5. Diciembre, 2019 (2)

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Volvíamos a estar sentados en esas gradas delante de ese pequeño escenario. Mirábamos a un lado y a otro, viendo que solo quedábamos la mitad de los que habíamos entrado por la puerta de la nave. La academia estaba cada vez más cerca. Mi mente volaba imaginándose ya dentro de la academia. Noemí volvió a presentarse en el medio del escenario interrumpiendo mis pensamientos.

- Ya habéis visto, antes de acabar el primer día quedáis prácticamente la mitad de los que habéis llegado esta mañana - dijo Noemí después de anunciar el primero de los tres veredictos que escucharíamos esos días. - Mañana haréis las pruebas grupales, es vuestra decisión escoger grupo y canción, la única condición es que debe ser un tema de OT 17 u OT 18. Escoged rápido el grupo y el tema, porqué solamente tendréis hoy y mañana por la mañana para prepararos la actuación. Y... con esto y un bizcocho hasta mañana a las ocho. - Se despidió con su ya habitual frase.

A mi lado estaban Rafa, Eva y Gèrard. A nadie se le cruzó por la cabeza formar un grupo entre nosotros. Mucho menos a mí, que en ese momento me fije en la niña de la peca, sentada en el otro lado de las gradas. Ella también había pasado a la fase grupal y quería felicitarla después de nuestro encuentro en los baños. Justo cuando me levanté para ir a hablar con ella se me adelantó un chico, la besó en los labios y levantó del suelo con un fuerte abrazo. Otra vez, volvió a sorprenderme la rapidez con la que se creaban parejas en OT. Al contrario que con Gèrard y Eva no me puse celoso, simplemente me quede anonadado.

- Te has quedado embobado viendo a esos enrollarse - así me despertó Eva de mi trance.

- Son pareja? -pregunté, todavía sin creer la escena que había visto.

- No, pero digamos que hay confianza - reímos recordando el comentario de Gèrard. - Y tú tienes pareja?

- Si..., sí tengo - tardé en contestar. Esa fue la primera que olvidé a Aurora y Eva se dio cuenta. Supo de mi facilidad para manipular mis sentimientos y no dudo en aprovecharlo a partir de ese instante. - Y tú tienes pareja? - pregunté mientras señalaba a Gèrard con la cabeza de forma disimulada.

- Que nos hayamos enrollado nada más vernos no significa nada, no hay ningún contrato firmado ni nada - si, amigos, fue ella quién inspiró esa famosa frase.

- Ah - contesté y no me dio tiempo a decir más porque justo aparecieron un chico que parecía sacado de de un grupo de K-pop y una chica con una melena roja.

- Tenéis grupo para cantar? - preguntó de forma efusiva la pelirroja mientras el chico le lanzaba miradas a Eva.

- Yo sí - dijo Eva.

- No me habías dicho nada, eh - dije de forma tonta.

- No te había dicho nada porque no tenemos nada firmado - me contestó siguiendo el tonteo mientras me acariciaba la cara. Me quedé loco.

- Pues yo no tengo, voy con vosotros, como os llamáis?

- Ari y él, Flavio.

Volví a fijarme en las miraditas que se echaban Eva y Flavio, no habían hablado nada pero la tensión empezaba a notarse. Eso fue una de las cosas que me volvió loco de Eva, su facilidad para hacer que los chicos cayeran rendidos a sus pies, y como no, yo fui uno de ellos. Lo peor fue que no paré hasta que conseguí que ella cayera rendida a mis pies, sin importarme herir a las personas más importantes de mi vida, entre ellas la niña de la peca que hoy se casaba con el niñato del trombón.

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