sobre ellos.
-Espera, no puedes ir allí, tu Mundo está completamente destruido y te podrían devorar.
Sin poder evitarlo se me sale una risa sinica. ¡Que está diciendo! -¿Y que quieres que haga?, ¿Esperar a que alguien vaya por ellos? -Cuestione alterado. -No pueden esperar. Pueden estar en peligro, sin agua, sin comida. No me puedes pedir que espere.
El suelta un suspiro comprendiendo que no voy a ceder. -Está bien haz lo qué quieras.
Lo miré de reojo con una expresión sería y vi cómo volteaba para irse por otro camino, hice mueca y apresuré mis pasos para salir de la entrada de este Mundo, antes de pisar la línea negra escuchó unas pisadas aterrizar detras de mí y voltie a lo qué rápidamente junté mis manos para agarrar lo que me había lanzado, dos botellas de agua.
-Ten, las necesitarás.
Sonreí de lado. -Dijiste que me ibas a ayudar, veo que te gusta mentir.
-Claro, dije que te ayudaría, pero nunca dije que me arriesgaría por ti Humano.
Sus palabras habían hecho que me diera una punzada en el pecho, ¿Porqué me había dolido tanto? Solo es desconocido y un maldito Hyde que ya empezó a caerme mal. Traté de no darle importancia y me di la vuelta sin echarle una última mirada y seguir mi camino, sólo, cómo siempre lo he hecho.
Saqué una tira de mi mochila para poder abrir el cierre y colocar dentro las dos botellas de agua que me había dado.
Ir a mi casa era mi primer destino y luego al supermercado dónde había vivido lo peor.
Largas caminatas sin descanso, ya estaba dentro de mi Mundo nuevamente, y sólo quería ir por mi objetivo, encontrar a mi familia y a mi hija. Aún tenía esperanzas de que ellos estuvieran vivos.
No podía creerlo, parecía como si un tornado hubiera golpeado todo mi Mundo y convertirlo en puros desechos, cuerpos en el suelo y charcos de sangre rodeandolos, no sé como todavia no caí desmayado, evitaba mirar al suelo muchas veces.
Llegué a mi casa y dejé mi mochila en el suelo para buscar en cada rincón a mi familia, gritaba sus nombres para darles señal de qué era yo. Pero nada. Nadie estaba aquí, ahora mi búsqueda se volvió más desesperante, agarré mi mochila y salí de la casa corriendo y gritar lo más fuerte que podía para ver si alguien podía escucharme, a lo qué calle rápidamente y me escondí detrás de un auto, claro muchos podían escucharme, había caído cuando vi a lo lejos a un No ser Humano corriendo hacía mi por haber escuchado mi voz, tonto.
