Capítulo 3

5.9K 815 327
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



-¿Qué? Eso es imposible, yo vi cómo... -Los recuerdos de ese momento llegan inmediatamente, mi hija vomitando sangre, alguien tomándome del brazo y arrastrandome lejos de ella. Aika tratando de llegar hacía donde yo estaba, lo último que recuerdo es verla rodeada de esos Humanos extraños. No... Es imposible que sea ella, una niña de 4 años no puede sobrevivir sola a ese ataque.

-¿Cómo están tan seguros de que es mi hija? ¿Quién es ese hombre que la tiene?- Pregunté exigiéndoles que me respondan.

La mujer da un suspiro de fastidio y me mira con cara de pocos amigos. -Es todo lo que sabemos Humano, teníamos que decirte y ya lo hicimos así que por favor no nos hagas perder el tiempo. -Dice con un tono duro. -De todas formas ya debemos irnos.

-No, esperen, no pueden irse, necesito saber si a la que ustedes vieron era mi hija porfavor. -Digo desesperado, son la única esperanza que tengo para saber si en verdad Aika está bien. -Debo saber quién es ese hombre.

-Lo sentimos, no sabemos nada más. -Dice mientras se alejan un poco y extienden sus alas para comenzar a volar.

-¡No, porfavor esperen! -Les grité pero es inútil, no me escuchaban, ya están demasiado lejos para hacerlo y aunque hubieran escuchado se que no me harían caso. -¡¡Ahh mierda!! -Dije gritando con todas mis fuerzas tratando así de sacar toda la frustración que tenía dentro.

Comienzo a caminar hacía un punto desconocido, escuchando aleteos sabiendo que Minho me estaba siguiendo.

Estoy molesto, ¡Maldición! Estoy muy molesto, como se atreven a venir y decirme que mi hija esta en manos de un desconocido para luego irse sin dar mas explicaciones. ¡Y ni siquiera me conocen! -Me dije a mi mismo.

-¿A dónde vas? -Escuché a Minho decir detrás de mi.

Me detengo rápidamente y enderezo mi espalda observando a mi alrededor dándome cuenta que estaba caminando sin rumbo fijo. ¿A dónde voy? Ni siquiera lo sabía, no conozco este lugar. -Pienso.

Minho observa de perfil mi rostro de confusión y ríe suavemente mientras da media vuelta y retoma el camino por dónde veníamos. -Ven vamos a mi casa, así descansas un poco.

Solo asentí y lo seguí por detrás, entramos en una calle donde hay pequeñas casas, o habitaciónes como ellos lo llaman, una al lado de otra. Se detiene frente a una casa rosada con muchas flores alrededor, cubriendo también el pequeño ventanal, enterró sus alas y me hizo entrar después de él. Por dentro sólo hay una cama donde cabían al menos dos personas, y un pequeño ropero.

-¿Quieres algo para tomar? Puedo ir a buscar.

-No. -Contesté con voz dura y al parecer el se da cuenta que estoy enojado ya que da un suspiro mientras se sienta en la cama.
-¿Conocías a esas personas? -Pregunté.

𝐌𝐮𝐧𝐝𝐨𝐬 𝐃𝐢𝐬𝐭𝐢𝐧𝐭𝐨𝐬 | ᴹⁱⁿˢᵘⁿᵍDonde viven las historias. Descúbrelo ahora